domingo, 9 de agosto de 2009

La Junta rechaza por segunda vez el hotel de Moneo en Hoyo de Esparteros. Málaga (SUR)

La Consejería de Cultura insiste en que el edificio debe reducir su altura a la mitad para cumplir con la norma.

La Junta rechaza por segunda vez el hotel de Moneo en Hoyo de Esparteros
En la imagen se aprecia que el hotel presentará una altura muy similar a un edificio colindante. / SUR
La Junta de Andalucía ha vuelto a rechazar el proyecto de hotel para la zona de Hoyo de Esparteros diseñado por el prestigioso arquitecto Rafael Moneo. Como adelantó este periódico (ver SUR 7/10/2008), la Consejería de Cultura, que debe pronunciarse de forma vinculante sobre la actuación, ya emitió un informe negativo el año pasado en el que pedía una mayor justificación de algunos aspectos de la propuesta para la zona y recalcaba que la altura del hotel duplica lo permitido por la normativa urbanística del Centro Histórico. Según Cultura, no puede tener más de cinco plantas.
Sin embargo, los promotores del proyecto plantean una altura de unas diez plantas que, no obstante, ha sido reducida en 3,39 metros (el inmueble tendría 41,76 metros frente a los 45,15 iniciales) en un nuevo documento de diseño que fue remitido al Gobierno andaluz a principios del pasado mes de mayo con el fin de dar respuesta a los reparos de la consejería y obtener finalmente su aprobación.
En ese estudio, realizado por el estudio de Moneo, se dibuja un hotel de ocho plantas más la baja, y con unas fachadas que se quiebran y disminuyen en su altura para asemejarse a los edificios que lo rodean, salvo en la acera del eje del Guadalmedina, donde existen construcciones más altas, como la que tendría justo al otro lado de la calle Prim, a la que prácticamente iguala en volumen. «Creemos que igualar en altura al edificio de la esquina opuesta es la mejor manera de neutralizarlo y en verdad que nos parece que es preciso hacerlo para dar a la fachada sobre el río la dignidad que reclama», señala el trabajo de Rafael Moneo.
Sin embargo, la Dirección General de Bienes Culturales de la Junta no lo entiende así y, con fecha del pasado día 7 de julio, ha realizado un nuevo informe en el que se concluye que el proyecto «no puede ser informado favorablemente» por la altura del hotel.
Para ello, Cultura argumenta que se propone «un incremento considerable de la altura del edificio de uso hotelero, 10 plantas (41,76 metros), cuando el Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Centro Histórico permite como máximo cinco plantas (19,5 metros). Si miramos el entorno y no sólo la fachada al río, comprobamos que los edificios más inmediatos presentan una altura de cinco plantas como mucho, justo en el otro lateral de Hoyo de Esparteros», precisa el informe autonómico.
Orden
«La propuesta debe igualarse a las alturas colindantes. No es suficiente hacer ligeros retranqueos de las fachadas. Es necesario rebajar la altura y hacerlo de forma significativa», insiste la Consejería de Cultura, quien añade que el hecho de que el edificio situado al otro lado de la calle Prim tenga una altura muy similar a la que se plantea para el hotel no justifica el diseño aportado por la promotora, ya que este inmueble existente en el lugar se considera «fuera de ordenación» a efectos de volumen.
No obstante, este segundo pronunciamiento de la Junta sobre el proyecto que vendría a regenerar uno de los enclaves más deteriorados del casco antiguo sí aprueba los cambios que supone en la trama urbana, el traslado de los herrajes de los balcones del edificio de la pensión La Mundial a uno de nueva construcción y las nuevas alineaciones para el hotel y los dos inmuebles de oficinas que se proponen en el eje de lo que hoy es la calle Pasillo de Atocha.
Junto con la negativa a esta actuación, la Junta también rechazó en 2008 el diseño para las viviendas que sustituirán al cine Astoria, un proyecto que sigue aún paralizado.

