El Gobierno dará
ayudas para mejorar la eficiencia y renovar calderas
El IDAE ha impulsado
un plan de formación de los técnicos e informará a vendedores, compradores y
usuarios de viviendas y edificios.
El Gobierno obligará a partir del 1 de junio de este año
2013 a poner a disposición de los compradores o arrendadores de edificios o de
parte de los mismos -para alquileres con una duración superior a cuatro meses-
un certificado de eficiencia energética del inmueble en su conjunto o de sus
viviendas en particular. Una medida que responde a una exigencia comunitaria y
llega con muchos meses de retraso.
Soraya Sáenz de Santamaría tras el Consejo de Ministros. |
Efe
El Consejo de Ministros ha aprobado, dentro de las medidas
de apoyo a la vivienda y rehabilitación adoptadas, un Real Decreto para
trasponer a la normativa española el procedimiento básico para la certificación
de eficiencia energética de los edificios.
Este certificado, además de la calificación energética del
edificio, deberá incluir información objetiva sobre las características
energéticas de los edificios, y, en el caso de edificios existentes, documento
de recomendaciones para la mejora de los niveles óptimos o rentables de la
eficiencia energética del edificio o de una parte de éste, de forma que se
pueda valorar y comparar la eficiencia energética de los edificios.
Como herramienta para facilitar la obtención de estos
certificados, por mandato del Ministerio de Industria, Energía y Turismo y del
Ministerio de Fomento, el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la
Energía (IDAE) ha elaborado los programas informáticos CE3 y CE3X, ambos
publicados como documentos reconocidos a disposición de los técnicos
certificadores.
Además, el IDAE se ha encargado de llevar a cabo un plan de
formación para formar a los técnicos responsables de certificar energéticamente
los edificios y de aquellos otros encargados de su control e inspección sobre
las herramientas reconocidas CE3 y CE3X.
El IDAE también se encargará de informar a los vendedores,
compradores y usuarios de viviendas y edificios en general sobre las nuevas
obligaciones a las que tienen que hacer frente.
Las administraciones públicas darán ejemplo
Igualmente, y como actuación ejemplarizante de las
Administraciones Públicas, el Real Decreto obliga a que todos los edificios o
partes de los mismos, en los que una autoridad pública ocupe una superficie
útil total superior a 500 metros cuadrados inicialmente que sean frecuentados
habitualmente por el público, dispongan del certificado de eficiencia
energética y exhiban su etiqueta de eficiencia energética.
De este modo, el complejo Cuzco que alberga a los
Ministerios de Industria, Energía y Turismo, Economía y Competitividad y parte
de Hacienda y Administraciones Públicas, ya ha sido calificado mediante el
programa informático de referencia obteniendo la calificación energética 'C'.
100 millones para subvenciones
Además, el Ejecutivo ha aprobado un Real Decreto encaminado
a mejorar la eficiencia energética y la utilización de las energías renovables
en los edificios que permitirá, entre otras actuaciones, ayudas directas al
cambio de calderas.
Con una dotación de 100 millones de euros, este programa
busca promover la realización de medidas de ahorro y eficiencia sobre la
envolvente y las instalaciones térmicas de los edificios existentes de uso
residencial, y la incorporación de energías renovables (biomasa y geotermia,
principalmente).
Ayudas para comunidades de propietarios o de bienes y dueños
de un edificio de viviendas unifamiliar
Así, podrán ser beneficiarios de las ayudas o de la
financiación de este programa las comunidades de propietarios de edificios
residenciales de uso vivienda, las comunidades de bienes de los propietarios de
edificios de viviendas no divididas horizontalmente y las personas físicas
propietarias de un edificio de viviendas unifamiliar.
Además, se considerarán actuaciones susceptibles de ayuda
las actuaciones integrales en edificios de viviendas siempre que comprendan una
o varias de las siguientes medidas que mejoren la calificación energética del
edificio o viviendas afectadas. Entre estas medidas, figuran la mejora de la
eficiencia energética de la envolvente térmica de los edificios de viviendas
existentes y de las instalaciones térmicas de los edificios de viviendas
existentes.
Asimismo, se recoge la opción de la sustitución de energía
convencional por biomasa en las instalaciones de calefacción, climatización y
agua caliente sanitaria de los edificios de viviendas existente y la
sustitución de energía convencional por energía geotérmica en las instalaciones
de calefacción, refrigeración y producción de agua caliente sanitaria de los
edificios de viviendas existentes. La dotación económica del plan se repartirá
equitativamente entre las cuatro tipologías de actuaciones anteriores.