lunes, 24 de septiembre de 2012

El Ayuntamiento estudia pagar las VPO hasta que los propietarios obtengan la hipoteca (Sur)


El IMV mantendría la titularidad de la hipoteca y la casa durante varios años hasta que el banco permita a la familia subrogarse al préstamo

El Ayuntamiento estudia pagar las VPO hasta que los propietarios obtengan la hipoteca
Al Ayuntamiento todavía le quedan pisos por vender en la barriada de Soliva, al sur de Puerto de la Torre. :: SALVADOR SALAS
La situación no deja de repetirse cada semana en las oficinas del Instituto Municipal de la Vivienda (IMV), que sigue tirando de listas de espera para poder adjudicar las viviendas de protección oficial en venta ante la negativa de los bancos a permitir a las familias subrogarse a los créditos contraídos por el Ayuntamiento. Los adjudicatarios acuden a su cita con el IMV con la esperanza de obtener las llaves del piso deseado y se encuentran con el portazo de las entidades financieras. Como ya publicó este periódico (ver SUR 24/6/2012), solo un 5% de las personas que solicitan una VPO la consiguen y no solo por la escasez de promociones derivada de la crisis, sino también porque se ven forzadas a renunciar a ellas al no conseguir los préstamos bancarios.
Para intentar dar un giro radical a esta dinámica, los responsables del departamento de Vivienda del Consistorio han ideado una fórmula que evitaría a las familias tener que renunciar al piso que les toca por no poder subrogar la hipoteca. Consiste en llevar a cabo lo que denominan una venta diferida de la vivienda. Es decir, el Ayuntamiento y el adjudicatario firmarían un acuerdo o contrato por el que el IMV mantendría la propiedad del piso así como su hipoteca, y el comprador se compromete a hacer frente a las mensualidades del préstamo durante un determinado periodo de tiempo, que podría rondar los cinco o seis años. El objetivo de esta fórmula es obtener un margen para que la situación económica cambie y las entidades financieras vuelvan a ser más flexibles a la hora de facilitar los préstamos.
El delegado de Ordenación del Territorio, Diego Maldonado, explicó que la iniciativa está pensada para familias que, aunque tienen recursos suficientes para hacer frente a las mensualidades de la hipoteca, se encuentran con la negativa de los bancos a concedérsela. No obstante, apuntó que se trata de una posibilidad que todavía está en estudio por parte de los servicios jurídicos del Ayuntamiento ya que, para poder aplicarla, primero hay que verificar su legalidad así como buscar mecanismos que garanticen que los adjudicatarios van a cumplir con el abono de los pagos del préstamo a Vivienda durante los años en los que van a poder hacer uso del piso aunque siga siendo propiedad del IMV. Transcurrido el plazo estipulado, se revisaría cada caso concreto para ver si las familias pueden subrogarse ya a la hipoteca mantenida por el Consistorio. Si es así, se procedería a la firma de la escritura y el piso ya sería de los adjudicatarios con todas las de la ley. En caso contrario, podría estudiarse una prórroga o ampliación del plazo en el que el préstamo seguiría a nombre del departamento de Vivienda.
De aplicarse, esta medida sería de gran ayuda para el equipo de gobierno a la hora de adjudicar las VPO en venta de las nuevas barriadas de Soliva y García Grana que todavía están vacías. En concreto, de García Grana quedan unas treinta por vender y otras tantas de Soliva, donde el IMV ha tenido serios problemas para dar salida a unos pisos que se sortearon hace ya seis años.
Para nuevas promociones
Igualmente, el sistema facilitaría la adjudicación de las viviendas en venta que el Ayuntamiento levantará en la que será su mayor promoción de VPO de los próximos años, a construir al oeste de la ampliación del campus de Teatinos. En este sector, la nueva Sociedad Municipal de Viviendas realizará 1.006 pisos de los que 346 serán en alquiler con opción a compra, y 660 en venta. De estos últimos, 490 ya han sido ofertados por el Consistorio en una convocatoria que se abrió en octubre de 2009, hace tres años, y que todavía no ha sido resuelta, es decir, aún no se ha celebrado el sorteo -al que aspiraban unas diez mil personas-, porque el equipo de gobierno no ha cerrado los créditos para poder financiar las obras.
No obstante, según Maldonado, ya están prácticamente cerrada la negociación con Unicaja para obtener préstamos que permitirán levantar 512 viviendas en la zona de Universidad, 310 en venta y 202 en alquiler.

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