domingo, 2 de diciembre de 2007

El Colegio de Farmacéuticos creará un jardín botánico medicinal en El Mayorazgo (La Opinión)

El colectivo planea una nueva sede de 3.000 metros cuadrados abierta a los ciudadanos y al turismo, y con un museo de Historia de la Farmacia
El Colegio de Farmacéuticos de Málaga negocia en estos momentos con el Ayuntamiento la cesión de una parcela en la zona de Mayorazgo Alto para la construcción de su nueva sede, que tendrá entre 2.000 y 3.000 metros cuadrados y en el que uno de los grandes atractivos será la construcción de un jardín botánico abierto al público con un completa colección de plantas medicinales.El inmueble, que podría iniciar sus obras en otoño de 2008 con vistas a estar operativo en 2010, incluiría también un museo de Historia de la Farmacia, y pretende ser la contribución de este colectivo a la carrera iniciada por Málaga para ser la Capital Cultural Europea en 2016.El presidente del Colegio de Farmacéuticos, Javier Tudela, explicó a este periódico que Málaga capital cuenta con dos excepcionales exponentes botánicos con la Finca de la Concepción y el propio Parque de Málaga, pero opinó que esta oferta podría completarse con un jardín botánico, compuesto por plantas medicinales."Nuestra intención es tener un colegio abierto a la sociedad de Málaga y a sus turistas, y pensamos que un espacio así podría incluso entrar en los circuitos de visitas", apuntó Tudela. Otra de las prioridades es la formación continua tanto de los colegiados como de los estudiantes de Farmacia, para lo que se dispondrá un Aula de la Naturaleza con programas de farmacognosis.Reciclaje de medicinas. Las instalaciones, que contarán con sala de reuniones abierta a eventos y foros de todo tipo, estarán diseñadas a partir de criterios de sostenibilidad y podrían disponer, además, de una planta propia de reciclaje de medicinas. Actualmente, casi la totalidad de las más de 600 farmacias de la provincia disponen de puntos SIGRE (sistema integrado de gestión y recogida de envases farmacéuticos) de la que son enviados a una planta de tratamiento en Galicia. El año pasado se recogieron 54 toneladas en Málaga y este año las previsiones indican que se estará cerca de las 60. El reciclaje de las medicinas permite generar energía eléctrica y papel, y evita que en las casas se acumulen botiquines que son, según apunta Tudela, "verdaderas bombas de relojería" debido a que los medicamentos abiertos y no precintados pierden fácilmente efectividad" o se olvidan y caducan. "Los colirios y las gotas de oído dejan de servir al cabo de un mes y los medicamentos en polvo a los que se añade agua sólo 15 días", recuerda.

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