sábado, 28 de julio de 2007

El neoclásico aparece en las fachada del Postigo de Arance (La Opinión)

El número 9 de esta céntrica calle cuenta con unas pinturas en la fachada del fin del siglo XVIII que es una evolución de barroco que predomina en la ciudad
M. FERRARY. MÁLAGALas pinturas en las fachadas son una de las características de muchas viviendas de la Málaga del siglo XVIII. En pleno barroco, la sociedad malagueña hizo de esta práctica decorativa una seña de identidad de la ciudad. Son muchos los ejemplos que se encuentran en la ciudad, muchos de ellos escondidos por capas de pintura posteriores. Sin embargo, cada vez que se inicia la rehabilitación de un edificio salen a la luz esos elementos decorativos barrocos. Usualmente suelen ser dibujos arquitectónicos y que utilizan de forma predominante el color ocre y óxido. Pero hay al menos una casa que se sale de esta norma. Se encuentra en el número 9 de la calle Postigo de Arance.Las obras de recuperación de este edificio han permitido sacar a la luz unas pinturas de estilo neoclásico, tratadas por los técnicos de la empresa Quibla Restaura para que recuperar su antigua espectacularidad.Lo primero que destaca de estas pinturas es que los colores predominantes son el verde, el negro y el amarillo, frente a las habituales tonalidades en rojo ocre y tierra de otros edificios un poco más antiguos. Esto demuestra cómo esta decoración es una evolución del gusto estético barroco, acercándose al neoclásico.Otro elemento diferenciador es que no existe ningún elemento arquitectónico fingido, tendencia común en los edificios barrocos para dar volumen y movimiento a la fachada, con un enriquecimiento de la imagen del inmueble. En este caso se opta por guirnaldas con un sentido puramente decorativo, alejado de los efectos ópticos de otros dibujos.Destaca incluso una orla en la que se representa una escena con figuras, algo poco usual en los edificios del barroco malagueño. En ellos no se suele prodigar la representación figurativa. Si acaso las que están relacionadas con algún escudo de armas e, incluso, ángeles como elemento religioso. No obstante, la opción que se encuentra en el Postigo de Arance número 9 es una escena que, desgraciadamente, no se conserva completa.El edificio en sí mismo, que está siendo rehabilitado gracias a la colaboración de la Oficina Municipal de Rehabilitación del Centro, cuenta además con elementos muy interesantes, como la propia portada de caliza y líneas rectas. La corona una guirnalda tallada que se parece a las que están representadas en pintura.El interior cuenta con un interesante patio flanqueado por columnas de estilo dórico y se conserva parte del artesonado de madera del zaguán

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