El proyecto incluye una fuente y un jardín, así como la creación de un pasaje peatonal en la calle Sacromonte
La constante presencia de vehículos en la plaza del Rocío tiene los días contados, para bien de los vecinos y para mal de los conductores que aprovechan esta zona de Benalmádena Pueblo para aparcar. La teniente de alcalde de Benalmádena Pueblo, Sandra Martín, y el concejal de Urbanismo y Obras, Joaquín Villazón, han mantenido una reunión con los residentes del entorno para detallarles en qué va a consistir una de las próximas obras de mejora en este núcleo: la reforma de la plaza del Rocío, en la que la principal novedad es que se prohibirá el estacionamiento en la plaza y el acceso al tráfico rodado. «Se trata de una de las principales peticiones que recabamos en nuestras primeras visitas a los vecinos del pueblo», explicó Martín, quien aseguró haber recibido «numerosas quejas del estado completamente descuidado de la plaza, así como de la presencia de vehículos aparcados, que impedía el desarrollo de cualquier vida social en la plaza». Del mismo modo, tal y como recoge el proyecto elaborado por técnicos municipales, en la plaza se instalará una nueva solería, además de una fuente y una amplia jardinera.
Peatonal
De forma paralela, también se creará un pasaje peatonal en la calle Sacromonte, en la que también se instalará la nueva solería y se construirá al final de la vía una pequeña plaza con bancos. «Estamos seguros que estas actuaciones repercutirán en mejorar la calidad de vida de los vecinos y la imagen del municipio, además de dotar de vida y color a este rincón de Benalmádena Pueblo», valoró Sandra Martín. El presupuesto de la actuación es de 120.000 euros, y el proyecto está pendiente de salir a concurso en las próximas jornadas. Una vez se inicien los trabajos, el periodo de ejecución será de apenas un mes.
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