sábado, 30 de junio de 2007

El POT reservará suelo para VPO en cuatro grandes zonas (La Opinión)

Dos de las áreas de reserva estarán en la capital y las otras, en el Valle del Guadalhorce. Las de Málaga permitirían levantar unas 15.000 viviendas
El documento inicial del Plan de Ordenación Territorial (POT) del área metropolitana de Málaga, que engloba a la capital y a doce municipios, prevé la reserva de cuatro grandes áreas para la construcción de viviendas de protección oficial, según adelantó ayer la consejera de Obras Públicas, Concepción Gutiérrez, que se desplazó a Málaga para presentar el documento a los responsables de los trece municipios afectados.De las cuatro grandes reservas de suelo, dos están en la capital y de las otras dos, una está a caballo entre Málaga y Alhaurín de la Torre y la otra en Aljaima, una localidad entre Pizarra Cártama. Las reservas que el POT prevé en la capital se fijan en la zona entre el Lagar de Oliveros y la parte norte de Soliva y en la Vega del río Campanillas. Se trata de dos zonas de más de un millón de metros cuadrados cada una y que, sumadas, permitirían la construcción de unas 15.000 viviendas.Concepción Gutiérrez explicó que estas reservas de grandes superficies de suelo se hacen debido al "gran déficit que existe de viviendas a precios asequibles". Para avanzar contra este déficit "son necesarias estas grandes operaciones de suelo." Estas reservas deben luego concretarse con los ayuntamientos en sus planes generales, pero su provisión "es ya una garantía que facilita la gestión de esos suelos, especialmente en Málaga donde se dan las mayores necesidades de viviendas protegidas". El salto de las rondas. Por su parte, el secretario general de Ordenación del Territorio, Vicente Granados, señaló, que frente a lo previsto en el PGOU de Málaga de permitir la construcción residencial y de equipamientos al norte de la ronda Este, el POT "considera compatible la presencia de infraestructuras de ciudad, pero considera incompatible la construcción de viviendas", si bien dejó la puerta abierta a éstas últimas al señalar que "su construcción tendría que estar muy justificada y, además, ligada a la promoción de una infraestructura importante". Por último, respecto a los suelos de la zona de Arraijanal, donde el PGOU de Málaga prevé un trato turístico para uso hotelero y de ocio, Granados señaló que la zona se califica como suelo no urbanizable de especial protección, por lo que tampoco se contemplaría que se pudiera construir en ella.

La iglesia de los Mártires está como el primer día tras 501 años (La Opinión)

Las obras de rehabilitación llegan a su final, a falta de pequeños retoques, para completar la recuperación de las cubiertas y de las pinturas de la fachada
Han pasado 501 años desde que se erigiera la iglesia de los Santos Mártires en Málaga capital. Fue una de las cuatro primeras parroquias fundadas en la ciudad tras la llegada de los Reyes Católicos, junto a San Juan Bautista, Santiago y San Felipe Neri. Una historia larga que ha lacerado su estructura y dejado sus huellas en numerosas partes del edificio. Sin embargo, dos intervenciones, una en el año 2001 y otra que está a punto de terminar, han devuelto un olvidado esplendor a uno de los templos más destacados de la ciudad.La primera intervención se realizó en el año 2001. Por aquel entonces, las obras no tuvieron un efecto visual claro para el visitante, pero sí que aseguró la integridad real de la iglesia. Estos trabajos se centraron en la restauración de la cubierta sobre el crucero y la nave central. Fueron posibles con una ayuda del Instituto Municipal de la Vivienda (IMV) a través de la Oficina Municipal de Rehabilitación del Centro, que aportó unos 135.000 euros.Tras esta intervención se aseguró la impermeabilización de una parte importante del templo, aunque seguía siendo necesaria una obra de más envergadura.Ésta llegó hace poco más de un año, con un presupuesto de 900.000 euros, de los que unos 200.000 euros han sido aportados por el Ayuntamiento de Málaga. De hecho, los operarios se encuentran ya con los últimos retoques antes de dar por concluidos unos trabajos que han permitido recuperar la fachada, limpiar la torre y mejorar las cubiertas de las capillas, que estaban pendientes de arreglo.Una de las actuaciones que se han llevado a cabo ha sido quitar el enfoscado que recubría la torre y la fachada de la iglesia de los Santos Mártires y que se había aplicado en los años 60 mediante mortero de cemento.Esta actuación en la torre ha permitido descubrir dos partes, como señala el arquitecto técnico encargado del proyecto, Pablo Pastor. Destaca que la parte más baja está construida con la técnica del aparejo castellano y corresponde a la torre primitiva. El segundo cuerpo, en cambio, es de fábrica de ladrillo y se aprecian restos de pigmentos de color óxido rojo, al igual que el descubierto en la fachada y típico en edificios civiles y religiosos del barroco.Precisamente la fachada es la que tiene una imagen más espectacular, ya que se ha descubierto un enfoscado de estuco de cal al que se le marcaban el dibujo del ladrillo que luego se pintó con el color de óxido rojo que se puede apreciar. Esta técnica permitía unificar el tamaño de los ladrillos.