El convento de la Trinidad y el cine Ochoa. Marbella (SUR)

RECONQUISTADA la ciudad de manos musulmanas, se procedió al reparto de sus tierras y casas entre aquellos a quienes se quería recompensar, por sus servicios de armas, y repobladores venidos 'ex professo'. En el reparto se tuvo en cuenta la necesidad espiritual de la nueva población, fundándose dos iglesias (Santa María de la Encarnación y Santiago) y una capilla dedicada a Santa Catalina, que fue otorgada al ermitaño fray Guillermo de Tolosa en tanto se decidía la orden religiosa más apropiada para la fundación de un convento. Hecho este que ocurrió en el año de 1500 y fray Guillermo entregó la dicha capilla a la Orden Trinitaria, edificándose convento con iglesia. Durante el siglo XVIII los cenobios trinitarios entraron en crisis, abocando al cierre de muchos de ellos y a la disminución del número de sus frailes. El de Marbella quedó en este segundo caso.

La mala administración de nuestro país llevó al Gobierno a emitir Títulos de la Deuda, cuyo rendimiento se hacía penosísimo. Para ello se decidió desamortizar numerosísimas fincas y edificios que nada rendían, puesto que estaban en poder de 'manos muertas', al objeto de allegar fondos para el pago de la Deuda; a la par de que entraran a contribuir al Fisco y la posibilidad, a su vez, de que éstas posesiones pasaran al mercado libre, viabilizando una redistribución al facilitar el acceso a la propiedad de pequeños labradores y colonos (ni que decir tiene que esto no ocurrió así).

Este fue el fin al que se destinó el convento de la Trinidad. Desalojado de frailes, en cumplimiento de la ley promulgada en octubre de 1837, sobre la incautación de joyas y alhajas al clero, fueron llevados a la Casa de la Moneda de Sevilla numerosos objetos litúrgicos y de exorno del monasterio. Posteriormente, el 7 de noviembre de 1843, mediante 'venta judicial', se adjudicó el edificio al vecino de Marbella Antonio Hormigo, cuyos herederos lo fueron vendiendo a 'trozos'. Así, el 24 de diciembre de 1863, el teniente coronel José Trujillo Celani se hizo con la iglesia del cenobio; a su muerte, acaecida el 17 de septiembre de 1872, le heredó su esposa Luisa Quijada Rosado que disfrutó de la propiedad hasta el 21 de enero de 1926, fecha en que la vendió a Rafael Ochoa Alcázar quien puso en funcionamiento el que fue denominado 'Cine Ochoa'.

En el documento de compraventa se insertó esta condición: 'Si, como es propósito del comprador, éste construyera teatro o sala de espectáculos públicos sobre el solar que adquiere, se obliga a reservar a favor de doña Luisa Trujillo Quijada, vitaliciamente, dos localidades de butaca para todas las funciones que se celebren'.

Los juzgados decidirán tras la aprobación del PGOU sobre un centenar de sentencias de derribo. Marbella (SUR)

El número de resoluciones judiciales pueden incrementarse hasta 300 en los próximos meses
La ejecución se ha aplazado hasta la entrada en vigor del Plan, prevista para el próximo otoño.

Desde hace tres años las sentencias judiciales que anulan licencias urbanísticas concedidas por el Ayuntamiento de Marbella durante el mandato de los alcaldes del GIL se van acumulando en los juzgados a la espera de su ejecución. Hasta el momento son más de un centenar las resoluciones dictadas por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) en las que se establece la obligación de restituir la legalidad, es decir, el derribo de la edificación levantada al amparo de un permiso de obras que vulnera el planeamiento urbanístico vigente.

Una cantidad cercana al doble de esa cifra se encuentra pendientes de resolución, por lo que el número de sentencias puede incrementarse hasta las 300 en los próximos meses. La ejecución de todas ellas, muchas de las cuales afectan a promociones inmobiliarias habitadas, está pendiente de la aprobación definitiva del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Marbella.

Desde la etapa en la que la comisión gestora se puso al frente del Ayuntamiento tras la disolución de la Corporación municipal a raíz del 'caso Malaya', por cada notificación recibida de una sentencia de anulación de licencia urbanística, existe a su vez una solicitud del Consistorio al TSJA para que se suspenda su ejecución hasta la entrada en vigor del nuevo ordenamiento. El mecanismo ante la comunicación de estas resoluciones judiciales siempre es el mismo. El servicio de disciplina urbanística inicia la tramitación del expediente para la ejecución de la sentencia y, de forma paralela, promueve un incidente de ejecución referente a la reposición de la realidad alterada sobre el que deben decidir con posterioridad las autoridades judiciales. La Junta de Andalucía se ha mostrado también de acuerdo con la tesis planteada en este sentido por el Gobierno municipal marbellí.

