domingo, 19 de octubre de 2008

El Consistorio obliga a retirar 700 árboles del Parque Guadalmedina (Málaga Hoy)

La mayoría de los ejemplares trasplantados por la UTE Colinas del Limonar se han secado y deberá reponerlos cuando acabe la urbanización que está construyendo
La Unión Temporal de Empresas (UTE) Colinas de Limonar no ha tenido más remedio que retirar los árboles que trasplantó en el parque forestal Ciudad de Málaga hace un año y medio y que se han secado por la falta de mantenimiento. El Ayuntamiento de Málaga obligará además a reponer todos los ejemplares que se han perdido con el aval que las sociedades tuvieron que aportar antes de solicitar la licencia urbanística para iniciar la obra de la gran urbanización de viviendas que están construyendo en la zonaMás de 700 olivos, algarrobos, encinas, higueras y limoneros que fueron plantados sin orden ni concierto en el recinto por estas empresas no lograron sobrevivir y la imagen que presenta el parque forestal se asemeja más al de un cementerio de árboles.Hace sólo tres semanas las empresas responsables de este estropicio cumplieron con las directrices que el Consistorio les dio el pasado verano para que retiraran y eliminaran todos los árboles que se habían secado por la falta de riego y cuidados durante este tiempo.La concejal de Parques y Jardines, Teresa Porras, advirtió de que el Ayuntamiento ejecutará el aval que la UTE entregó a la Gerencia Municipal de Urbanismo cuando solicitó la licencia para realizar los primeros movimientos de tierras y "tendrá que reponer todos los árboles que se han perdido cuando termine las obras".De los 1.009 árboles que la UTE Colinas del Limonar trasplantaron en el parque forestal Ciudad de Málaga antes de empezar la obra, sólo han logrado sobrevivir 300. La mayoría eran olivos y algarrobos, muchos de ellos con más de cien años de antigüedad, e incluso había encinas, especie que está protegida por la normativa ambiental actual.La mayoría fueron trasplantados en las laderas de los principales caminos del recinto sin un orden aparente y en terrenos pocos adecuados como cunetas o rodeados de escombros.Además, los agujeros que se hicieron para trasplantas los árboles eran poco profundos para enterrar las raíces, que en ningún caso fueron escayoladas ni las ramas tapadas para evitar que se perdiera la savia o fueran infectadas por algún hongo durante su traslado.

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