domingo, 6 de mayo de 2012

La novena edición del Salón Inmobiliario se celebrará en junio en el Palacio de Ferias (Málaga Hoy)


El objetivo de la muestra es incentivar la comercialización de viviendas
R. L. / MÁLAGA | ACTUALIZADO 06.05.2012 - 01:00

El Palacio de Ferias y Congresos de Málaga (Fycma) celebrará del 22 al 24 de junio la novena edición del Salón Inmobiliario del Mediterráneo (SIMed), que tiene como objetivo incentivar la comercialización de viviendas y liberar el stock acumulado en la provincia malagueña. En esta ocasión se incluye, por primera vez, un espacio destinado a la dinamización de suelo público que pretende atraer a los municipios de las principales ciudades andaluzas para "dinamizar la oferta de suelo público liberada por los planes generales de ordenación urbana, lo que supone una oportunidad de negocio y desarrollo". 

Este evento es cien por cien comercial, lo que lo ha convertido en un "eficaz escaparate de ventas y en un importante estímulo para el sector", han precisado desde Fycma, y han añadido que, al igual que en ediciones anteriores, los expositores que acudirán --promotoras, inmobiliarias y entidades financieras- ofrecerán a los visitantes ofertas únicas para encontrar una vivienda en Málaga y provincia. 

En este sentido, se ofrecerán promociones en primera vivienda, segunda turístico-residencial, en costa o interior así como de primera o segunda mano, han informado a través de un comunicado. SIMed 2012 dedicará su primer día a los profesionales del sector inmobiliario y acogerá jornadas técnicas en las que se abordarán temas de actualidad e interés. Así, albergará las jornadas de la Asociación Provincial de Promotores y Constructores de Málaga (ACP Málaga). Una de las novedades de este salón es la celebración de unas jornadas profesionales sobre Seguridad Jurídica y otras organizadas por la agrupación de profesionales inmobiliarios de Málaga, Múltiple Listing Service (MLS Málaga), dirigidas tanto a público profesional como general.

Las licencias de obra mayor concedidas por Urbanismo entre 2009 y 2011 en el casco antiguo son 39, de las que 21 están en marcha y 18 se corresponden con proyectos paralizados · Ni la Junta ni el Ayuntamiento reactivan las actuaciones prometidas (Málaga Hoy)


Las licencias de obra mayor concedidas por Urbanismo entre 2009 y 2011 en el casco antiguo son 39, de las que 21 están en marcha y 18 se corresponden con proyectos paralizados · Ni la Junta ni el Ayuntamiento reactivan las actuaciones prometidas
SEBASTIÁN SÁNCHEZ / MÁLAGA | ACTUALIZADO 06.05.2012 - 01:00
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A vista de pájaro se cuentan del orden de una treintena de solares desocupados, eriales en toda regla sin un uso definido, sin viso alguno de dejar el abandono en el que están instalados desde hace años. Asignatura pendiente que no ayuda a superar la carestía económica que corroe a los propietarios, incapaces de responder a las exigencias normativas que tienen contraídas, que les obligan a mantener en estado adecuado estos espacios, ni a las sanciones que de manos de la Gerencia de Urbanismo se remiten sin casi esperanza de repuesta. 

La instantánea del casco histórico se sigue amarilleando, adquiriendo a cada año que pasa más tonalidades de vejez y olvido. Las estampas de dos años atrás se mantienen intactas en el presente; la única novedad es que las agrupaciones de fincas e inmuebles siguen extendiendo su presencia sobre el corazón de la ciudad. Ni Tomás de Cózar, ni Beatas, ni Gigantes... Anclada la iniciativa pública, otrora capaz de movilizar a los dueños de estas construcciones, la esperanza se anula en lo que a los promotores privados se refiere, incapaces de amortiguar la caída del gigante ladrillo. 

La imagen real de la calle es la de un barrio anquilosado, en el que con el paso de los lustros se han ido agolpando las obras inacabadas, los proyectos nonatos, que dejan su particular cicatriz sobre la huella del corazón urbano. Una radiografía que se ve avalada por los datos de la Gerencia de Urbanismo, que plasman cómo la parálisis también toca de lleno el rostro del que hasta el instante previo al desplome de la construcción era foco de atracción para inversores. 

Según consta en los registros del departamento municipal, entre 2009 y 2011 se concedieron un total de 39 licencias de obra mayor en el casco antiguo, de las que están en marcha (no se precisa en qué estado) 21 actuaciones, quedando lastradas las otras 18. "Aparentemente paradas hay seis edificaciones, que suman 46 viviendas y tres locales comerciales; en solar, sin ni siquiera haber iniciado las obras, once, con proyección de 56 viviendas y diez locales; y uno está sin iniciar la obra". 