Reanudación del proceso
La aprobación definitiva del PGOU por parte del Gobierno autonómico, prevista para el próximo otoño, abrirá un nuevo escenario en relación con las miles de viviendas sobre las que pesan sentencias firmes de derribo. Entonces, según fuentes municipales, cualquiera de las partes personadas en los procedimientos judiciales podrá solicitar la reanudación del proceso, y con ello el inicio del expediente de derribo. En cada caso, el Ayuntamiento de Marbella informará del nuevo ordenamiento urbanístico vigente en el municipio al TSJA, y a partir de aquí se inicia el capítulo de las hipótesis, dado que los tribunales decidirán cada caso de manera particular.

Tanto la Administración regional como el Consistorio marbellí consideran que el nuevo documento urbanístico aporta la base para la legalización de las edificaciones, por lo que el tratamiento de las sentencias establecerá la imposibilidad de ejecutar las mismas en lo referente a posibles demoliciones. Eso sí, según el equipo de Gobierno, las resoluciones judiciales anulan estas licencias de obras, otorgadas al amparo de un planeamiento que no entró en vigor, por lo que se deberán conceder los permisos urbanísticos en relación con el nuevo PGOU. En cualquier caso, serán los juzgados los que decidan cada uno de los supuestos, hecho que podría desembocar en resoluciones dispares.

Diferentes casos
No todos los casos tienen el mismo telón de fondo. Frente a las cerca de 17.000 viviendas ilegales que se incorporan el proceso de regulación por compensaciones que recoge el Plan, se encuentran las tres promociones que quedan fuera de ordenación: Banana Beach, La Víbora y Río Real. «Aún en el caso de que el nuevo plan declare su compatibilidad con el modelo territorial propuesto, no implica necesariamente su no demolición, puesto que si los tribunales adoptaran la ejecución de la sentencia con independencia de las previsiones del nuevo plan general, se procedería a su demolición». Son palabras del coordinador del equipo redactor del nuevo PGOU de Marbella, Manuel González Fustegueras, en relación con el Banana Beach, aunque la reflexión del arquitecto jerezano podría hacerse extensible al resto de edificaciones ilegales.

Tampoco todas las sentencias de anulación de licencias tienen su origen en las cerca de 380 impugnaciones llevadas a cabo por la Junta de Andalucía a lo largo de once años. Algunas de ellas responden a las denuncias presentadas por particulares o comunidades de propietarios. En estos casos, serán los denunciantes quienes solicitarán la ejecución de las sentencias y, por tanto, la demolición de los inmuebles, mientras que el Ayuntamiento defenderá la misma postura en relación a la regularización de las edificaciones en virtud del nuevo PGOU. Según el edil socialista Javier de Luis, en estos supuestos los particulares podrán solicitar una indemnización por responsabilidad patrimonial tanto al promotor de la obra como al Consistorio. La opinión del equipo de Gobierno es distinta. Su portavoz, Félix Romero, considera que la denuncia de un particular no genera ningún derecho, sino que es similar a una acción popular.

Un defensor del Patrimonio. Málaga (LAOPINION)

Antonio Espejo tiene detrás una larga vida en el movimiento vecinal. Desde 1998 lleva luchando para recuperar el convento del Carmen y transformarlo en un centro cultural para El Perchel


El Carmen. Antonio Espejo, asomado al convento del Perchel que, denuncia, sigue en general en un estado lamentable.

Lo primero que Antonio Espejo señala al comenzar la entrevista es que prefiere que se hable del convento del Carmen antes que hablar de él. Sin embargo, su trayectoria en defensa del Patrimonio de Málaga no se entiende sin unas pinceladas biográficas.

Nació Antonio en 1930 en la calle Peregrino del Perchel y fue uno de los niños que escaparon por la Carretera de Almería en el 37, cuando la llegada de las tropas rebeldes a Málaga. "Salimos mi madre y mis tres hermanos y llegamos más allá de Motril", cuenta. Al regreso, la madre se entera de la detención de su marido. Antonio todavía recuerda el cadáver de su padre tras ser fusilado en San Rafael. "Mi madre tuvo que pagar al enterrador para que lo enterraran aparte".

