Las seis familias de inquilinos se han buscado un alquiler temporal mientras la Junta les asigna un piso
25.04.2013 | 01:02
ALFONSO VÁZQUEZ Ayer comenzaron las obras de clausura del Corralón de las Dos Puertas, construido en 1900 y conocido así porque da a dos calles, Curadero y Rosal Blanco. Está previsto que las obras terminen hoy, informó un portavoz de los antiguos inquilinos.
Los 13 vecinos que vivían en este corralón, uno de los pocos que quedan en pie en la
ciudad y que había recibido el apoyo de todos los grupos políticos para ser rehabilitado, se han trasladado a viviendas de alquiler de los alrededores de forma temporal. «Nos han repartido en casas de alquiler que hemos encontrado nosotros y la Junta nos paga un tanto por ciento hasta que nos encuentre una vivienda», explicó el portavoz.
La marcha de los vecinos se produce después de la orden de Urbanismo dada el pasado 8 de abril, para que los inquilinos desalojaran el corralón «por riesgo estructural y ruina», una situación que se fue agravando tras las lluvias intensas del pasado otoño e invierno.
El portavoz vecinal señaló el drama que para muchos de estos inquilinos ha supuesto dejar unas viviendas de renta antigua que han sido su casa durante gran parte de su vida. «Mi padre está con mi madre viviendo ahora en la calle Alderete pero él llevaba viviendo en el corralón 44 años», señaló este portavoz.
Los vecinos del corralón han padecido en la última década acoso inmobiliario, atestiguado por la Oficina del Defensor del Pueblo. Un acuerdo del pleno municipal en diciembre de 2012 impidió que la Junta derribara el edificio para construir en su lugar 23 viviendas sociales y un aparcamiento.
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