Viviendas, vehículos, joyas e incluso muebles son algunos de los bienes embargados por los jueces ante los impagos. Los expertos afirman que el incremento del precio del dinero, el crecimiento del paro y el endeudamiento familiar son las causas de la intervención judicial
Muchos expertos dicen que todavía no puede hablarse de crisis económica, pero ya comienza a cumplirse la vieja máxima: cuando hay problemas de dinero, los juzgados empiezan a llenarse de asuntos. Sólo en 2007 los juzgados de Primera Instancia de la capital ordenaron 3.982 diligencias de comisión relacionadas con embargos de viviendas, vehículos y otros bienes, como joyas o muebles, lo que supone un incremento de casi el 22% en relación con 2006. En esta perspectiva, el Gobierno anunció el pasado sábado la creación de 10 órganos judiciales especializados en desahucios, amparándose en el amplio volumen de estos casos que se tramitan en diferentes ciudades españolas. Málaga ha sido una de las elegidas, ya que un tercio de esas diligencias se refería precisamente a desahucios.¿Por qué han crecido estas decisiones judiciales? Los expertos coinciden en un diagnóstico: la subida de tipos, el incremento del paro y el endeudamiento familiar son los tres factores que han llevado a muchos a no poder pagar la hipoteca de su casa. Eso sí, todos los expertos consultados afirman que aún no puede hablarse de crisis, pues mientras haya crecimiento -y en Málaga lo hay. En el primer semestre el crecimiento será del 2,5%- ningún economista pronunciará la palabra recesión.Fuentes judiciales señalaron que "el aumento de la población y el crecimiento del parque de viviendas, sobre todo de las de alquiler, producen un aumento de los desahucios que se ven en los juzgados, aunque no haya habido tiempo de que se refleje la crisis en el volumen de causas de este tipo que tramitan los juzgados de Málaga".El consejero delegado de Analistas Económicos de Andalucía, Francisco Villalba, aclara que "es pronto para hablar de crisis económica, pues la ralentización de la economía no comenzó a notarse hasta finales de 2007. Lo que sí es cierto es que los tipos han crecido bastante en los últimos años, al igual que también ha crecido el consumo. Además, las familias están muy endeudadas, en torno al 115 de la renta disponible"."Si una persona paga 300 euros al mes de hipoteca y suben los tipos de interés, la persona siempre deja de pagar algo", añade Villalba. De igual forma lo ve el coordinador en Málaga del Instituto Andaluz de Estudios Financieros, Ángel Yagüe, aunque este experto añade otros factores a la receta esbozada por Villalba: "Sí, es cierto que la subida de los tipos afecta a los impagos, pero esto es sólo una cara del problema; la cesta de la compra y el incremento del paro también han incidido en que hayan dejado de pagarse muchas hipotecas y alquileres". "Cuando hay problemas económicos, lo primero que hace la gente es dejar de consumir. Si una familia tiene dos casas, deja de pagar la de la costa, y, lo siguiente, es dejar de abonar la hipoteca", añade.Yagüe asegura que ahora es muy habitual que "muchas familias se hayan quedado entre dos casas, una que compraron hace dos o tres años y que ahora intentan vender y aquella que acaban de comprar; el problema es que ahora los bancos no refinancian deudas por la falta de liquidez que tienen: se ha pasado de la alegría de hace unos años a la rigidez de ahora".Las previsiones siguen siendo halagüeñas, ya que aunque el paro volverá a crecer en febrero por el parón de la construcción, los tipos, según Villalba, van a bajar en primavera, como ya ha ocurrido en el Reino Unido y Estados Unidos.Yagüe, por su parte, coincide en que sólo puede hablarse de crisis si no se crece, lo que ahora no ocurre, pero sí ve claramente cómo hay muchas personas que quieren vender su vivienda porque no pueden pagarla: "Sólo hay que darse una vuelta por Teatinos o mirar los parabrisas de los coches", apunta. Ahora, muchos bancos y particulares recurrirán a los juzgados para exigir que se les pague lo que vendieron.
