MÁLAGA Un puerto para los malagueños. (SUR)

El Palmeral de las Sorpresas abre al público como un primer paso para la unión con la ciudad.

Una semana después de su inauguración oficial el Palmeral de las Sorpresas se abrió ayer para todos los malagueños, haciendo efectivo el propósito del proyecto de unir al fin el puerto y la ciudad. Decenas de ciudadanos se acercaron ayer con curiosidad a este nuevo espacio para pasear por su avenida principal y descubrir sus secretos. Juegos infantiles con música, plazas de naranjos a distinto nivel, fuentes... y muchas palmeras. Unas 400 para ser exactos.

La expectación no era para menos. «Se ha hecho esperar, pero ha merecido la pena», indicaba el presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Linde, que recordaba las trabas que en casi dos décadas ha tenido que pasar el proyecto para convertirse en una realidad: La crisis económica, problemas del terreno y hasta el picudo rojo que obligó incluso a cambiar la especie de palmeras. «Todo parecía estar en contra», bromeó Linde durante la presentación del recinto. Pero el sueño, que cobró forma en la mente del arquitecto Jerónimo Junquera, se ha convertido en una realidad. «A partir de ahora comienza una nueva etapa para el puerto, que por fin se congracia con la ciudad», señaló. Una unión que, a su juicio, no habría sido posible sin la voluntad política de la Junta de Andalucía.

El alcalde, Francisco de la Torre, destacó que el puerto deja de dar la espalda a la ciudad para convertirse en parte de ella gracias a los dos accesos, desde la plaza de la Marina y la plaza del General Torrijos. Y quiso manifestar que espera que en el futuro se anexione al paseo del Parque con el soterramiento del Paseo de los Curas.

Un regalo

«El Palmeral es un regalo para Málaga», señaló la consejera de Obras Públicas y Vivienda, Josefina Cruz, quien quiso destacar el papel de su predecesora, Concepción Gutiérrez y el trabajo de la delegada del Gobierno y candidata a la Alcaldía por el PSOE, María Gámez. Y también hizo una petición a los malagueños: «Espero que lo disfruten y también que lo cuiden como si fuera su propia casa, porque es un espacio único en Andalucía y tenemos que conservarlo», indicó.

Para Cruz, se trata de un día importante porque se está contribuyendo a la integración del puerto en la ciudad. «El Palmeral va a convertirse en un referente de Málaga y en lo primero que verán los cruceristas», dijo. También se refirió al coste de la obra, de más de 32 millones de euros (un presupuesto más elevado de lo que se esperaba) e hizo un repaso por el equipamiento del Palmeral, que cuenta con edificios para uso cultural y museístico -inicialmente previstos para el Aula del Mar- dos quioscos o bares, que guardarán la estética con la que Junquera ha diseñado el espacio, y sobre todo la pérgola, que es «medio marinera, medio ballena o quilla de barco».

Los ciudadanos compartieron con SUR sus primeras impresiones y así, mientras Adela Jiménez resaltaba los juegos de luces nocturnos, Paloma Chacón confesó que quería acudir el primer día «para ser partícipe de un momento histórico para la ciudad». «Ya era hora de que lo abriesen, es un sitio muy amplio para pasear tranquilamente en pleno Centro», dijo Santos Agrela. Nuria Martín comentó que a los niños les encantan los juegos con sonido; y Carlos Gómez destacó la distribución de los bancos, «mirando a los barcos». De esta forma, los malagueños hicieron suyos ayer todos los rincones de los 33.000 metros cuadrados del Palmeral del puerto.