El presupuesto total asciende a 3,8 millones de euros, asumidos por completo por el Ayuntamiento
La Opinión 05.08.2014 | 05:00
El plazo de ejecución de las intervenciones que empezaron ayer se ha fijado en cinco meses, por lo que estará listo para principios de 2015.
Comienza la cuenta atrás para la sede del museo Pompidou en Málaga. Las obras para la adecuación del Cubo del puerto con el fin de albergar próximamente el centro de arte comenzaron ayer, según informó el Ayuntamiento. La empresa adjudicataria, la UTE Dragados-Naxfor, cuenta con un plazo de ejecución de 5 meses, por lo que estará listo para principios de 2015. El presupuesto asciende a 3,8 millones de euros y será asumido por el Ayuntamiento por completo. Este importe supone una rebaja del 24% con respecto al presupuesto de licitación.
Las actuaciones tienen como objetivo la adaptación del Cubo para su uso como espacio de salas expositivas tanto de colecciones permanentes como de carácter temporal. El programa incluye, además, otros usos complementarios como sala de usos múltiples, salas educativas y de talleres, cafetería y tienda, así como zonas de uso restringido de conservación y restauración de las obras, entre otros espacios.
La superficie construida supera un espacio de 6.300 metros cuadrados de techo. Se encuentra en una ubicación privilegiada, en la esquina de los muelles 1 y 2 del puerto de Málaga, con acceso desde el Paseo de los Curas y el Paseo de la Farola. La estructura se caracteriza por un cubo de vidrio de grandes dimensiones que posee dos niveles: una planta baja y otra inferior. Los usos se distribuyen por plantas de la siguiente forma. La planta baja acogerá el acceso público, control de acceso, cafetería, servicios, tienda, sala exposiciones temporales, salas educativa y de talleres, acceso de personal y control.
Por su parte, el primer nivel albergará un espacio expositivo de colección permanente, sala de usos múltiples, espacios de conservación y restauración de exposiciones, zona de personal, servicios y espacios técnicos. Dentro de las zonas comunes en cada nivel se plantea una zona de servicios y zonas de almacenaje y de control de instalaciones.
Desde el punto de vista constructivo, se trata de una estructura de pilares y losas de hormigón armado que forman una retícula de luz de ocho por ocho metros. Debajo de las plantas existen otros dos niveles de sótano de aparcamiento.
Se trata de una edificación muy autónoma dentro del espacio de Muelle 1, que prevé las obras y adaptaciones necesarias para la satisfacción de las normativas, así como de las medidas de seguridad necesarias en función del destino previsto, señalaron desde el Consistorio.
Espacio versátil El proyecto plantea un espacio versátil que invita al ciudadano a un acceso libre a todos los espacios de relación, actividades e información a los visitantes, con un vestíbulo, un apartado de información, una cafetería, tiendas, talleres, salón de actos y demás zonas. De esta forma se permite la entrada controlada a los espacios expositivos. Por esta razón, el diseño huye de protagonismos, tratando de generar espacios neutros al servicio de la contemplación de las obras que arte.
También se han tenido en cuenta los parámetros de eficiencia energética a la hora de construir las instalaciones. Los estándares de climatización, seguridad, iluminación, contraincendios o coordinación entre sistemas responden a los más altos niveles utilizados para este tipo de equipamientos, según destacaron desde el Ayuntamiento. Este tipo de equipamiento se enmarca en los nuevos conceptos museológicos actuales, que centran su interés en la comunidad, el público y el usuario, independientemente de la relevancia de las colecciones a exponer. De esta forma, se pretende conseguir una instalación viva y participativa, en la que los talleres y las actividades formativas y de difusión generen un fuerte sentido de comunidad creativa. Este equipamiento busca constituir una plataforma de intercambios entre la sociedad malagueña y la creación contemporánea.
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