miércoles, 31 de octubre de 2012

El alcalde retoma la idea del Cercanías hasta el Centro para rechazar el metro en superficie (Sur)


De la Torre emplaza a la Junta a fijar un calendario de reuniones para abordar la alternativa sobre el último tramo del suburbano

Francisco de la Torre volvió a poner ayer sobre la mesa su anhelo de prolongar la línea del Cercanías hasta la plaza de la Marina. Y lo hizo, para reiterar su rechazo a la propuesta de la Junta de Andalucía de llevar el metro en superficie por el Centro. «De entrada, no, y me parece que de salida, también no». Así de claro se mostró el alcalde de Málaga a la hora de descartar el cambio de planes del Ejecutivo regional, una alternativa a la que el primer edil reconoce «no verle ventajas», sobre todo «después de años de estudiar este tema y llegar a la conclusión y al consenso de una solución bajo tierra hasta La Malagueta».

La Junta estudia la opción de llevar el Metro a El Palo por el paseo marítimo (Málaga Hoy)


Es una de las alternativas que analiza Fomento, con lo que primaría el "atractivo turístico" y la recuperación del espacio · El proyecto original, que costó 1,6 millones, marca el trazado por el Paseo de Reding
SEBASTIÁN SÁNCHEZ / MÁLAGA | ACTUALIZADO 31.10.2012 - 01:00
zoom

Imagen del Paseo Marítimo Pablo Ruiz Picasso.

La reflexión abierta por los nuevos responsables de la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía en relación al Metro de Málaga y la parte final de su recorrido va más allá del escenario de la Alameda Principal. Varias fuentes consultadas por Málaga hoy confirmaron que en el paquete de alternativas objeto de análisis por parte del departamento encabezado por Elena Cortés se incluye la posibilidad de que la extensión del ferrocarril urbano hacia El Palo se haga por el paseo marítimo Pablo Ruiz Picasso y no por el eje interior, el delimitado por el Paseo de Reding y Paseo de Sancha. 

De llevarse a efecto esta opción, condicionada a los estudios técnicos y a la necesidad de, previamente, solventar el escollo que supone la negativa del Ayuntamiento a aceptar que los trenes discurran en superficie y no de manera soterrada por la Alameda y el Paseo del Parque, supondría una variación más que significativa en las previsiones iniciales del Metro. ¿Por qué? Porque el proyecto constructivo existente, redactado por Typsa y José Seguí y que costó 1,6 millones de euros, fija como itinerario más adecuado el eje interior de la zona Este, fundamentalmente por aproximarse a los puntos con más viajeros potenciales. 

Sin embargo, en el seno de Fomento se entiende que su apuesta por el tren en superficie permite reabrir el debate sobre el trazado exacto e incluir en la ecuación elementos de interés como "el atractivo turístico" que el paso junto al mar tendría para este medio de transporte. 

"Una opción es más adecuada en lo que a los pasajeros se refiere; la otra, busca más el atractivo turístico y la restauración de la zona", indicaron las fuentes consultadas, que consideraron que los proyectos de esta índole "no pueden hacerse sólo teniendo en cuenta el punto de vista técnico, sino que hay que ver también cómo se integra en la vida de una ciudad". "Es un tema que está abiertísimo", añadieron. 

Ésta es la primera ocasión en la que en el seno de la Administración regional se da cuerpo a la opción de llevar el Metro junto al mar, pero no en la que surge esta opción. Uno de los ingenieros más reputados de la provincia, José Alba, contempló esta posibilidad en un proyecto elaborado a petición del Ayuntamiento en relación con el soterramiento de Cánovas del Castillo. El documento fue más allá e incluyó como alternativa la idea de extender el soterramiento del tráfico hasta El Morlaco, liberando el espacio a pie de calle para un tranvía. 

En cualquier caso, el punto de inicio de la cuestión planteada por Alba era el de si el Metro es o no rentable en la zona Este de la ciudad. A su juicio, no, dados los márgenes de viajeros potenciales que se manejan, lo que avala la tesis de la Junta de ejecutar esta parte de la red del ferrocarril urbano en superficie y no bajo tierra, al menos en esta parte de la urbe. Incluso, el que fuera concejal de Movilidad, Juan Ramón Casero, se mostró favorable a esta opción, al indicar a finales de 2009 que la alternativa del tranvía en superficie "se tendría que haber contemplado". 

Los datos apuntan a una cifra de usuarios potenciales de unos 4 millones anuales, para una infraestructura valorada, sólo hasta el arroyo Gálica, en 180 millones de euros. Dos motivos para que Fomento haya reconsiderado el cómo y el cuándo de la línea 3 del Metro, ligada a la decisión de transformar la idea de que los trenes vayan bajo tierra en la Alameda y el Parque. Un debate en el que, se insiste desde la Administración regional, cualquier paso adelante se quiere dar con el consenso previo con el Ayuntamiento de la ciudad. 

La opción se topa con la intención del equipo de gobierno de poner en marcha el primer trazado del BRT (Bus Rapid Transit) en la zona Este. Este dispositivo, hasta ocho veces más barato que el Metro soterrado, se sustenta en la delimiación de una plataforma reservada para el paso de autobuses de gran capacidad, capaces de desplazar a hasta 20.000 usuarios a la hora. Una de las opciones de trazado sería el eje del paseo marítimo.