La Junta no cierra la puerta a la construcción de viviendas al norte de la ronda oriental (SUR)

El Ayuntamiento asume que los terrenos de la cementera de La Araña sean un parque cuando termine la explotación El PGOU se modificará para incluir casas en la vega de Campanillas, donde más de la mitad serán de VPO
Reunión con voluntad de acercar posturas la que mantuvieron a mediodía de ayer el Ayuntamiento de Málaga y la Junta de Andalucía para debatir el contenido del Plan de Ordenación del Territorio (POT) del área metropolitana, que debe ser tenido en cuenta por el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la capital y de otros 12 municipios del ámbito. Un ejemplo de esa voluntad se dejó notar en la discusión sobre la propuesta municipal de permitir la construcción de unas quinientas viviendas al norte de la ronda oriental, sobre las que el Gobierno andaluz ha mostrado su rechazo.Al término de la reunión, que duró más de dos horas, el alcalde, Francisco de la Torre, aseguró a este periódico que el proyecto, que incluye amplias zonas verdes y de equipamiento, «no ha quedado absolutamente descartado» y recordó lo «positivo» que resulta para Málaga «contar con más de dos millones y medio de metros cuadrados de zonas libres y equipamientos a cambio de permitir 480 casas», según detalló.GestiónPor su parte, el secretario general de Ordenación del Territorio de la Consejería de Obras Públicas, Vicente Granados, mostró su apoyo a la reserva de equipamientos en el sector y agregó que el modo de conseguirlos «es una cosa de la gestión», si bien matizó que pueden obtenerse sin necesidad de condicionarlos a la construcción de viviendas. Cuestionado sobre si el Gobierno andaluz pondrá impedimentos al proyecto al norte de la Ronda Este, Granados contestó que «depende de cómo se plantee», y agregó que la ciudad debe solventar sus deficiencias antes de pensar en la ocupación de otros suelos. Por la tarde, en rueda de prensa, Granados reiteró que el proyecto al norte de la Ronda Este sólo se autorizará si está bien justificado. «No considero necesario saltar la ronda, porque supondría un impacto paisajístico y crearía problemas de movilidad», dijo. No obstante, indicó que el Ayuntamiento tendría que «justificar muy claramente esa necesidad».Por otro lado, De la Torre afirmó que comparte la intención de la Consejería de Obras Públicas para que los terrenos que ocupa la fábrica de cemento de La Araña pasen a ser un parque o zona libre de construcciones cuando termine la explotación, cuya concesión será revisada en la próxima década. «Tal vez pueda plantearse también algún uso turístico, pero siempre que sea de interés para la ciudad, mientras se mantiene como no urbanizable», dijo el alcalde.En cuanto a la previsión o no de viviendas en la vega de Campanillas, el regidor manifestó que finalmente se volverán a incluir una vez que se ha delimitado una nueva huella sonora del aeropuerto que permite que tengan uso residencial suelos que el PGOU ha fijado como empresariales. No obstante, Granados recordó que el POT marca al sur de Campanillas un área en la que deberán ser viviendas de protección oficial entre el 55% y el 65% de las permitidas en el lugar. «Será cuestión de hacer los ajustes necesarios, pero en todo lo que sea reservar suelos para VPO estaremos al máximo», le respondió el alcalde.Sobre la posibilidad de que el PGOU tenga que volver a ser aprobado de manera inicial ante los cambios que pueden introducirse en el documento, De la Torre confió en que no sea necesario. «Crearía unos problemas grandes desde el punto de vista de la tramitación», añadió, al tiempo que se mostró optimista sobre la coordinación del POT con el PGOU.

La concesionaria de la autopista de Las Pedrizas no arranca la obra, adjudicada hace casi un año (SUR)

La tardanza amenaza con demorar los plazos de entrada en servicio de esta infraestructura, vital para evitar el colapso en los accesos a Málaga. Todavía no se ha hecho público el trazado definitivo de la nueva carretera

