El dragado del suelo marino junto al muelle de contenedores tiene una profundidad que pone en riesgo la estabilidad de la plataforma
Imagen del muelle 9 del puerto, que se construyó a principios de la pasada década para propiciar el tráfico de contenedores. :: SALVADOR SALAS
En plena carestía presupuestaria, la Autoridad Portuaria ha iniciado los trámites para contratar un proyecto que le permitirá corregir una obra que hizo mal a principios de la pasada década. Se trata del dragado del fondo marino existente junto al muelle 9, el que alberga las operaciones de tráfico de contenedores. Este muelle tiene 720 metros de longitud de los que los 360 situados más al sur fueron realizados por el Puerto en 2003 y el resto por la concesionaria de esta plataforma de transportes. Según el proyecto portuario, el fondo junto a la línea del muelle debería tener una profundidad de 16 metros, continuada en una anchura de 14 metros y, desde ahí, caer en un talud hasta las profundidades marinas. Sin embargo, una empresa realizó en junio de 2010 una inspección con sónar de esa zona y comprobó que estos parámetros no se corresponden con la realidad.
En concreto, el barrido de esta empresa detectó que había zonas en las que el dragado es inferior a los 16 metros y otras en las que es superior, llegando a calados de casi 20 metros. De ahí que el Puerto se haya visto obligado a contratar un proyecto de restitución de la escollera de la banqueta del muelle 9 que está valorado en 577.865 euros.
Contratación en trámite
Esta actuación, cuya contratación todavía no ha concluido, permitirá dotar al dragado del suelo marino junto al muelle de la profundidad necesaria para garantizar la seguridad de las operaciones que realizan los buques que cargan y descargan contenedores. En el proyecto se reseña que el calado actual puede afectar negativamente a la explotación del muelle en las zonas en las que es menor de los 16 metros, ya que podría darse el caso de que algunos buques topen con el fondo marino, y también en las que ronda los 20 metros, ya que ello «puede comprometer la estabilidad del muelle», apunta el expediente en contratación.
Cuestionado por este periódico, el presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Linde, afirmó que «no está claro» el motivo por el que el dragado del muelle 9 no se corresponde con el proyecto que se ejecutó en 2003. «Algunos dicen que puede haber variado por el efecto de las turbinas de los grandes barcos o por el asentamiento de lodos», dijo, si bien reconoció que también «es posible que la obra no se hiciera bien». «Es un tema técnico», añadió.
Esta previsto que la obra para subsanar esta negligencia dure cinco meses una vez que se ponga en marcha. Los rellenos y calados del fondo del mar tendrán que compatibilizarse con la actividad del muelle.
estamos hasta arriba de noticias de malas gestiones como esta, me pregunto como se podría paliar...
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