Para el delegado de Ordenación del Territorio y Vivienda, Diego Maldonado, todo ello tiene una respuesta evidente: la crisis económica. "Las empresas y constructoras están pasando dificultades para desarrollar su actividad", comenta, al tiempo que trata de ver el lado positivo, al indicar que más del 50% de los permisos de obra concedidos en esos dos años "están en marcha". 

Esta es la fotografía oficial de los dos últimos años del centro, sin bien el escenario urbanístico del barrio incluye piezas de calado muy anteriores a estos ejercicios. Porque, parece evidente, hay numerosas heridas que datan de mucho antes; parcelas que perdieron la vida años atrás y que ni siquiera constan en el apartado de licencias del Ayuntamiento de Málaga. 

Algunos ejemplos de inacción sorprenden por el periplo sin fin en el que están inmersos, convirtiéndose en símbolos del rostro menos agradable de la capital de la Costa del Sol. La ruina de la calle Vendeja recibe con la mejor de sus sonrisas a todos los visitantes llegados a la ciudad, convirtiéndose durante años en la primera estampa para los turistas. Ejemplo de desidia que acumula tras de sí más de 12 años, en los que ni la propiedad ni el Ayuntamiento han sido capaces de transmutar la dejadez. 

En la misma línea, el histórico Palacio del Marqués de la Sonora, inmueble que ocupa vecindad con el Museo Picasso y con la recientemente remozada Plaza de la Merced, que enseña desde hace unos siete años su más desagradable aspecto. A través de una lona transparente, todo el que deambule por la calle Granada se topa con el impacto de un edificio vaciado en su interior y sobre el que se depositaron todas las esperanzas para que albergase un hotel de cinco estrellas en pleno centro. Pero las ilusiones se han ido desdibujando con el paso de los años, al punto que hoy su horizonte es incierto. Ni las varias llamadas de atención emitidas por Urbanismo han ocasionado movimiento alguno de la promotora, que intenta hallar un socio que le permita salir del bloqueo. 

En la misma judería, Tomás de Cózar sigue sin latir, aletargada, quizá esperando a que pase definitivamente el invierno en el que vive inmersa desde hace una década. Y ello a pesar de ser una de las vías con más atractivo de la urbe. Sea como fuere, y a pesar de algunos intentos fallidos, las fachadas de algunos inmuebles huelen a moho y el tiempo se estanca en unos solares que parecen malditos. La reacción, aquí frenada, sí parece producirse en la vecina calle Beatas, donde el valiente que se adentre por sus recovecos podrá observar, y no es poco, dos edificaciones en proceso de terminación. 

Pero el anquilosamiento no sólo se percibe en el urbanismo en vertical, también en el que se extiende en horizontal en forma de solares. Los que hay libres de ladrillo acaban sirviendo como vertederos o como aparcamientos irregulares avalados por la propia administración. Qué son si no las parcelas del entorno de la Trinidad, que día a día están repletos de coches estacionados y no de las viviendas para los que fueron adquiridos. 

Los terrenos sin uso tienen la firma de muchos privados incapaces de mover la maquinaria, pero también de las instituciones públicas comprometidas con la recuperación del centro histórico. Ni la Junta de Andalucía, con su ambicioso plan de recuperación de los arrabales, del que forma parte las irreales tecnocasas (pisos en alquiler destinados a jóvenes profesionales para que aúnen en un mismo espacio vivienda y zona de trabajo), ni el Ayuntamiento pueden presumir de los compromisos adquiridos. La Administración regional sigue sin dar un paso adelante, siete años después de la firma del acuerdo para actuar en el casco antiguo, lo que impide ver florecer las viviendas proyectadas en terrenos de Lagunillas o en la calle Gigantes, entre otras localizaciones. En esta última pastilla, en lugar de bloques, lo que hay son kilos y kilos de escombros y basura. 

Reproches extensibles al Ayuntamiento, que se mantiene a la espera para impulsar la promoción de viviendas sociales en la calle Granada, junto a la futura Plaza de las Nieves, o que, recientemente, se ha encontrado con el varapalo de que la empresa a la que vendió una parcela para viviendas en alquiler en la calle Nosquera desiste de impulsar la actuación ante la imposibilidad de asumirla. En ese suelo, hasta la fecha, ya se han gastado más de 300.000 euros en los trabajos de arqueología. Pero a estas muescas hay muchas más que sumar en el deambular por el centro, caso de la manzana de los antiguos cines Astoria y Victoria, ensalzada como referente del futuro cultural de la ciudad pero hoy sombra de lo que fue y será.