La familia de Antonio salió adelante por la entrega de la madre. "Mi madre puso unos barriles de pie, iba a Pescadería, freía un pulpo y ponía vino y con eso se alimentaban las criaturas", recuerda.
Antonio Espejo sintió desde pequeño un afán por mejorar la situación en la que vivía España y se afilió joven al PCE. Se convierte en camionero y la actividad política le lleva a Francia. "Allí continué con la militancia", explica. Tras 12 años en París, vuelve a Málaga, al barrio de La Luz y en 1998 regresa al Perchel.

El convento. En El Perchel, ingresa en la asociación de vecinos ´Los Percheles´ y forma parte de la revista ´Corralón´, que sostiene que "conservar el Patrimonio Histórico es la inversión más importante". Antonio explica: "Yo veía que hacía falta un centro cultural", y propuso que se instalara en el convento carmelita de San Andrés. "La primera asociación que se preocupa por el estado del convento fueron ´Los Percheles", subraya.

La propuesta cultural caló en el barrio pero no en las administraciones. En 1999 el Ayuntamiento está a punto de derribar el convento y Antonio Espejo y los vecinos se movilizan para evitar el derribo. "En aquel momento teníamos bastante fuerza y dijimos que si se derribaba formaríamos la grande porque era especulación, y conseguimos que el Ayuntamiento parara el derribo".

Cuando dejó el barrio de La Luz, este defensor del Patrimonio se trajo a las monitoras del barrio para que también hicieran talleres en El Perchel, de ahí que fuera más que consciente de las necesidades culturales de su barrio natal. "El mejor destino para el convento sería un centro cultural porque aquí en El Perchel no hay nada", deja claro.
Con respecto a las últimas obras de mejora del convento, incluidas en el plan Zapatero, piensa que sólo son ´un lavado de cara´ y recuerda cómo está la mayoría del convento: "Hemos tenido cuatro incendios, hay que venir aquí y darse cuenta de que hay ratas, cucarachas, infección de mosquitos, hay bastantes pañiles abandonados y esto es un peligro", denuncia.

A Antonio Espejo le parece bien el destino que se dará al refectorio del convento, que estará dedicado a la figura del general Torrijos quien pasó allí la última noche con sus compañeros antes de ser fusilado en la playa de San Andrés.

En cuanto a la propuesta de hacer en el resto del edificio un Museo de Arquitectura, cree que también puede haber espacio para el centro cultural que, recalca, tanto necesita El Perchel. "Si se construye bien puede caber todo. Es necesario unificar fuerzas, sentarnos asociaciones y personas de la cultura con el Ayuntamiento y ver qué vamos a hacer". Cerca ya de los 80 años, la lucha de Antonio Espejo por mejorar Málaga no tiene edad.

El sector inmobiliario tardará cuatro años en recuperarse. (LAOPINION)

El consejero delegado de Analistas Económicos de Andalucía pronostica que ese será el periodo necesario para absorber el exceso de oferta en España.


El consejero delegado de Analistas Económicos de Andalucía, Francisco Villalba, ha pronosticado que el sector inmobiliario tardará al menos cuatro años en "absorber el exceso de oferta que existe en España", responsable de la crisis que vive el sector en la actualidad.

"Hoy en día hay demasiada oferta inmobiliaria y en tanto el mercado no la absorba se mantendrán las dificultades del sector", ha asegurado Villalba a Efe.

En España se ha pasado por una ´burbuja inmobiliaria´ en la que los precios de la vivienda se dispararon más de lo que el mercado podía soportar y, según el experto, "hasta que no se produzca un ajuste en el nivel de precios se ve difícil la situación del sector inmobiliario".

Villalba prevé que mientras la situación se estabiliza, las empresas del sector tendrán que "buscar la manera de reestructurarse" con el fin de mantenerse a flote.

Con respecto a la situación de la promotora malagueña Aifos, que ha entrado en concurso voluntario de acreedores con un pasivo de mil millones de euros, ha dicho que es "consecuencia directa" de la recesión que ha afectado a decenas de empresas en los últimos años.

