Alcaldes axárquicos, hasta del PP, se oponen al «desmantelamiento» de las oficinas territoriales
Ignacio Mena con Juan Ramón Casero en la presentación de la oficina. Arciniega
FRAN EXTREMERA La Diputación de Málaga anunció ayer la apertura de una nueva oficina de Arquitectura y Urbanismo, compuesta por 42 trabajadores y que aúna en un mismo departamento los servicios provinciales de atención municipal, planeamiento y patrimonio. Fue una de las novedades comunicadas por el diputado Ignacio Mena que también se refirió al nuevo organigrama por comarcas, ya trasladado a los regidores de forma interna y a través de mancomunidades y consorcios territoriales.
Este segundo aspecto desató a última hora de la tarde las voces hasta entonces contenidas de muchos regidores de enclaves malagueños como la Axarquía. Hasta los alcaldes del Partido Popular se mostraron sorprendidos por una medida que les alejará aún más de los técnicos que les asesoran en materia urbanística. La mayoría de los consultados por este periódico inciden en que en los últimos años se ha trabajado por mancomunidades o «subcomarcas y que no tiene sentido «desmanterlar lo logrado». Y de poco les sirven las explicaciones de Mena: «Para llevar a cabo nuestras funciones de la mejor manera hemos decidido unir todo lo que estaba disperso. Desde ahora habrá un solo jefe de servicio con un criterio único».
Mayor seguridad jurídica
En pleno debate sobre la actual legislación urbanística y las consecuencias que ha arrastrado en áreas de la provincia precisamente como la Axarquía, con alcaldes en prisión o inmersos en procesos judiciales por otorgar licencias de forma irregular, Mena destacó que la nueva oficina garantizará una mayor «eficacia y control para dar seguridad jurídica a los ayuntamientos».
Más de una docena de alcaldes que se han dirigido por escrito a la Mancomunidad axárquica contra el nuevo mapa que pretende establecer la Diputación en asistencia urbanística coinciden en que como mínimo se debe mantener una oficina en su comarca.
Mena agregó que en la nueva oficina provincial habrá 12 arquitectos, ocho aparejadores, nueve delineantes, dos abogados, dos ingenieros, dos técnicos auxiliares de obras o cinco administrativos.
Este segundo aspecto desató a última hora de la tarde las voces hasta entonces contenidas de muchos regidores de enclaves malagueños como la Axarquía. Hasta los alcaldes del Partido Popular se mostraron sorprendidos por una medida que les alejará aún más de los técnicos que les asesoran en materia urbanística. La mayoría de los consultados por este periódico inciden en que en los últimos años se ha trabajado por mancomunidades o «subcomarcas y que no tiene sentido «desmanterlar lo logrado». Y de poco les sirven las explicaciones de Mena: «Para llevar a cabo nuestras funciones de la mejor manera hemos decidido unir todo lo que estaba disperso. Desde ahora habrá un solo jefe de servicio con un criterio único».
Mayor seguridad jurídica
En pleno debate sobre la actual legislación urbanística y las consecuencias que ha arrastrado en áreas de la provincia precisamente como la Axarquía, con alcaldes en prisión o inmersos en procesos judiciales por otorgar licencias de forma irregular, Mena destacó que la nueva oficina garantizará una mayor «eficacia y control para dar seguridad jurídica a los ayuntamientos».
Más de una docena de alcaldes que se han dirigido por escrito a la Mancomunidad axárquica contra el nuevo mapa que pretende establecer la Diputación en asistencia urbanística coinciden en que como mínimo se debe mantener una oficina en su comarca.
Mena agregó que en la nueva oficina provincial habrá 12 arquitectos, ocho aparejadores, nueve delineantes, dos abogados, dos ingenieros, dos técnicos auxiliares de obras o cinco administrativos.
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