viernes, 16 de mayo de 2008

El reencuentro con la ciudad viva (SUR)


El arquitecto Salvador Moreno Peralta reivindica la vigencia de la ciudad como espacio reconocible y de convivencia frente a aquellos que defienden que en un mundo globalizado ésta ha muerto y la niegan

¿HA muerto la ciudad en el sentido que siempre se ha concebido con la globalización y la nueva economía? De esta pregunta y de las afirmaciones de los autores que, desde distintos campos, han teorizado sobre la ciudad a la que ya no llaman por su nombre, sino por su negación (la no-ciudad, la anti-ciudad o la post-ciudad), partió ayer el arquitecto Salvador Moreno Peralta para reivindicar la vigencia de la ciudad como espacio reconocible y de convivencia y para proclamar que sigue viva.Aceptar la negación de la ciudad porque pueda entenderse que ésta no se puede abarcar ni física ni intelectualmente debido a su expansión, para Moreno Peralta supone plantearse qué sentido tiene el propio concepto de ciudadanía, el papel que puede jugar el ciudadano o cómo se puede hacer una adecuada planificación económica. Por ello, el arquitecto animó a no aceptar esta conclusión «apocalíptica». «Hay que invocar de manera urgente a contemplar y considerar los fenómenos urbanos de hoy de otra manera, con otras actitudes, desde una visión poliédrica de la realidad, desde ángulos que descorran los velos de las ideologías, de los prejuicios y las nostalgias para poder reencontrar esa nueva ciudad que vive, se esconde y se agazapa tras la 'no-ciudad'», dijo.
Redefinir la relación
Las nuevas relaciones del ciudadano con el territorio debido al boom de las nuevas tecnologías y la nueva economía con fenómenos como la eclosión del turismo mundial, el papel competitivo de las ciudades en el mercado global, el rol de los centros históricos, los cambios en la geografía productiva del planeta, las nuevas formas de vida, la disolución de los conceptos de centro-periferia o el papel de la arquitectura deben llevar a una conclusión «optimista» y a redefinir la relación del ciudadano con la ciudad. Para ello, consideró necesario que el entorno se entienda en términos de simultaneidad, yuxtaposición y coexistencia de las cosas: «Debemos aprender a movernos en la ambivalencia de lo uno y lo otro y no en el pensamiento único, dual y excluyente de lo uno o lo otro». 'La ciudad que late en la no-ciudad' fue el título de la conferencia que pronunció en la sede del Observatorio de Medio Ambiente Urbano (OMAU) del Ayuntamiento dentro del ciclo 'La ciudad viva'. Al acto asistieron unas 80 personas, entre ellas el alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, el ex regidor Pedro Aparicio, el concejal de Movilidad, Juan Ramón Casero y el Defensor del Ciudadano de la Diputación, Francisco Gutiérrez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario