El Ayuntamiento pide suspender pagos de una sus empresas tras el embargo de las cuentas. Marbella (SUR)

El Consistorio renuncia al plan para saldar la deuda de 19 millones de euros de Gerencia de Compras y presenta un concurso de acreedores El juzgado de lo Mercantil deberá pronunciarse en dos semanas

LA DEUDA
1,24 millones de euros: La deuda reconocida con todos los informes técnicos favorables.
144.000 euros: La deuda pendiente del informe final del interventor.
2,73 millones de euros: La deuda sobre la que el Ayuntamiento aún no se ha pronunciado por falta de informes técnicos.
2,54 millones de euros: La deuda por sentencias judiciales firmes.
5,24 millones de euros: La deuda dudosa, investigada en el Tribunal de Cuentas.
3,96 millones de euros: La deuda a la Agencia Tributaria.
19.348.000 euros: El máximo de la deuda entre acreedores privados y públicos de la sociedad Gerencia de Compras y Contratas S. L.
El Ayuntamiento de Marbella ha solicitado el concurso de acreedores -antigua suspensión de pagos- para una de las sociedades municipales creadas durante el gilismo: Gerencia de Compras y Contratas S.L., actualmente en proceso de disolución y que acumula una deuda con acreedores privados y la Agencia Tributaria de 19,3 milones de euros. En dos semanas el Juzgado de lo Mercantil de Málaga deberá pronunciarse sobre la «singular» petición del Consistorio marbellí, según el coordinador general de Hacienda, Carlos Rubio. Se trata, como él mismo reconoció ayer, de una medida «excepcional» para poner orden en su millonaria deuda, a la que el Ayuntamiento no puede hacer frente debido a los embargos judiciales que pesan sobre las cuentas de la sociedad. De aceptarse, sería el primer concurso de acreedores en Marbella y uno de las primeros en España de una sociedad municipal participada al cien por cien por capital público. «Confiamos en que el juez acepte la petición de concurso y que la deuda final se reduzca considerablemente», aseguró Rubio.
Las razones que el Ayuntamiento esgrime para llevar a cabo esta medida son tres: la imposibilidad de pagar las deudas contraídas por el embargo judicial de las cuentas y a las que el Ayuntamiento ya se había comprometido; paralizar todos los procedimientos judiciales, de reclamaciones de cantidad y los embargos que pesan sobre la sociedad y que están generando un importante desembolso en costas judiciales e intereses; por último, poner orden en la masa de acreedores y en sus numerosas facturas, algunas de ellas de origen dudoso que están siendo investigadas por el Tribunal de Cuentas por ser ficticias -sevicios que nunca se llegaron a prestar- o infladas -servicios que se pagaron muy por encima de su valor real-. Según Rubio, «esta medida tiene una especial trascendencia en todo el proceso de normalización y regularización de las cuentas del Ayuntamiento y en su propia estructura», aunque se trataría de una medida excepcional que no se extendería al resto de las sociedades municipales: «La problemática de Gerencia de Compras es totalmente diferente al resto. Además, no tiene personal y nunca lo ha tenido por lo que el concurso de acreedores es más fácil».
Los sucesivos gobiernos del Grupo Independiente Liberal (GIL) llegaron a crear hasta 32 sociedades municipales para desviar fondos municipales y que son objetos de numerosos procedimientos judiciales, dos de ellos por la vía penal : el 'caso Saqueo', ya juzgado, y 'Monteverde', pendiente de la fecha de juicio. Una de estas sociedades investigadas por el Tribunal de Cuentas es Gerencia de Compras y Contratas destinada a comprar bienes y servicios al margen de los procedimientos de contratación. Tras la disolución del Ayuntamiento de Marbella en 2006, la comisión gestora tomó cartas en el asunto y creó una unidad de contratación. Sin embargo, durante años la sociedad contrajo deudas con acreedores, unas reales y otras no, que ahora reclaman.
El plan de pago
El Ayuntamiento separó las deudas reales de las dudosas y adquirió un compromiso de pago con los acreedores para pagarles poco a poco en función de las posibilidades de la tesorería municipal. Como consecuencia de esta primera selección el Consistorio reconoció 4,4 millones de euros y estableció planes de pago para amortizar la deuda. Sin embargo, la acumulación de sentencias judiciales que llevan aparejado el embargo de la sociedad ha impedido en la práctica asumir el compromiso. Ahora será el Juzgado de lo Mercantil el que decida quiénes, cuánto y cuándo deberán cobrar. Lo harán a través del nombramiento de una administración concursal que gestionará la sociedad junto a su consejo asesor. Entre ambos deberán llegar a un acuerdo con la lista final de acreedores que llevará consigo una quita de la deuda y un aplazamiento del pago.
El Ayuntamiento de Marbella no las tiene todas consigo para lograr el concurso. La Ley Concursal está pensada para la insolvencia de empresas privadas o particulares a fin de que puedan reflotar el negocio y pagar ordenadamente a sus acreedores. Gerencia de Compras está participada en un cien por cien por capital público lo que significa que el responsable de la deuda es, en última instancia, el propio Ayuntamiento.
Además, deberá presentar unos activos y unos pasivos. El pasivo está claro: la deuda de 19,3 millones de euros. Pero ¿cuál es el activo? El Consistorio ha presentado como garantía de pago las cantidades presupuestarias que destina a estas sociedades. Para pagar la deuda de Gerencia de Obras, destinó 1,5 millones de euros en sus presupuestos del año pasado y un millón este año. Tras el concurso de acreedores, el Consistorio deberá incluir en sus próximos presupuestos anuales una partida para cubrir el resto de los pagos.