Según los datos aparecidos este mismo mes, en España de cada dos casas que se edifican, una se queda sin vender. Hasta mayo de 2009, en nuestro país sólo se vendieron 92.731 inmuebles nuevos, la mitad de los construidos en ese periodo. Las patronales inmobiliarias creen que en 2009 no se alcanzarán las 150.000 viviendas.

La inmobiliaria paga los daños. Málaga (LAOPINION)

Una sentencia da la razón a una comunidad de propietarios de Parque Litoral que reclamaba a la inmobiliaria el arreglo de defectos de construcción que no asumía como propios.


Parque Litoral. Ramón Ríos delante de la urbanización, en la avenida Imperio Argentina. arciniega

La comunidad de propietarios de Pueblo Litoral, una promoción de 273 viviendas en Parque Litoral construida en 2004, ha conseguido que la justicia falle a su favor en la demanda interpuesta contra la inmobiliaria Ferrovial, en la actualidad Promociones Habitat, por no hacerse cargo de numerosas deficiencias.
En concreto, ha sido el juzgado de Instrucción número 8 de Málaga el que hace responsable a la inmobiliaria de realizar una serie de reparaciones para eliminar estos defectos en las zonas comunes de la urbanización.

Ramón Ríos, portavoz de la asociación de vecinos y miembro de la comunidad de propietarios de Pueblo Litoral, explica que cuando los vecinos empezaron a ocupar sus casas, "comenzamos a ver fallos que no nos parecían lógicos". Ríos explica que Ferrovial tenía en la misma urbanización las oficinas y al acudir para exigir las reparaciones, "nos decían que era cosa del mantenimiento, que prácticamente teníamos que pagarlo todo nosotros".

Hacia 2005, la comunidad de propietarios, viendo la respuesta de la inmobiliaria, contrató un perito, "para que hiciera una valoración de los defectos de construcción y de lo que no era". Según señala el portavoz vecinal, el peritaje mostraba unas deficiencias valoradas "en unos 800.000 euros".

La sentencia, comenta Ramón Ríos, "nos da la razón a los vecinos en un 80 por ciento". Entre las reparaciones que el juzgado de instrucción señala que tendrá que realizar el demandado se encuentran las filtraciones y humedades, grietas y fisuras, el arreglo de la dilatación de las solerías y lo que el portavoz vecinal considera la obra más cara, el arreglo de una parte de la fachada de la urbanización. "El aplacado hay que quitarlo entero, se cayeron placas y tuvieron que venir los bomberos", recuerda. De hecho, en la actualidad puede verse cómo faltan algunas placas.

Ríos señala que estas reclamaciones contaron desde un principio con el apoyo de la asociación de vecinos y de hecho, en 2007 La Opinión ya se hizo eco en un reportaje sobre el barrio de las quejas de la urbanización.

En ese reportaje, Ramón Ríos declaraba que, al ver las deficiencias generalizadas en la urbanización, "le dijimos al Ayuntamiento cómo se atrevía a dar la licencia de primera ocupación y nos respondieron que no había personal suficiente para inspeccionar". "Aquí se ha hecho todo con subcontratas, se vendía y rápidamente a construir y el Ayuntamiento ha pasado la mano a las constructoras", añadía entonces.

Ramón Ríos destaca ahora que cuando se cumpla la sentencia, "los pisos se van a revalorizar al recuperar las zonas comunes por la dejadez que teníamos encima".

Queda un último escollo y es que, como informa Ríos, Ferrovial está en un proceso concursal. Los vecinos están a la espera, en un juzgado mercantil de Barcelona, de que pueda hacerse realidad la sentencia.

Una nueva mirada al centro. Málaga (MALAGAHOY)


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Solares baldíos y edificios en ruinas en la calle Tomás de Cózar, situada a pocos metros de la pinacoteca.

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Varios turistas esperan a las puertas del Museo Picasso.

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La mirada se posa de nuevo sobre el centro histórico de Málaga, sobre sus calles maltrechas, sobre sus edificios abandonados, sobre las entrañas mismas de una ciudad en la que la figura de Pablo Ruiz Picasso empieza a tomar protagonismo. Y lo hace justo en el momento en que el plan turístico recién firmado por la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de la ciudad permite atisbar una solución al olvido en el que han permanecido durante años vías como Tomás de Cózar o Beatas o proyectos como la recuperación de la Judería, espacios estratégicos del corazón urbano que se extienden a apenas decenas de metros del museo dedicado a la figura y obra del universal pintor.

