La empresa malagueña, que tiene cuarenta trabajadores en plantilla, achaca su situación de insolvencia a un impago de la Junta
La constructora malagueña Ingeconser solicitó hace dos días ser declarada en concurso de acreedores ante la imposibilidad de refinanciar su deuda, cifrada en 60 millones de euros. La empresa, que llegó a estar entre las mayores de su sector en la provincia y actualmente cuenta con alrededor de 40 trabajadores en plantilla, estaba en situación preconcursal desde hace unos meses. El juzgado de lo mercantil número 1 de Málaga se hará cargo de este nuevo proceso concursal, según pudo confirmar ayer SUR.
Según fuentes de la empresa, el detonante de esta situación de insolvencia ha sido el impago, por parte de la Junta de Andalucía, de 5 millones de euros correspondientes al contrato de construcción de la Escuela de Enfermería de Sevilla, una obra presupuestada en 15 millones que está ejecutada al 90% desde hace un año. La compañía asegura que a raíz de esta deuda se ha precipitado el incumplimiento de sus obligaciones con los bancos y sus proveedores.
No obstante, las dificultades para Ingeconser empezaron antes, como para el resto de su sector. Desde 2008 la empresa ha refinanciado su deuda, reducido su plantilla (que llegó a superar el centenar de trabajadores) y emprendido un plan de internacionalización para compensar la caída de la actividad constructora en España. De hecho, actualmente tiene obras en Panamá y Argelia. Su división inmobiliaria, con la que llegó a emprender proyectos residenciales en Argentina y Brasil, sí está totalmente paralizada.
A partir de ahora, la empresa se propone, según sus portavoces, continuar con su actividad y alcanzar un acuerdo con sus acreedores para conseguir salir del concurso de acreedores. Dichas fuentes afirman que por el momento no existe intención de efectuar recortes de plantilla.
Ingeconser fue fundada en 1998 en Málaga y en los años de bonanza llegó a superar los 100 millones de euros de facturación.
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