La autovía que unirá Málaga y Almería se retrasa hasta 2010 (La Opinión)

La vía rápida acumula demoras desde que se proyectó, hace diecisiete años, debido, entre otros factores, al accidente que acabó con la vida de seis obreros
El cúmulo de acantilados, lomas, peñas,barrancos y riscos que se pueden divisar desde las playas de Almuñécar parecen la excusa perfecta para demorar la ejecución de la autovía del Mediterráneo. Y es que han pasado unos 17 años desde que se establecieron las bases de una infraestructura que todavía es objeto de deseo inalcanzable para miles de conductores que, mientras comprueban los rigores veraniegos de la Costa Tropical, se adentran en la serpenteante N-340 esperando que la `roulotte´ o el camión que tienen delante decida apartarse de su camino de una vez. Lo cierto es que la autovía del Mediterráneo está costando sangre, sudor, lágrimas... y mucho dinero. La sangre y las lágrimas no son apreciaciones gratuitas. Seis obreros fallecieron en noviembre de 2005 mientras trabajaban en un viaducto de la autovía en Torrecuevas. La tragedia se relacionó inmediatamente con la presunta falta de seguridad en unos trabajos dejados en manos de subcontratas y el proceso judicial todavía sigue su curso. La infraestructura que provocó la muerte de los operarios aún permanece desierta dos años después. Los trabajos están paralizados en dicho lugar a la espera de que alguien resuelva el entuerto creado.El derrumbe del viaducto ha sido, sin duda, el punto más negro de un proyecto que no termina de ver la luz. "A finales de 2009 estará terminado el enlace entre Málaga y Almería". Esta frase corresponde a la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, y fue pronunciada hace dos años con motivo de la inauguración del primer tramo de la A-7 en la provincia (entre Castell de Ferro y Polopos). Lo cierto es que, más de 24 meses después, la provincia de Granada es el único punto del litoral mediterráneo nacional que carece de autovía. Las manifestaciones que realizara entonces la titular de Fomento parecen difíciles de cumplir. Todavía hay tramos en los que las máquinas acaban de entrar, como el denominado Taramay-Lobres, que fue adjudicado a finales de febrero de 2007, con un plazo de ejecución que supera los tres años. La autovía, por tanto, estará para los primeros meses de 2010.