La Junta de Andalucía hizo entrega ayer a los representantes municipales de la documentación que acredita el levantamiento de la suspensión que pesaba sobre la aprobación definitiva de la ordenación del entorno de Repsol y que será publicada en el BOJA. De este modo, el Ayuntamiento de Málaga dispondrá de los 12 millones de euros que había cobrado a cuenta del convenio urbanístico para el desarrollo de este espacio y que no podía dedicar a inversiones hasta que la Junta no levantase la suspensión sobre el planeamiento.
El dinero es sólo una parte de los 82,3 millones acordados en el convenio urbanístico y que debe abonar la caja de ahorros gallega Novacaixagalicia. A cambio, el Ayuntamiento le permite la construcción de más de 1.300 viviendas, de las que unas 400 (algo menos de un tercio) serán VPO. Como detalle, estas viviendas se levantarán en altura, en lo que serán los primeros rascacielos de la ciudad.
Los 70 millones que quedan por abonar se tendrán que pagar en un nuevo calendario de pago que el Ayuntamiento está negociando con la entidad propietaria del suelo.
Este paso aclara el camino a uno de los convenios urbanísticos de la ciudad, que estaba pendiente de este trámite administrativo para echar a andar. A esta buena noticia se le sumó, hace pocos días, el acuerdo alcanzado con Unicaja sobre el convenio de Martiricos y con las conversaciones muy avanzadas sobre la Térmica, que parece que llegará a buen fin.
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