domingo, 9 de marzo de 2008

Málaga registró en sólo tres años 136.000 compraventas de casas (La Opinión)

Sin embargo, ahora la tendencia es otra: los bancos son más rigurosos para dar hipotecas, que han bajado un 25%; las tasadoras valoran a la baja, y se opta por alquilar en vez de revender
El ´boom´ urbanístico que ha vivido España en los últimos años parece haberse desinflado. Algunos compradores lo tienen ahora más fácil para adquirir vivienda usada, si bien se enfrentan al rigor de las entidades crediticias a la hora de conceder una hipoteca. Está claro que es mejor momento para comprar y, desde luego, muy mala coyuntura para vender. En Málaga, desde enero de 2004 hasta junio de 2007, se contabilizaron 136.695 transacciones. La provincia, siguió de esta forma la tónica general andaluza, que encabezó todas las estadísticas nacionales en este apartado.Según los últimos datos del Ministerio de Vivienda, en el segundo trimestre de 2007 Málaga registró 6.210 transacciones inmobiliarias de viviendas de segunda mano, lo que la situó a la cabeza durante ese periodo por delante de Sevilla con 4.653 y Cádiz con 3.336. A este respecto. El valor medio de las transacciones durante este periodo fue de 208.340 euros, cifra que elevó la tendencia bajista que arrastraba la capital desde 2004. Por contra, el precio medio de metro cuadrado de suelo urbano en la ciudad se ha ido incrementando a lo largo de los años desde 2004 hasta junio de 2007, colocándose en 302 euros en este último trimestre, con una variación anual del 20%. Sin embargo, Málaga no es capital más cara, puesto que por encima se encuentran Cádiz y Almería con 357 y 344 euros, respectivamente, en el segundo trimestre de 2007. El auge de la vivienda se ha sustentado durante los últimos años en ser un valor seguro como inversión, mucho más, por ejemplo, que la bolsa. De hecho, ha sido habitual el caso de familias con buenos ingresos que han adquirido cuatro o cinco inmuebles para venderlos con posterioridad a un precio mucho mayor.Pero la situación ha cambiado, tanto para conseguir una hipoteca como para revender con precios muy superiores a los de compra. En este sentido, las sociedades tasadoras tienen orden directa del Banco de España de bajar las valoraciones de los inmuebles.Así las cosas, según los expertos, las viviendas se adquieren ahora para sacarles partido ofreciéndolas en alquiler porque, dadas las circunstancias, no es en absoluto buen momento para vender. Hipotecas. En general, la inestabilidad del panorama inmobiliario va a condicionar las estrategias a corto y medio plazo. Los propios bancos muestran mucha mayor mesura en la concesión de préstamos hipotecarios, endureciendo mucho las condiciones que debe reunir el cliente. Desde noviembre de 2006, la firma de hipotecas se redujo un 25% en Málaga, llegando a contabilizarse 3.986 créditos a finales de 2007. Además, el dinero prestado para comprar un piso también sufrió un fuerte descenso y muestra de ello es que en noviembre, los bancos y cajas otorgaron 652,2 millones de euros a los malagueños frente a los más de 800 millones de 2006.
Discapacidad y vivienda, binomio complicadoLa búsqueda de una vivienda puede resultar uno de los mayores quebraderos de cabeza para los malagueños, más aún si la persona que lo busca tiene alguna discapacidad. Este colectivo encuentra muchas dificultades a la hora de encontrar piso. Las primeras trabas las reciben de las propias inmobiliarias.La amplia mayoría, por no decir todas sin excepción, incluye en sus páginas ´web´ una serie de datos para que el usuario decida si la vivienda es de su interés o no. Sin embargo, no incluyen si el portal del edificio, las zonas comunes del mismo o sus alrededores cumplen los requisitos para ser considerados como accesibles. Aunque algunas de dichas inmobiliarias no le dan importancia a esto, Málaga Gestión Inmobiliaria reconoce que debe ser un dato a incluir en las viviendas que tengan estas características y afirma que en sus próximas actualizaciones intentarán mejorar. Cuando una persona con discapacidad decide comprarse un piso el proceso puede llegar a alargarse hasta el triple de tiempo que en otro caso. Las nuevas promociones sí cumplen con los requisitos, lo que supone para una persona con discapacidad un incremento de dinero.

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