La Fiscalía pide dos años y medio para el promotor del centro hispano ruso (Málaga Hoy)


La acusación pública le solicita otro año de cárcel por el delito continuado de desobediencia así como que proceda a su cargo la demolición de las construcciones ilícitas
EFE MÁLAGA | ACTUALIZADO 06.05.2012 - 13:56
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Vladimir en su vivienda antes de que fuera demolida. / Migue Fernández

La Fiscalía malagueña ha solicitado un total de dos años y medio de cárcel para el promotor del Centro Hispano Ruso en Málaga por un delito continuado y permanente contra la ordenación del territorio y otro de desobediencia. 
 
El fiscal considera que el promotor, V.D.B., desatendió unas quince órdenes del Ayuntamiento de Málaga entre 1998 y el 2010 para que parara las obras que estaba realizando en los Pinares de San Antón y demoliera lo construido en suelo no urbanizable. 
 
En un primer momento, el constructor iba a promover un Centro Hispano Ruso, pero construyó un complejo residencial en un paraje protegido de los montes de Málaga de más de tres mil metros cuadrados. 
 
En el 2002, el promotor consiguió un permiso de la Gerencia de Urbanismo para añadir a la vivienda un garaje, piscina, vestuario y pista de tenis pero el acusado supuestamente utilizó dicha licencia para ampliar el complejo más de lo permitido. 
 
Además, tras un estudio del servicio de topografía se observó que las obras se estaban ejecutando casi en su totalidad en suelo no urbanizable. 
 
Pese múltiples requerimientos y ordenes de demolición del exceso de edificación, el empresario hizo caso omiso. 
 
En mayo del 2008, la Policía pudo comprobar que la construcción tenía dos cuerpos, uno bajo la rasante de los aparcamientos del conjunto, con una cafetería con cocina, seis apartamentos, lavandería y terraza comedor. 
 
El otro cuerpo de vivienda estaba adosado al anterior y tenía cuatro apartamentos dúplex, varios apartamentos más pequeños, así como un gimnasio, una sauna, salón de belleza y sala de masaje. 
 
En un determinado momento, el empresario trató de hacer pasar parte de su proyecto como una actuación agrícola, pero se le denegó el permiso "por no acreditar la condición de agricultor". 
 
Entre diciembre del 2010 y enero del 2011, el acusado ha procedido a la demolición parcial de las construcciones ilegales, por lo que el fiscal estima que ha concurrido la circunstancia atenuante de reparación del daño. 
 
La fiscalía malagueña pide que se le condene a dieciocho meses de prisión, multa de 18 meses con una cuota diaria de treinta euros e inhabilitación para cualquier oficio relacionado con la construcción durante tres años por el delito continuado y permanente contra la ordenación del territorio. 
 
Además, la acusación pública le solicita otro año de cárcel por el delito continuado de desobediencia así como que proceda a su cargo la demolición de las construcciones ilícitas. 

Citan como imputado al alcalde de Benamocarra por presuntas irregularidades en contrataciones (SUR)


Abdeslam Lucena afirma que el proceso fue legal y dice que ha pedido el archivo de la causa al entender que los hechos han prescrito 

