Las empresas interesadas en invertir en la parcela plantean emular lo hecho en los zocos de San Miguel y San Antón, en Madrid Incluiría una escuela de gastronomía y espacio cultural
SEBASTIÁN SÁNCHEZ MÁLAGA | ACTUALIZADO 09.04.2013 - 01:00
El Ayuntamiento de Málaga quiere cambiar el aroma a celuloide antiguo que a pesar de un abandono de ocho años sigue manando de la manzana de los antiguos cines Astoria y Victoria por el de una iniciativa empresarial con la cocina como eje de referencia. El equipo de gobierno del PP trabaja desde hace meses en una propuesta que permitirá levantar un gran mercado gastronómico ygourmet en esta parcela de la Plaza de la Merced, emulando otras iniciativas de éxito conocidas en Madrid como los mercados de San Miguel y San Antón, donde el concepto tradicional de zoco da paso a una revisión considerable tanto en el tipo de puestos como en la relación con el consumidor.
Según pudo saber Málaga hoy de varias fuentes municipales, esta es la principal alternativa de uso que tiene en sus manos el Ejecutivo local encabezado por Francisco de la Torre. A pesar de ello, el uso futuro de este espacio destinado a equipamiento deberá ser objeto de un concurso abierto a otras posibles iniciativas, cuyo pliego de condiciones es objeto de redacción en estos momentos. Las fuentes apuntaron la existencia de un proyecto ya presentado ante los responsables municipales por al menos una de las dos empresas privadas que han mostrado interés en actuar sobre esta pastilla, si bien ambas coinciden en la idea a desarrollar.
La iniciativa, bautiza como mercado turístico y espacio cultural, habrá de asentarse en cualquier caso sobre un edificio de nueva planta, con lo que los costes tanto de demolición de las actuales instalaciones como de la ejecución del futuro inmueble habrán de ser asumidos directamente por el promotor. A cambio, se le permitirá un uso mercantil con el que recuperar la inversión económica que realice.
Bajo esta denominación, la intervención a la que se da forma y que se mantiene en secreto en el seno del equipo de gobierno, incorporaría una escuela de gastronomía, un espacio expositivo y museístico y una terraza en la cubierta de la edificación resultante en la que se implantaría un restaurante desde el que poder observar el paisaje urbano del entorno. Entre los atractivos de la iniciativa, las fuentes destacaron la apuesta por el fenómeno showcooking, o lo que es lo mismo, por la cocina en vivo. El mismo consiste en la preparación de los diferentes platos de un restaurante en directo, delante de los comensales.
En el marco de esta actuación, el Ayuntamiento recibiría exclusivamente una planta del inmueble, con una superficie próxima a los 1.200 metros cuadrados, para la Casa Natal Pablo Ruiz Picasso. De este modo, según admitió semanas atrás el propio alcalde, Francisco de la Torre, el Consistorio podrá prescindir de las dependencias que actualmente tiene alquiladas en el entorno de la Plaza de la Merced.
El interrogante que pesa sobre un proyecto de estas características es si es factible otorgar uso de mercado a una parcela dibujada como equipamiento desde marzo de 2010 por el equipo de gobierno, en la estrategia de impedir a los anteriores propietarios del inmueble, Grupo Baensa, la construcción de viviendas de lujo. Una firma a la que el Ayuntamiento acabó adquiriendo la finca por unos 20 millones de euros (parte en metálico y el resto en suelos para VPO).
La clave a esta cuestión puede estar en la modificación de elementos del Plan General de Ordenación Urbanística que la Gerencia de Urbanismo tramita para permitir en suelos de equipamiento usos comerciales. Este cambio es el que se ha sustanciado para dar vía libre a la ejecución de mercados de abastos en ciertos puntos de la ciudad mediante la colaboración público privada, ante la incapacidad económica del Ayuntamiento de acometerlos en solitario.
La variación en el planteamiento posibilita que empresarios dispuestos a desarrollar estas instalaciones puedan destinar parte de la superficie autorizada a supermercado, guardería o espacios gourmet, entre otros. Todo ello en la idea de rentabilizar sus inversiones. No obstante, los detalles técnicos sobre el encaje necesario para el Astoria está siendo objeto de análisis en encuentros de técnicos de la Gerencia de Urbanismo y del área de Promoción Empresarial, los dos departamentos más directamente vinculados a la iniciativa.
Desde el punto de vista visual, queda por conocer los pormenores del diseño. Uno de los detalles a tener en consideración es que la intervención que hay sobre la mesa municipal rebaja en una planta la altura actual del inmueble. Algo que, a su vez, supondrá reducir la edificabilidad autorizada en la parcela, que asciende a unos 6.400 metros cuadrados.