La apuesta de ambas instituciones contempla el diseño de acciones encaminadas a adecentar y potenciar el atractivo turístico de los alrededores del Museo Picasso y de la Casa Natal del pintor, situada en la Plaza de la Merced, y del entorno de la Catedral, en el que se prevé incrementar los espacios de uso peatonal. En total, la estrategia a seguir, que verá sus resultados a lo largo de los próximos cuatro años, pone sobre la mesa 14 millones de euros para estas intervenciones, que vienen a sumarse, según precisaron responsables del plan, a las iniciativas ya previstas por otras vías, llámese Fondos Estatales de Inversión Local (FEIL) o fondos europeos.

Sin embargo, la suma de soluciones que ahora se proponen para esta parte de la ciudad evidencia, igualmente, la inacción de años pretéritos, especialmente alarmante cuando el Museo Picasso abrió sus puertas casi seis años atrás. El escenario con el que se topaban los visitantes a la ciudad en aquellos meses era el de una zona urbana deteriorada hasta el extremo, sin que se hubiesen desarrollado las promesas de intervención sobre inmuebles, solares y calles que meses antes de la inauguración del gran baluarte cultural de la capital malagueña se hicieron.

Y el escaparate de esta parte de la ciudad no ha variado sustancialmente; en todo caso lo ha hecho a peor. A día de hoy no es realidad el proyecto de la Judería, del que el Ayuntamiento viene hablando desde hace más de diez años, que pretendía remozar el entorno de la calle Granada con la construcción de una sinagoga, impulsada por la comunidad sefardí; la rehabilitación del torreón mudéjar y la implantación en el mismo de una oficina de turismo; la creación de una plaza de uso ciudadano junto a la trasera del Museo Picasso, o la edificación de un hotel de cinco estrellas en el Palacio del Marqués de la Sonora, paralizado desde hace años... Y no lo es tampoco la prometida revitalización de Tomás de Cózar y Beatas, sobre las que ahora se ciernen actuaciones de reurbanización con las que lavarles la cara.

Esta es parte de la imagen que han retenido en sus pupilas los miles de turistas que se adentraban en las arterias del centro atraídos por la llamada de la obra del pintor. Muchos, los que osaban traspasar la frontera que delimita la sombra del Palacio de Buenavista, se topaban de lleno con la otra realidad de este barrio, esa realidad que muestra el contrario de lo que es la calle Larios o la Plaza de la Constitución, esa realidad que se resume en una simple fotografía de la ruina de Tomás de Cózar.

Para el equipo de gobierno del PP lo programado en los próximos años, fruto de la suma de diversas líneas de acción e inversión, va a permitir transformar la imagen del casco antiguo. "Va a haber un antes y un después en el turismo de la ciudad con la puesta en funcionamiento de este plan", augura Elías Bendodo, concejal de Turismo. A su juicio, el objetivo último es el de "convertir el centro en un museo al aire libre, en el que pasear para los visitantes sea una maravilla". Con este fin, el plan turístico de la capital prevé un importante número de acciones sobre calles y plazas, que sumadas a las de los fondos FEIL y fondos europeos, hará que "en dos o tres años el centro tenga una reconversión tremenda".

En la misma línea, el nuevo gerente del plan, José Asenjo, hizo hincapié en que a diferencia de ciertas obras de reurbanización que ahora se impulsan, la pretensión del plan es que lo que se acometa en el marco de esta estrategia "sea un elemento distintivo". "Esta iniciativa no viene a suplementar las acciones municipales, sino que busca intervenciones con singularidad propia", dijo. Asenjo subrayó la necesidad de actuar en el entorno del Picasso, donde "queda mucho por hacer", aunque se apresuró a precisar que el plan "no lo abarca todo".

Pero éste, como no lo ha sido ninguno de los planes anteriores, no será el antídoto final para el mal que padece el centro. La ciudad del paraíso que dibujó con sus palabras Vicente Aleixandre está aún alejada de esta Málaga que busca en su hijo universal, Picasso, la mano que pinte su nuevo y añorado futuro.