Muchos expertos dicen que todavía no puede hablarse de crisis económica, pero ya comienza a cumplirse la vieja máxima: cuando hay problemas de dinero, los juzgados empiezan a llenarse de asuntos. Sólo en 2007 los juzgados de Primera Instancia de la capital ordenaron 3.982 diligencias de comisión relacionadas con embargos de viviendas, vehículos y otros bienes, como joyas o muebles, lo que supone un incremento de casi el 22% en relación con 2006. En esta perspectiva, el Gobierno anunció el pasado sábado la creación de 10 órganos judiciales especializados en desahucios, amparándose en el amplio volumen de estos casos que se tramitan en diferentes ciudades españolas. Málaga ha sido una de las elegidas, ya que un tercio de esas diligencias se refería precisamente a desahucios.¿Por qué han crecido estas decisiones judiciales? Los expertos coinciden en un diagnóstico: la subida de tipos, el incremento del paro y el endeudamiento familiar son los tres factores que han llevado a muchos a no poder pagar la hipoteca de su casa. Eso sí, todos los expertos consultados afirman que aún no puede hablarse de crisis, pues mientras haya crecimiento -y en Málaga lo hay. En el primer semestre el crecimiento será del 2,5%- ningún economista pronunciará la palabra recesión.Fuentes judiciales señalaron que "el aumento de la población y el crecimiento del parque de viviendas, sobre todo de las de alquiler, producen un aumento de los desahucios que se ven en los juzgados, aunque no haya habido tiempo de que se refleje la crisis en el volumen de causas de este tipo que tramitan los juzgados de Málaga".El consejero delegado de Analistas Económicos de Andalucía, Francisco Villalba, aclara que "es pronto para hablar de crisis económica, pues la ralentización de la economía no comenzó a notarse hasta finales de 2007. Lo que sí es cierto es que los tipos han crecido bastante en los últimos años, al igual que también ha crecido el consumo. Además, las familias están muy endeudadas, en torno al 115 de la renta disponible"."Si una persona paga 300 euros al mes de hipoteca y suben los tipos de interés, la persona siempre deja de pagar algo", añade Villalba. De igual forma lo ve el coordinador en Málaga del Instituto Andaluz de Estudios Financieros, Ángel Yagüe, aunque este experto añade otros factores a la receta esbozada por Villalba: "Sí, es cierto que la subida de los tipos afecta a los impagos, pero esto es sólo una cara del problema; la cesta de la compra y el incremento del paro también han incidido en que hayan dejado de pagarse muchas hipotecas y alquileres". "Cuando hay problemas económicos, lo primero que hace la gente es dejar de consumir. Si una familia tiene dos casas, deja de pagar la de la costa, y, lo siguiente, es dejar de abonar la hipoteca", añade.Yagüe asegura que ahora es muy habitual que "muchas familias se hayan quedado entre dos casas, una que compraron hace dos o tres años y que ahora intentan vender y aquella que acaban de comprar; el problema es que ahora los bancos no refinancian deudas por la falta de liquidez que tienen: se ha pasado de la alegría de hace unos años a la rigidez de ahora".Las previsiones siguen siendo halagüeñas, ya que aunque el paro volverá a crecer en febrero por el parón de la construcción, los tipos, según Villalba, van a bajar en primavera, como ya ha ocurrido en el Reino Unido y Estados Unidos.Yagüe, por su parte, coincide en que sólo puede hablarse de crisis si no se crece, lo que ahora no ocurre, pero sí ve claramente cómo hay muchas personas que quieren vender su vivienda porque no pueden pagarla: "Sólo hay que darse una vuelta por Teatinos o mirar los parabrisas de los coches", apunta. Ahora, muchos bancos y particulares recurrirán a los juzgados para exigir que se les pague lo que vendieron.
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