El Ayuntamiento estudia una aprobación parcial del documento, dejando fuera las nueve torres que, aún cuando se recorten, no reducirán su volumen edificable
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, afirmó ayer que el Plan General de Ordenación (PGOU) de Málaga "está maduro" y preparado para ser aprobado con carácter definitivo, a pesar del informe en contra de Aena que obliga al Ayuntamiento a rebajar la altura de nueve torres proyectadas en La Térmica, los antiguos terrenos de Repsol y San Rafael.
De la Torre indicó que el único obstáculo que por el momento frena la marcha del PGOU son "los enormes retrasos del plan de ordenación del área metropolitana". Por tanto, "cualquier reflexión que se haga en esta materia no retrasará para nada el plan". Desde este punto de vista sostuvo que el documento urbanístico de la ciudad, que comenzó a tramitarse hace cuatro años, seguirá su camino administrativo con o sin los rascacielos proyectos.
No obstante, argumentó que el Ayuntamiento aún no ha decidido si elevará el PGOU a la Junta de Andalucía para su aprobación provisional, dejando al margen los sectores donde están planteadas las torres o si, en cambio, se acometerán modificaciones y se someterá el conjunto del documento al criterio de la Comisión Provincial de Urbanismo.
Esta cuestión se resolverá en los próximos días una vez que los técnicos y asesores municipales testen las oportunidades que reales de que Aena y Aviación Civil hagan modificaciones en el espacio de servidumbre del aeropuerto sin afectar la seguridad aeronáutica.
Esta opción ya se acometió, por ejemplo, en el paseo de la Castellana de Madrid, donde se varió la servidumbre de un pasillo de emergencia de Barajas para permitir que el promotor y ex presidente del Real Madrid levantara cuatro megatorres en los antiguos terrenos del club. Si los técnicos "consideran viable convencer a Aviación Civil seguiremos adelante con el PGOU dejando en blanco estos sectores durante unos meses", según De la Torre.
El alcalde de la ciudad también indicó que el Ayuntamiento está dispuesto a barajar modificaciones y reordenar los proyectos afectados por el informe aeronáutico, de modo que se gane en horizontal los volúmenes de edificabilidad que puedan perderse en vertical. Esta fórmula implicaría una mayor ocupación de los terrenos previstos para zonas verdes y de equipamientos ciudadanos en estos tres puntos de la ciudad.
Al tiempo en que insistió en que se evitarán retrasos en la tramitación del documento urbanístico, Francisco de la Torre afirmó que se tratará de "defender los proyectos que tratan de crear centralidades e impulsos nuevos para la ciudad".
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, afirmó ayer que el Plan General de Ordenación (PGOU) de Málaga "está maduro" y preparado para ser aprobado con carácter definitivo, a pesar del informe en contra de Aena que obliga al Ayuntamiento a rebajar la altura de nueve torres proyectadas en La Térmica, los antiguos terrenos de Repsol y San Rafael.
De la Torre indicó que el único obstáculo que por el momento frena la marcha del PGOU son "los enormes retrasos del plan de ordenación del área metropolitana". Por tanto, "cualquier reflexión que se haga en esta materia no retrasará para nada el plan". Desde este punto de vista sostuvo que el documento urbanístico de la ciudad, que comenzó a tramitarse hace cuatro años, seguirá su camino administrativo con o sin los rascacielos proyectos.
No obstante, argumentó que el Ayuntamiento aún no ha decidido si elevará el PGOU a la Junta de Andalucía para su aprobación provisional, dejando al margen los sectores donde están planteadas las torres o si, en cambio, se acometerán modificaciones y se someterá el conjunto del documento al criterio de la Comisión Provincial de Urbanismo.
Esta cuestión se resolverá en los próximos días una vez que los técnicos y asesores municipales testen las oportunidades que reales de que Aena y Aviación Civil hagan modificaciones en el espacio de servidumbre del aeropuerto sin afectar la seguridad aeronáutica.
Esta opción ya se acometió, por ejemplo, en el paseo de la Castellana de Madrid, donde se varió la servidumbre de un pasillo de emergencia de Barajas para permitir que el promotor y ex presidente del Real Madrid levantara cuatro megatorres en los antiguos terrenos del club. Si los técnicos "consideran viable convencer a Aviación Civil seguiremos adelante con el PGOU dejando en blanco estos sectores durante unos meses", según De la Torre.
El alcalde de la ciudad también indicó que el Ayuntamiento está dispuesto a barajar modificaciones y reordenar los proyectos afectados por el informe aeronáutico, de modo que se gane en horizontal los volúmenes de edificabilidad que puedan perderse en vertical. Esta fórmula implicaría una mayor ocupación de los terrenos previstos para zonas verdes y de equipamientos ciudadanos en estos tres puntos de la ciudad.
Al tiempo en que insistió en que se evitarán retrasos en la tramitación del documento urbanístico, Francisco de la Torre afirmó que se tratará de "defender los proyectos que tratan de crear centralidades e impulsos nuevos para la ciudad".
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