Una reliquia dunar que nada tiene que envidiar a Arraijanal. Marbella (MALAGAHOY)

La Sociedad Española de Ornitología advierte de que las dunas del Alicate en Marbella están seriamente amenazadas por la pretensión del PGOU de construir en ellas


No ha ocupado tantos titulares de prensa ni ha centrado el debate entre los responsables políticos como lo ha hecho el arenal de Arraijanal, pero a pesar de su anonimato es una de las pocas reliquias dunares que aún se conservan en el litoral y que ahora la construcción de 152 viviendas previstas en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Marbella amenazan con destruir para siempre. El ladrillo ha ido rodeando desde hace años la duna del Alicate, una formación única en toda la Costa del Sol por sus dimensiones y su paisaje, y que la Sociedad Española de Ortinología (SEO) está dispuesta a proteger. Las dunas del Alicate están rodeadas por varias urbanizaciones en Marbella.

En apenas 500 metros de ancho, esta duna alberga la mejor muestra de matorral mediterráneo costero del litoral malagueño y las asociaciones vegetales que conserva están incluidas en la directiva comunitaria Hábitat. Un motivo más que suficiente, según este colectivo, para que sea protegida de las garras amenazantes del urbanismo.

Junto con las dunas de Artola, la franja dunar de la playa del Alicate es el mejor resto de este tipo de ecosistema en Marbella. Su anchura duplica la de las dunas de Artola y llega hasta la carretera N-340. Posee un valor paisajístico superior, es un enclave geológico de muy elevado interés y representa uno de los pocos espacios completamente libres de edificaciones en todo el litoral marbellí.

Sin embargo, el Ayuntamiento del municipio no parece considerarlo así porque en el documento donde desarrolla su planeamiento urbanístico para los próximos años, aprobado de forma provisional, lo clasifica como suelo no urbanizable sectorizado transitorio. O lo que es lo mismo, permite la construcción de 152 viviendas que si finalmente se hacen "condenaría a la desaparición irremisible a esta joya ecológica", según la SEO.

Como contraprestación a la recalificación del suelo no urbanizable urbanizado ilegalmente a suelo urbano y el desastre ecológico provocado en el municipio durante décadas, el colectivo ecologista considera que la Junta de Andalucía debería impedir que la duna del Alicate fuera urbanizada "de forma semejante" a como lo está haciendo con los terrenos de Arraijanal en la capital enfrentándose al propio Ayuntamiento que proyecta en la zona la construcción de unas 600 viviendas y equipamiento hotelero.

En el caso del sistema dunar de Marbella sería, en su opinión, incluso más fácil de recalificar porque únicamente ocupa ya unas 5,5 hectáreas, diez menos que Arraijanal que casi llega a las 55 hectáreas. La SEO está intentando por todo los medios que no se urbanice la zona y el pasado 5 de enero presentó alegaciones al PGOU marbellí para proponer su protección. Pero, de momento, ni caso a pesar de que el Pleno del Ayuntamiento aprobó de forma provisional el plan urbanístico hace diez días.

"Llama poderosamente la atención que mientras para salvar Arraijanal la Junta de Andalucía ha mostrado un loable empeño desde el principio para comprar a los propietarios por una respetable cantidad, para la duna del Alicante no haya dado ningún paso", insistió.

Tampoco ha querido pronunciarse hasta el momento. Fuentes de la Delegación Provincial de Vivienda y Ordenación del Territorio aseguraron que hasta que el Consistorio no remita el documento "no podremos valorar la viabilidad de lo que se proyecta allí". El problema es que la duna del Alicate no tiene tanto tiempo y el PGOU que ahora se ha aprobado es su última oportunidad para sobrevivir al desarrollo ilimitado de la franja costera del municipio. Lo que la SEO confía es que se tenga en cuenta que la legislación nacional e internacional protege los ecosistemas litorales, especialmente los amenazados como éste que además posee la mayor superficie de lentiscos de la Costa del Sol y algunas especies vegetales protegidas en la Lista Roja de la Flora Vascular de Andalucía.

También la Ley de Costas y la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA) amparan la zona de influencia del litoral de 500 metros de anchura "en la que entra completamente esta duna", recordaron. La pelota está ahora en el tejado de las administraciones que deberán decidir si apuestan o no por la preservación de uno de los pocos reductos naturales que han logrado sobrevivir al proceso urbanizador.