El edificio está terminado desde enero pero todavía no han concluido las obras de urbanización de su entorno
18.05.2011 -
Los comerciantes exigen que el antiguo mercado sea demolido inmediatamente después del traslado al nuevo. :: ÁLVARO CABRERA
Desde finales del año pasado, los comerciantes del mercado del Carmen se resignan a ver desde fuera los que serán sus nuevos puestos en el edificio construido por el Ayuntamiento junto a la parroquia del Carmen. Hace ya seis meses que este equipamiento comercial para la zona del Perchel está concluido, sin embargo, aún no ha sido inaugurado porque su realización no ha ido acompasada con las obras de urbanización de su entorno, que todavía están en marcha. La mala planificación municipal ha provocado este compás de espera para dar uso al flamante nuevo mercado del Carmen, levantado sobre un aparcamiento municipal para residentes que sí lleva ya un año en funcionamiento.
Rafael Sánchez, presidente de la asociación de comerciantes, denunció que ha existido una «falta de planificación» por parte del equipo de gobierno, ya que «los mismos obreros de la constructora que ha hecho el mercado nuevo nos han dicho que se podría haber urbanizado el entorno al mismo tiempo», comentó. Esa urbanización consiste fundamentalmente en la apertura de una calle semipeatonal de nueva creación entre las de Eslava y La Serna.
Según apuntó Sánchez, hace un mes mantuvieron una reunión con los responsables municipales en la que estos le informaron de que los trabajos durarían unos dos meses, por lo que el traslado de los 88 puestos en funcionamiento al nuevo mercado se efectuará en julio.
Carga y descarga
La demora en la ejecución de la calle ha estado motivada por el cambio de la propiedad de la parcela a la que corresponde la ejecución de ese vial entre La Serna y Eslava. En ella está prevista la construcción de unas doscientas viviendas que fueron asumidas por Unicaja al no poder ser ejecutadas por Baensa, la promotora que era propietaria del cine Astoria.
El presidente de los comerciantes relató que los responsables inmobiliarios de la caja malagueña se negaron a que las plazas de carga y descarga del mercado se ubicaran en el nuevo vial, como estaba previsto, ya que ello le restaría valor de mercado a la finca para una futura venta a una promotora.
Finalmente, el Consistorio aceptó el traslado de esas plazas -casi una decena- a la parte posterior del nuevo mercado, en la esquina con la calle Eslava. De este modo, se desbloqueó el proyecto de urbanización, que ya está en ejecución.
Los comerciantes confían en que no se produzcan más demoras y que para este verano puedan trasladarse a un mercado que ha supuesto una inversión global de unos 12 millones de euros. «Estamos muy contentos con cómo ha quedado, es muy bonito y los puestos son más amplios que los actuales», aseguró Rafael Sánchez, quien recordó que contarán en la primera planta del edificio con una guardería, despachos, una sala de juntas e incluso duchas.
El traslado a las nuevas instalaciones implicará el derribo del actual mercado, lo que permitirá prolongar la calle La Serna hasta Callejones del Perchel. «El alcalde nos ha prometido que el derribo será inmediatamente después de nuestro traslado y esperamos que sea así, porque no queremos que el mercado viejo se convierta en objetivo de 'okupas' y chatarreros», afirmó Sánchez. «Hemos estado rodeados de obras, por un lado las del nuevo mercado y, por otro, las del metro, así que esperamos como agua de mayo poder hacer uso de nuestros nuevos puestos, eso nos dará un tirón comercial», sentenció.
En la primera planta del nuevo edificio también habrá espacio para dependencias municipales de tipo social y ciudadano.
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