La obra del tramo final del metro de Málaga no empezará antes del año 2010 (LA OPINIÓN)

La Junta saca a concurso la elaboración del proyecto de la parte más compleja, que pasa bajo la Alameda y el Parque

MIGUEL FERRARY. MÁLAGA Con una obra tan compleja como el metro de Málaga es difícil hacer una previsión de plazos. Y más complicado es hacer que se cumplan. Hace tres años, la Junta de Andalucía puso una fecha para la inauguración del suburbano: febrero de 2009. Luego dijo que finales de ese año. Sin embargo, parece que la fecha definitiva se aleja todavía más, ya que las obras del tramo más complejo, entre el río Guadalmedina y La Malagueta, no empezarán antes de 2010. A partir de ahí habrá que contar, al menos, otros dos años más de obras hasta que sea operativo ese tramo.
Al menos ya se sabe que empiezan a correr los trámites tras cerca de dos años esperando a dar un movimiento. La Junta de Andalucía sacó ayer a contratación la redacción del proyecto para este tramo, de 1,6 kilómetros de longitud y dos paradas, entre el río Guadalmedina y La Malagueta.
Este paso permite desbloquear un tramo muy complejo técnicamente, ya que hay que resolver el paso del túnel bajo la Alameda y el Parque, zonas con un terreno muy inestable e importantes afecciones a la superficie, tanto en cuanto al tráfico como a las plantas y árboles.
Éste es uno de los tres tramos asumidos por la administración autonómica y retirados de la responsabilidad de la concesionaria Metro Málaga, para reducir el aumento del presupuesto que reclamaba la empresa.
La redacción del proyecto tendrá un plazo de 10 meses, a contar desde la adjudicación del contrato, que se espera que esté resuelta para principios del año próximo. El presupuesto destinado es de 1,5 millones para esta fase.
El diseño de este túnel definirá el trazado definitivo, aunque la tendencia es a que discurra bajo la calzada central de la Alameda. Además, también se tendrá que decidir el método del túnel, que en los anteproyectos originales estaba planteado mediante una tuneladora. Una vez descartada por sus problemas técnicos y alto coste, está por ver cómo se plantean los muros-pantalla y la organización del tráfico en esta arteria, con un tráfico medio diario de 44.000 vehículos.
Las paradas previstas en este tramo se ubicarán en la plaza de la Marina y en el paseo de Reding, aunque su situación definitiva se decidirá en la redacción del proyecto. El traslado de la última parada al paseo de Reding, desde la plaza de Torrijos, es una de las mejoras introducidas por Ferrocarriles Andaluces para optimizar la conexión.