Con ello, indicaron otras fuentes próximas a la Casona del Parque, se busca minimizar el impacto visual de la construcción y abrir el campo de visión que se tenga desde la Plaza de la Merced hacia el conjunto de la Alcazaba y el Monte de Gibralfaro. Otra novedad es que, al parecer, la intervención no contempla plazas de aparcamiento, posiblemente en un intento por abaratar los costes de construcción.
Según pudo saber Málaga hoy de varias fuentes municipales, esta es la principal alternativa de uso que tiene en sus manos el Ejecutivo local encabezado por Francisco de la Torre. A pesar de ello, el uso futuro de este espacio destinado a equipamiento deberá ser objeto de un concurso abierto a otras posibles iniciativas, cuyo pliego de condiciones es objeto de redacción en estos momentos. Las fuentes apuntaron la existencia de un proyecto ya presentado ante los responsables municipales por al menos una de las dos empresas privadas que han mostrado interés en actuar sobre esta pastilla, si bien ambas coinciden en la idea a desarrollar.
La iniciativa, bautiza como mercado turístico y espacio cultural, habrá de asentarse en cualquier caso sobre un edificio de nueva planta, con lo que los costes tanto de demolición de las actuales instalaciones como de la ejecución del futuro inmueble habrán de ser asumidos directamente por el promotor. A cambio, se le permitirá un uso mercantil con el que recuperar la inversión económica que realice.
Bajo esta denominación, la intervención a la que se da forma y que se mantiene en secreto en el seno del equipo de gobierno, incorporaría una escuela de gastronomía, un espacio expositivo y museístico y una terraza en la cubierta de la edificación resultante en la que se implantaría un restaurante desde el que poder observar el paisaje urbano del entorno. Entre los atractivos de la iniciativa, las fuentes destacaron la apuesta por el fenómeno showcooking, o lo que es lo mismo, por la cocina en vivo. El mismo consiste en la preparación de los diferentes platos de un restaurante en directo, delante de los comensales.
En el marco de esta actuación, el Ayuntamiento recibiría exclusivamente una planta del inmueble, con una superficie próxima a los 1.200 metros cuadrados, para la Casa Natal Pablo Ruiz Picasso. De este modo, según admitió semanas atrás el propio alcalde, Francisco de la Torre, el Consistorio podrá prescindir de las dependencias que actualmente tiene alquiladas en el entorno de la Plaza de la Merced.
El interrogante que pesa sobre un proyecto de estas características es si es factible otorgar uso de mercado a una parcela dibujada como equipamiento desde marzo de 2010 por el equipo de gobierno, en la estrategia de impedir a los anteriores propietarios del inmueble, Grupo Baensa, la construcción de viviendas de lujo. Una firma a la que el Ayuntamiento acabó adquiriendo la finca por unos 20 millones de euros (parte en metálico y el resto en suelos para VPO).
La clave a esta cuestión puede estar en la modificación de elementos del Plan General de Ordenación Urbanística que la Gerencia de Urbanismo tramita para permitir en suelos de equipamiento usos comerciales. Este cambio es el que se ha sustanciado para dar vía libre a la ejecución de mercados de abastos en ciertos puntos de la ciudad mediante la colaboración público privada, ante la incapacidad económica del Ayuntamiento de acometerlos en solitario.
La variación en el planteamiento posibilita que empresarios dispuestos a desarrollar estas instalaciones puedan destinar parte de la superficie autorizada a supermercado, guardería o espacios gourmet, entre otros. Todo ello en la idea de rentabilizar sus inversiones. No obstante, los detalles técnicos sobre el encaje necesario para el Astoria está siendo objeto de análisis en encuentros de técnicos de la Gerencia de Urbanismo y del área de Promoción Empresarial, los dos departamentos más directamente vinculados a la iniciativa.
Desde el punto de vista visual, queda por conocer los pormenores del diseño. Uno de los detalles a tener en consideración es que la intervención que hay sobre la mesa municipal rebaja en una planta la altura actual del inmueble. Algo que, a su vez, supondrá reducir la edificabilidad autorizada en la parcela, que asciende a unos 6.400 metros cuadrados.
Con ello, indicaron otras fuentes próximas a la Casona del Parque, se busca minimizar el impacto visual de la construcción y abrir el campo de visión que se tenga desde la Plaza de la Merced hacia el conjunto de la Alcazaba y el Monte de Gibralfaro. Otra novedad es que, al parecer, la intervención no contempla plazas de aparcamiento, posiblemente en un intento por abaratar los costes de construcción.
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