El soterramiento del tráfico debe ser compatible con la entrada de vehículos. Cierran el resto de cambios del recinto
El proyecto para soterrar el tráfico junto a la entrada al puerto por la plaza de la Marina para hacerla peatonal sigue sin desbloquearse cuatro meses después de que fuera planteado por el Ayuntamiento como la solución para facilitar la conexión a pie con los muelles que van a tener un uso ciudadano. La Autoridad Portuaria mantuvo en días pasados un encuentro con los responsables del Consistorio en el que cerraron prácticamente todos los aspectos de la última modificación del plan urbanístico para el recinto portuario, con la salvedad de este soterramiento.La idea no está ultimada porque necesita ajustarse a nivel técnico a las determinaciones planteadas por ambas partes. El presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Linde, explicó que el soterramiento del tráfico debe ser compatible con la reserva de un espacio de aparcamientos para autocares junto al palmeral que irá en el muelle del paseo de los Curas. Así, la peatonalización de la entrada por la Marina deberá prevé viales de acceso al puerto para estos autobuses y para los turismos que necesiten entrar por algún motivo.«Espero que se resuelvan todas estas cuestiones y que no sean insalvables», afirmó Linde, quien abogó porque se fije realmente el compromiso del Ayuntamiento para efectuar el soterramiento del tráfico en este punto. «Me parece una magnífica solución siempre que no suponga inventarnos problemas», matizó.Por su parte, el alcalde, Francisco de la Torre , confió en llegar a un acuerdo con la Autoridad Portuaria sobre el acceso al puerto por la plaza de la Marina antes de la Feria de Agosto, que comenzará el 15 de agosto. De la Torre calificó de «muy fructífero» el último encuentro con Linde y agregó que quedaron «casi todos los puntos acordados a excepción de la zona de la plaza de la Marina, donde hay diversas alternativas», señaló.No obstante, según pudo conocer este periódico, parece seguro que los cuatro conjuntos de columnas que flanquean la entrada al puerto no tendrán que desaparecer para hacer posible el soterramiento, ya que el Consistorio ha aceptado que el vial tenga bajo tierra casi el mismo trazado que posee en superficie. En el caso de que tuvieran que retirarse, volverían a colocarse en su lugar.El resto de cambios en el Plan del Puerto hacen referencia a la reserva de aparcamientos en la explanada de Levante, la construcción de edificios de oficinas en el muelle de Heredia y la reserva de espacio para el Auditorio y el Instituto Oceanográfico en San Andrés, donde varían los accesos.
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