El Defensor del Ciudadano detecta acoso inmobiliario en el caso de las familias de El Palo (Málaga Hoy)

Francisco Gutiérrez se reunió ayer con los vecinos para defender sus intereses
Los casos de acoso inmobiliario parecen reproducirse, de nuevo, en la ciudad. Al último denunciado por una familia en la calle Granada, se une ahora el de trece familias de la barriada de El Palo. Ayer, se reunieron en la sede de la asociación de vecinos con el Defensor del Ciudadano, Francisco Gutiérrez, quien conoció los detalles de sus casos. "Está claro que se trata de otro ejemplo de mobbing porque la constructora que ha comprado el edificio donde viven de alquiler les ha amenazado con que deben abandonar sus casas en un mes", explicó ayer Gutiérrez. Las familias, que en algunos casos llevan más de medio siglo habitando sus pisos, han recibido unas cartas de la empresa en las que les insta a responderles, en el plazo de una semana, para aceptar una indemnización de 3.000 euros por abandonar sus casas, lo que deben hacer en un mes. "Pero ellos tienen contrato de renta antigua y, por tanto, es indefinido, así que no están obligados a irse", puso de manifiesto el Defensor del Ciudadano, que denuncia que sólo un vecino ha firmado su conformidad "porque los responsables de la constructora aprovecharon que pasaba un mal momento personal". Gutiérrez aseguró que hay varios vecinos que estarían dispuestos a marcharse, pero con la condición de que les ofreciesen un piso, como mínimo, con las mismas condiciones de donde ahora residen.