05.05.12 - 01:45 - 
El juzgado de primera instancia e instrucción número 1 de Vélez-Málaga ha citado al alcalde de Benamocarra, Abdeslam Lucena (PP), a declarar en calidad de imputado el próximo día 25 por presuntas irregularidades en las contrataciones de trabajadores en el Ayuntamiento de esta localidad de la Axarquía, según se recoge en la providencia dictada por el juez Antonio María Contreras Baeza.
Esta citación se produce tras la denuncia presentada por el exportavoz del PSOE en el Consistorio Manuel Ruiz Cazorla por presuntos delitos de prevaricación, tráfico de influencias y vulneración de derechos fundamentales. En la exposición de motivos se argumenta que en el ejercicio de su función, desde la oposición, de control al equipo de gobierno se le denegó el acceso a la documentación sobre la contratación de seis trabajadores y empleados públicos a través de la bolsa de trabajo municipal ya que presuntamente se había hecho sin los requisitos legales de acceso a la función pública.
Por eso y ante las sospechas de posible trato de favor, solicita la entrega al juzgado de toda la documentación y que se cite a declarar como imputado al alcalde de Benamocarra y actual diputado provincial responsable de los Servicios Intermunicipales.
Ruiz Cazorla, que ya no es edil, explicó a este periódico que recurrió a la vía penal después de que en la vía contencioso-administrativa y a pesar de dos sentencias favorables de un juzgado de primera instancia de Vélez-Málaga y del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) no ha podido acceder aún a esa documentación.
Tranquilo
Abdeslam Lucena declaró a SUR estar tranquilo por esta citación como imputado ya que, según dijo y para lo que aportó documentación oficial, todo el proceso se ajustó a la legalidad. En este sentido, esgrimió un informe de la secretaría del Ayuntamiento en el que se argumenta que la selección del personal se hizo ajustada a la normativa.
En base a ese documento, el regidor de Benamocarra presentó el pasado 19 de abril un escrito en el juzgado solicitando el archivo de la causa «por inexistencia de indicios de criminalidad».
Es más, Lucena anunció que el mismo día 25, cuando declare, volverá a presentar un escrito de archivo de la causa.
Previamente, el pasado jueves, presentó otro escrito solicitando el archivo de la causa y la suspensión de su citación en base a dos argumentos. El primero de ellos es que Ruiz Cazorla «no se encuentra legitimado» para ser acusador particular ni popular ya que no es concejal del Ayuntamiento desde noviembre de 2010 cuando renunció a su acta, según se recoge en un documento de la secretaría del Consistorio. El segundo argumento es que los delitos que se le imputan han prescrito al referirse a hechos ocurridos hace seis y siete años.
«Estoy tranquilo porque el montón de denuncias que me ponen terminan siendo archivadas. En las contrataciones no ha habido favoritismo», apostilló el regidor.

Vélez indemnizará a la adjudicataria de la Casa de la Música con 32.400 euros (SUR) Vélez-Málaga


El Ayuntamiento y la empresa pactan de mutuo acuerdo rescindir el contrato tras perder la subvención para la ejecución del proyecto
06.05.2012 - 
AGUSTÍN PELÁEZ
 
VÉLEZ-MÁLAGA.

La rescisión del contrato de adjudicación de las obras de construcción de la Casa de la Música, en la finca municipal de Las Golondrinas, conllevará el pago de una indemnización de 32.440 euros a la empresa que se hizo con las obras. Al menos, eso es lo que se desprende de la resolución firmada esta semana por el alcalde, Francisco Delgado, después de alcanzar el Ayuntamiento un acuerdo con la UTE adjudicataria de los trabajos, formada por Almisol y Construcciones Juan Espejo.
Según la resolución, a la que ha tenido acceso SUR, de los 32.440 euros de indemnización, 21.845 son en concepto de lucro cesante, y los 10.599 restantes por los daños ocasionados por la resolución del contrato.
El Ayuntamiento se vio obligado a negociar con la UTE la resolución del contrato después de que la Dirección General de Cooperación Local, dependiente del Ministerio de Política Territorial y Administración Pública, decidiera retirar la subvención de 900.000 euros del Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local, conocido como Plan E, que había concedido al municipio para la ejecución del proyecto de la Casa de la Música.
La decisión del Ministerio se produjo al incumplir el Consistorio los plazos fijados para la ejecución de las obras. El Ayuntamiento tenía que haber concluido la construcción antes del 31 de diciembre de 2010, cosa que no sucedió.
La pérdida de la subvención se produjo una vez que la empresa ya había comenzado los trabajos. La ejecución del proyecto tuvo que ser interrumpida cuando apenas había comenzado el movimiento de tierra y el vallado de la parcela al conocerse la resolución de la Dirección General de Cooperación Local.
Otra subvención perdida
Esta no fue la única subvención incluida en el Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local que perdió el Ayuntamiento. De hecho, el Ministerio de Política Territorial y Administración Pública se vio obligado a reclamar otro 1.200.000 euros que debía destinarse a la construcción del edificio de uso social en Torre del Mar por no haber adjudicado la contratación de los trabajos antes del día 30 de diciembre de 2010.
El alcalde, Francisco Delgado, acusó en este sentido al anterior gobierno tripartito (PSOE, IU, GIPMTM) en el Ayuntamiento de dejadez por no acometer dentro de los plazos fijados tales inversiones.
El Ayuntamiento veleño estuvo a punto de perder también parte de la subvención concedida para el edificio de las Asociaciones Vecinales, también por no finalizar el proyecto en tiempo y forma, aunque las gestiones por Delgado permitieron al final concluir el inmueble.