LAS CLAVES
Origen: En 1999 la autopista se convierte en alternativa a la N-331 (actual A-45), que se construyó en 1973 y se amplió a dos carriles por sentido en 1992. El Gobierno del PP toma la decisión después de descartar el tercer carril en este acceso.Coste: La carretera medirá 25 kilómetros, costará 367 millones y discurrirá por los términos municipales de Antequera, Casabermeja, Almogía y Málaga.Trazado: Se desconoce el recorrido exacto, aunque atravesará Antequera, Casabermeja, Almogía y Málaga.Plazo: La nueva carretera de pago, que será la tercera de la provincia, debe estar en servicio antes del 31 de diciembre de 2009.
Ha bastado el primer fin de semana de verano para volver a la cruda realidad: el acceso a Málaga desde el interior de la Península por la A-45 es insuficiente para dar respuesta al ceremonial de decenas de miles de personas que intentan llegar o salir en avalancha de la Costa del Sol para pasar unos días de sol y playa. Desgraciadamente, ese descanso comienza y acaba en atasco, en una pesadilla que podría alargarse por la lenta marcha de la alternativa diseñada por el Gobierno: la nueva autopista de peaje Las Pedrizas-Málaga.La nueva carretera de acceso a Málaga no arranca. Pese a que hace once meses que el Ministerio de Fomento eligió a una unión temporal de empresas encabezada por Sacyr para construir y explotar la autopista de Las Pedrizas, de 24,5 kilómetros y 367 millones de presupuesto, la concesionaria aún no ha puesto en marcha los trabajos y ni siquiera se ha hecho público su trazado definitivo.Sacyr, que logró junto a su filial Itinere y a la empresa GEA 21 la concesión de la carretera, no ha respondido a las peticiones de información de este periódico sobre el estado del proyecto, su trazado y otros puntos como las previsiones de inicio de las obras.Es cierto que las citadas empresas siguen en plazo. Las condiciones de la concesión (ver BOE del 27 de septiembre de 2006) establecen que hasta septiembre podrán entregar los proyectos constructivos (documentos en los que se definen hasta el último detalle el trazado y la forma de construirlo) y que, una vez que el Ministerio de Fomento los apruebe, la concesionaria tendrá otros cuatro meses para comenzar las obras.Sanciones económicasA pesar de que hay margen, lo que es totalmente obligado porque así lo establece el Gobierno en la citada orden del BOE so pena de sanciones económicas y, sobre todo, por el caos de tráfico que sufren los accesos a Málaga, es que la autopista esté en servicio antes del 31 de diciembre de 2009. Para ese objetivo resulta fundamental que, como ya ocurrió con las autopistas entre Málaga y San Enrique de Guadiaro (Cádiz), que se abrieron con varios meses de adelanto, se impulsen y acorten en la medida de lo posible los plazos de los trámites administrativos y de ejecución.La última información oficial sobre la autopista data del 19 de diciembre, cuando la ministra Álvarez firmó el contrato de concesión de la autopista con Luis de Rivero, presidente de Sacyr. Entonces, Fomento explicó que los cinco meses transcurridos entre la preadjudicación de la carretera en julio de 2006 y la rúbrica del citado contrato se habían empleado en revisar sus condiciones hasta el mínimo detalle.Seis meses más tarde, se acentúan las dudas sobre la puesta en servicio de esta infraestructura en el plazo fijado, que además coincide con el de la segunda ronda de circunvalación de Málaga.Tercera de la provinciaLa autopista AP-46, entre el Alto de Las Pedrizas y Málaga, por la que se podrá circular pagando unos dos euros (turismos), será la tercera de la provincia tras los dos tramos que componen el recorrido Fuengirola-Estepona-Guadiaro. Por ahora, y a falta del trazado definitivo, sólo se sabe que atravesará de norte a sur los términos municipales de Antequera, Casabermeja y Almogía antes de llegar a Málaga. Lo hará por las proximidades de Puerto de la Torre, donde se conectará con la segunda ronda de la capital y, en concreto, con el tramo entre Puerto de la Torre y Málaga (La Virreina), casualmente también adjudicado a la firma Sacyr. El retraso en el comienzo de las obras de la autopista es sólo uno más de los avatares que ha sufrido este proyecto desde que fue presentado por el ministro de Fomento, Rafael Arias Salgado, en septiembre de 1999. El Gobierno del PP vinculó esta infraestructura con la segunda ronda, de modo que la concesionaria de la autopista acometería la circunvalación gratis como contraprestación, sin cargo para las arcas del Estado. No fueron suficientes cuatro años largos para que el Ejecutivo del PP pusiera en marcha este doble proyecto, y el Gobierno socialista tardó otro año más en deshojar la margarita sobre los nuevos accesos a Málaga.Después de algunas críticas desde la filas del PSOE a esta autopista de peaje, Fomento decidió seguir adelante con el proyecto, eso sí, desvinculándolo de la segunda ronda, que se haría con fondos públicos. En agosto de 2005 se convocó el concurso de la carretera de pago Las Pedrizas-Málaga.Casi dos años después, las obras aún no han comenzado. Hay margen, pero ante una obra de gran complejidad técnica como esta, que tendrá con total seguridad largos túneles y viaductos, y que exigirá numerosas medidas de corrección de impacto ambiental, cualquier tardanza puede complicar la apertura antes del año 2010.