El documento deja fuera de ordenación a 752 viviendas, la mitad habitadas, y dos hoteles construidos con licencias ilegales El Banana Beach ocupa el emplazamiento previsto para la futura estación del AVE
No ha habido amnistía. Catorce de los edificios construidos al amparo de la ilegalidad cuando Juan Antonio Roca mandaba en el Ayuntamiento no han encontrado acomodo en el nuevo Plan General. Suman en total 752 viviendas, la mitad de las cuales se encuentran ocupadas. Entre estas edificaciones se encuentran dos hoteles.Según la información facilitada por Obras Públicas, su legalización ha sido imposible porque son incompatibles con el modelo de ciudad contemplado en el documento «por situarse en áreas estratégicas, ocupar el litoral o ubicarse en zonas de fuertes carencias dotacionales». En consecuencia, los suelos sobre los que se levantan estos inmuebles siguen apareciendo en el Plan como espacios libres y de equipamientos públicos.Es el caso del edificio Banana Beach, con 238 viviendas, en cuyo emplazamiento se prevé que vaya la futura estación del AVE de Marbella. Otra de las promociones que queda en esta situación es la de Río Real Playa (cuatro edificios con un total de 29 viviendas), levantado en el litoral y que afecta también a una zona arqueológica.La consejera explicó que serán los tribunales los que deberán decidir el futuro de estos edificios. El pasado enero, el TSJA requirió a la gestora para que informara sobre posibles demoliciones, y la comisión pidió que se esperara a que concluyera la redacción del PGOU. Ahora, el documento ya está terminado.
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