El delegado provincial de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, Javier Carnero, ha confirmado a este periódico que su departamento ha emitido una resolución sobre la terraza construida en el restaurante La Moraga de Antonio Martín, en la playa de la Malagueta, que obliga a demolerla por carecer de los permisos necesarios. Además, la Junta de Andalucía impone una sanción de unos 30.000 euros a los propietarios del establecimiento que, no obstante, aún tienen la posibilidad de recurrir el dictamen ante la sede central de la consejería o llevar el caso a la vía judicial llegado el momento.
Carnero ha señalado que la obra de remodelación que fue autorizada hace un año y medio en ningún caso permitía el uso hostelero de la terraza, para lo que los empresarios del restaurante construyeron una escalera y un ascensor sobre los que ahora pesa una orden de derribo. “Este caso es un calco del asunto de los chiringuitos, así que no tiene sentido que a otros siete restaurantes de playa se les ordene retirar elementos similares y a éste no”, ha apuntado el delegado de Medio Ambiente, quien ha añadido que en ningún momento Costas ha autorizado que se pueda utilizar la terraza del restaurante, pese a que sus propietarios sostienen que sí tuvo uso años atrás.
Por su parte, Miguel Narváez, de la empresa Andalusian Gourmet Concept, que explota el restaurante en la actualidad, ha resaltado que la resolución de Medio Ambiente no es firme y que la van a recurrir por la vía administrativa e incluso por la judicial si fuera necesario en el convencimiento de que las obras ejecutadas en la terraza no son ilegales. Narváez ha destacado que la resolución no ordena el cierre de la terraza, que seguirá funcionando, y ha confiado en llegar a un acuerdo con la Junta y con Costas porque, según ha asegurado, tanto la escalera como el casetón para el ascensor que Medio Ambiente considera que se construyeron sin permiso están recogidos en el proyecto de reforma del restaurante que fue aprobado por las administraciones. “Lo que no estaba era una barra para servir bebidas, pero los otros elementos sí”, ha apuntado el empresario, quien ha insistido en que la terraza del restaurante se ha usado desde siempre, de lo que posee varios testimonios fotográficos e incluso pictóricos.
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