miércoles, 7 de abril de 2010

MALAGA. El Puerto pide garantías financieras a la empresa de los atraques de San Andrés. (MALAGAHOY)

Trata de salvaguardar el proyecto ante posibles eventualidades económicas de la firma encargada de la obra y explotación

S. SÁNCHEZ / MÁLAGA | ACTUALIZADO 07.04.2010 - 01:00
La actual adjudicataria del proyecto del puerto deportivo previsto en la zona de San Andrés, justo en la desembocadura del río Guadalmedina, deberá acreditar y ofrecer mayores garantías financieras para hacerse finalmente con la concesión de este espacio. Ésa es la exigencia que le ha trasladado el Consejo de Administración del Puerto de Málaga para autorizar finalmente al Consorcio Marinas del Mediterráneo-GEA21 la construcción de las citadas instalaciones náuticas y su explotación durante los próximos 35 años, según confirmó a este periódico el presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Linde.

Con ello, se busca fijar una salvaguarda mayor en la intervención, con el fin de que no se produzcan los problemas que en el actual escenario de crisis económica han sacudido a numerosas firmas objeto de concesiones. "Lo que tratamos con esto es de evitar situaciones ya conocidas y que nos dejen tirados a mitad de obra", indicaron fuentes próximas al Puerto, que recordaron las dificultades ocurridas en las obras del Palmeral de las Sorpresas, donde la empresa constructora abandonó la obra por problemas económicos, y la transformación comercial del muelle 1, donde la firma original, Udisa, también dejó la actuación.

El acuerdo de la concesión está pendiente, según Linde, de que la única empresa que concurrió al concurso del puerto deportivo presente los documentos demandados y estimó que el asunto podría quedar definitivamente cerrado a lo largo de este mes.

La construcción del puerto deportivo, cuya inversión ascenderá a unos 24 millones, no debe superar los 18 meses, según la oferta seleccionada. La nueva zona náutica contará con 121.011 metros cuadrados, de los que 92.286 serán de superficie de espejo de agua y 28.725 de tierra. Se crearán 662 amarres, en régimen de alquiler, de los que 502 amarres, de esloras hasta 30 metros, estarán en el mar, y 160 se ubicarán en la marina seca.

Entre los requisitos del concurso se encuentra la construcción de un mínimo de 300 plazas de aparcamiento en superficie, la edificación de un complejo náutico de 2.000 metros y una escuela de vela de 200 metros, la edificación de locales comerciales de 3.000 metros para comercios especializados.

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