El director del Museo de las Ciencias de Valencia, Manuel Toharia, se trasladó ayer a Estepona para presentar el proyecto básico de la Ciudad del Conocimiento. Toharia es el asesor científico de esta iniciativa impulsada por la Fundación Benéfico Educativa Antonia Guerrero. El proyecto básico ha sido redactado por el estudio de arquitectos Jiménez Brassa, al que se le adjudicó en noviembre de 2007 la elaboración de los proyectos básicos y de ejecución en base al anteproyecto elaborado por la fundación y sus colaboradores.
Según explicó Toharia, «se pondrá en marcha una sala de proyección audiovisual espectacular con lo último en tecnología. Algo similar a un IMAX pero con lo último del momento», además de subrayar que habrá un Palacio de Congresos «con capacidad para 800 personas, varios restaurantes de diferentes categorías y por supuesto una parte museística en la que tendrán cabida la ciencia y el lenguaje».
Fondos propios
Los arquitectos Eduardo Jiménez y Yolanda Brassa también se trasladaron a Estepona para presentar el trabajo en un acto público al que estuvieron invitados los miembros de la Corporación y colectivos sociales. El proyecto se adjudicó al estudio de arquitectos por 1,4 millones de euros, mientras que el proyecto científico supuso el desembolso de 400.000 euros, cifras que ha afrontado la fundación a través de fondos propios.
El centro cultural y educativo es una propuesta de la Fundación Antonia Guerrero que dispone de más de 300.000 metros cuadrados de suelo legados por la testadora que da nombre a la fundación. El objetivo: que se pusiera en marcha en la ciudad una entidad que velara por «la educación y promoción de las mujeres en general y de los vecinos de Estepona en particular».
De esos 300.000 metros cuadrados, unos 25.000 se encuentran en Saladavieja donde se pretende hacer el centro que ocupará la mitad de la parcela. Se espera que las obras comiencen a principios de 2009.
Según explicó Toharia, «se pondrá en marcha una sala de proyección audiovisual espectacular con lo último en tecnología. Algo similar a un IMAX pero con lo último del momento», además de subrayar que habrá un Palacio de Congresos «con capacidad para 800 personas, varios restaurantes de diferentes categorías y por supuesto una parte museística en la que tendrán cabida la ciencia y el lenguaje».
Fondos propios
Los arquitectos Eduardo Jiménez y Yolanda Brassa también se trasladaron a Estepona para presentar el trabajo en un acto público al que estuvieron invitados los miembros de la Corporación y colectivos sociales. El proyecto se adjudicó al estudio de arquitectos por 1,4 millones de euros, mientras que el proyecto científico supuso el desembolso de 400.000 euros, cifras que ha afrontado la fundación a través de fondos propios.
El centro cultural y educativo es una propuesta de la Fundación Antonia Guerrero que dispone de más de 300.000 metros cuadrados de suelo legados por la testadora que da nombre a la fundación. El objetivo: que se pusiera en marcha en la ciudad una entidad que velara por «la educación y promoción de las mujeres en general y de los vecinos de Estepona en particular».
De esos 300.000 metros cuadrados, unos 25.000 se encuentran en Saladavieja donde se pretende hacer el centro que ocupará la mitad de la parcela. Se espera que las obras comiencen a principios de 2009.
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