martes, 27 de noviembre de 2012

La firma de hipotecas sube y añade otra señal de mejoría del mercado inmobiliario (Sur)


La concesión de créditos registró en septiempre el mejor dato desde junio de 2011, sumándose al aumento en la venta de viviendas y al inicio de nuevas promociones

La firma de hipotecas sube y añade otra señal de mejoría del mercado inmobiliario
El mercado ruso ha puesto sus miras en la Costa del Sol, relanzando el turismo residencial. :: Josele-Lanza
El mercado inmobiliario vuelve a latir, aunque las constantes vitales del que fue el principal motor económico de la provincia todavía son bastante débiles. El tiempo dirá si se puede hablar de recuperación plena o de una leve mejoría coyuntural, pero lo cierto es que los principales indicadores del sector apuntan a que el paciente evoluciona favorablemente y que, de seguir en esta línea, podría recibir el alta, si no a corto, sí al menos a medio plazo: la venta de viviendas acumula ya dos trimestres de subidas (3,8%), el número de promociones residenciales impulsadas en lo que va de año (988) aumenta por primera vez desde el estallido de la crisis y el 'stock' de pisos nuevos que siguen en manos de los promotores continúa bajando situándose actualmente en 12.000. A estos síntomas que avivan la tesis optimista se sumó ayer una nueva referencia, la que confirma al pasado septiembre como el mejor mes desde junio de 2011 en lo que a constitución de hipotecas se refiere en Málaga.
Según el último balance del Instituto Nacional de Estadística (INE), las entidades financieras concedieron a lo largo de septiembre en la provincia 2.057 préstamos hipotecarios para la adquisición de viviendas, solares y fincas rústicas, un 22% más respecto a agosto y un 32% más que justo un año antes. La misma tendencia, aunque más suave, se detecta si únicamente se tienen en cuenta los créditos destinados a la compra de viviendas, ya que en el último mes de referencia (septiembre) se formalizaron 1.218 con un montante medio de 97.200 euros, frente a los 1.085 de agosto (un 12,5% más) y los 1.069 de septiembre de 2011 (14%). En cualquier caso, se trata de niveles muy por debajo de los que se registraban en pleno 'boom' del ladrillo, con el techo histórico que marcó junio de 2006 con 9.428 nuevas hipotecas, de las que 6.589 eran de viviendas con un importe medio de 160.000 euros. Aun así, Málaga sigue a la cabeza en Andalucía en número de operaciones y en cuarto lugar del 'ranking' español por detrás de Madrid, Barcelona y Valencia. En el ámbito nacional, los datos mensuales muestran que este indicador también podría haber tocado suelo, ya que en septiembre se formalizaron 21.195 préstamos para la compra de pisos, un tercio menos que un año antes, pero un 0,4% más que en agosto.
Optimismo
Para encontrar una explicación hay que mirar al revulsivo que suponen las próximas subida del IVA para la vivienda nueva del 4 al 10% y la eliminación de la deducción por compra que se aplicarán a partir del 1 de enero de 2013, pero también los importantes descuentos de hasta el 70% que ofrecen los bancos para desprenderse de la 'herencia' dejada por constructoras en quiebra y el repunte experimentado en el turismo residencial de la mano de mercados emergentes como el ruso y el escandinavo, que están cubriendo el enorme vacío dejado por ingleses y alemanes. «Las medidas fiscales se están notando, pero no tanto como esperábamos porque el mercado nacional sigue bastante parado por el miedo a perder el trabajo. En cambio, lo que nos hace ser optimistas es la compraventa de extranjeros, sobre todo rusos, que están empezando a animar el sector, aunque aún estamos lejos de los niveles de 2007, cuando el 40% de lo que se construía lo compraban extranjeros», afirma el presidente de la Asociación de Constructores y Promotores, José Prado, quien destaca que solo el año pasado cerca de dos mil inmuebles fueron adquiridos por turistas procedentes del gigante asiático, eso sí, la mayoría concentradas en el triángulo formado por Marbella, Estepona y Benahavís. «Por algún sitio tiene que empezar a remontar», precisa el responsable de la patronal, quien asegura que «en cuanto exista una mayor estabilidad laboral el mercado nacional empezará a resurgir porque la vivienda hace falta». De hecho, según los cálculos que maneja el sector, la demanda natural de la provincia oscila entre las 20.000 y las 22.000 viviendas anuales, a las que habría que sumar la procedente del turismo residencial.
También destila optimismo el director del Instituto de Práctica Empresarial (IPE), José Antonio Pérez, reconociendo que «todo indica que se ha tocado fondo» y vacitinando que tanto en lo que queda de año como a comienzos del próximo «más allá del impacto fiscal y ofertas bancarias, se seguirán consolidando la tendencia al alza en las compraventas y, con ella la liquidación del 'stock', el inicio de nuevos proyectos y la construcción sostenible, ya que sin construcción no habrá recuperación».
En este sentido, para el decano del Colegio de Economistas, Juan Carlos Robles, al margen del aumento de las ventas o de la concesión de hipotecas, «lo más relevante es que se están iniciando nuevos proyectos a pesar del 'stock' que todavía queda por vender, porque es el que dentro de un tiempo hará repuntar la construcción y, más a largo plazo, generar empleo». «Si nos ciñéramos solo a la venta, se daría una imagen irreal porque para viviendas a saldo siempre hay compradores, tanto particulares como, sobre todo, ligados a fondos de inversión», recalca.

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