El proyecto contempla la creación de una zona ajardinada que duplica en extensión al emblemático parque de la Paloma Los vecinos de Benalmádena llevan una década esperando hacer uso de las 20 hectáreas del futuro parque Al Baytar
21.03.2011 -
El terreno que ocupará el futuro parque Al Baytar se extiende desde Arroyo de la Miel hasta Benalmádena Costa. :: F. JIMÉNEZ
El parque Al Baytar está llamado a ser uno de los mayores pulmones verdes de la provincia, con un manto de 20 hectáreas que se extenderán desde Arroyo de la Miel hasta Benalmádena Costa. Para hacerse una idea más certera de su tamaño, equivaldría a 30 campos de fútbol, duplicaría en superficie al parque de la Paloma y triplicaría al de La Batería de Torremolinos. La única diferencia con estos dos emblemáticos recintos de la Costa del Sol es que, casi una década después de que fuera concebido el proyecto al que dará nombre el ilustre botánico andalusí nacido en Benalmádena a finales del siglo XII, aún no se ha actuado sobre el terreno. Ni siquiera en su primera fase, la que consiste en la recuperación ambiental del arroyo Pantano y el entorno de la antigua depuradora de aguas residuales, en desuso desde la entrada en servicio de la nueva en diciembre de 2007.
Esta primera actuación, presupuestada en tres millones de euros (el 75% correspondería a la Junta a través de fondos europeos), está enmarcada en el convenio firmado en 2003 entre el Ayuntamiento y la entonces Confederación Hidrográfica del Sur (actual Agencia Andaluza del Agua) para la regeneración de los cauces que discurren por la localidad, el mismo acuerdo que ha dado lugar a nuevas zonas de esparcimiento como los parques Veracruz, Benamaina y Carvajal (éste último abrirá al público en las próximas semanas una vez recepcionada la obra por parte del Ayuntamiento), y del que también quedan pendientes las obras previstas en Finca Casablanca y arroyo Hondo, las cuales podrían estar listas a lo largo del año.
Sin avances
Un avance que, de momento, no se da en el parque Al Baytar. De hecho, el único paso reciente es el compromiso alcanzado la semana pasada por el alcalde, Enrique Moya, y la delegada provincial de Medio Ambiente, Remedios Martel, para que técnicos de ambas administraciones trabajen conjuntamente en la elaboración de un informe que actualice el estado de la zona para definir el nuevo proyecto.
Dada la magnitud de los terrenos, la propuesta inicial contemplaba su ejecución en tres fases. La primera, la única incluida en el citado convenio, arrancaría en la parte más baja, ubicada junto al Club de Raqueta, donde estaría el acceso principal, abarcando una superficie de 7.500 metros cuadrados. Los trabajos consistirían en la renovación del embovedado del arroyo Pantano y la creación en el espacio de la antigua depuradora de parques infantiles, paseos peatonales, aparcamientos, lagos artificiales, aprovechando los decantadores donde se trataban las aguas residuales, e incluso una zona especial dedicada a la xerojardinería y las plantas medicinales que Ibn Al Baytar recogió en sus estudios. En la parte central se instalarían pistas polideportivas, mientras que en el tramo más alto se mantendría una estampa más rústica entorno al arroyo con paseos y bancos.
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