Tras cuatro años de obras, excavaciones y desvíos, Carretera de Cádiz vuelve a recuperar el aspecto de siempre. La concesionaria del Metro de Málaga ha liberado este sábado el último tramo que quedaba en obras en esta vía.
A partir de ahora, con el cierre de la última rampa de extracción de tierras, ubicada en la avenida de Velázquez entre las calles Guindaleta y Vicente Aleixandre, se recobrará la continuidad del tráfico rodado, que se había suspendido temporalmente durante el desarrollo de los trabajos del suburbano.
No obstante, según señalaron desde la Junta de Andalucía, algunas zonas de este eje viario permanecerán en obras hasta el mes de julio. "Concretamente, se va a proceder al arreglo de las vías laterales del entorno de la barriada de El Torcal, actuación que es posible acometer gracias al paso del tráfico rodado por la zona central de la calzada. Estas vías laterales son las que han servicio para desviar el tráfico durante la fase de obras", han destacado en un comunicado.
Una vez concluya el arreglo de las vías laterales, se extenderá la última capa de asfalto a lo largo de toda el viario de la Carretera de Cádiz, deunos tres kilómetros, donde se han ejecutado las obras de la Línea 2 del Metro (Héroe de Sostoa y avenida de Velázquez), lo que le permitirá que esta importante arteria de circulación quede libre y recupere en el transcurso del mes de julio el estado que tenía antes del inicio de las obras.
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