La fábrica perdida y hallada en los archivos (La Opinión)

El Archivo Histórico Provincial conserva más de 500 fotografías de la industria La Metalúrgica

Obreros y directivos de la fábrica en 1930, cuando se realizaron las pruebas de resistencia del nuevo puente de la Aurora.  Archivo Histórico Provincial

Funcionó en el Paseo de los Tilos desde la década de 1910 a los años 50, especializándose en grandes estructuras metálicas y obras para ferrocarriles

ALFONSO VÁZQUEZ Queda mucho por saber de la industria La Metalúrgica S.A. un intento muy serio de superar el colapso a finales del XIX de la actividad siderúrgica en Málaga. La fábrica, que tenía su sede en el Paseo de los Tilos, sigue envuelta en la niebla porque como destaca María Esther Cruces, directora del Archivo Histórico Provincial, apenas hay

documentación sobre ella y ni siquiera en el Archivo Municipal hay constancia del expediente de apertura de la fábrica, «y la empresa de pronto desaparece y nadie sabe nada».

Por suerte, la niebla de la Historia comienza a disiparse algo gracias a la generosidad del catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad de Málaga Cristóbal García Montoro, a quien le llegó documentación de la industria y en concreto ha donado al Archivo Histórico Provincial más de 500 fotos de la fábrica del Paseo de los Tilos. Son 543 fotografías dispuestas en dos gruesos álbumes y algunas instantáneas sueltas. Un tesoro que confirma la importancia que en las grandes obras de Málaga tuvo esta industria, cuyo año de nacimiento también es un misterio, aunque las primeras fotografías están fechadas en 1916 y las últimas en 1953.

«De La Metalúrgica S.A. no se sabe quiénes eran los propietarios porque no encuentro la documentación, los libros la mencionan pero con fechas contradictorias», resume María Esther Cruces, que también señala que su emplazamiento exacto tampoco se conoce, por el baile de números que tuvo a lo largo de los años el Paseo de los Tilos. Sí se sabe que en la década de los años 10 estaba en el número 28 y cuando cierra en los años 50, en el número 68. Los álbumes fotográficos son en realidad dos catálogos comerciales, el primero con obras en marcha de la fábrica y el segundo con productos ya realizados.

Por las fotografías se aprecia una fuerte vinculación a la compañía Ferrocarriles Andaluces, pues muy significativas son sus obras ferroviarias. Una de ellas, la plataforma circular para el cambio de sentido en la estación de tren de Málaga, «cuando los trenes no contaban con dos motores como hoy», explica la directora del archivo, que tiene su sede junto al antiguo convento de la Trinidad. También de las manos de los obreros de La Metalúrgica salió la nave de Ferrocarriles Andaluces que todavía puede verse en la estación y que en años pasados fue el Centro de Exposiciones Sur.

En los catálogos aparecen varios puentes para ferrocarriles de toda Andalucía, así como obras de reparación en el puerto de Melilla fechadas en 1916. «La fotografía comercial está hoy muy asumida pero en 1916 era una novedad», apunta la directora. En Málaga capital todavía quedan huellas de una industria que según los pocos datos que hay de ella, fabricaba estructuras y elementos metálicos relacionados con la construcción: tuberías, zapatas, columnas, cilindros capiteles, así como fundición e iluminación.

En Málaga permanecen todavía algunas huellas de La Metalúrgica, como la artística puerta de hierro forjado del mercado de Salamanca, una auténtica obra de arte y sobre todo, una estructura que a diario cruzan miles de malagueños: el puente de la Aurora, diseñado por el ingeniero Manuel Giménez Lombardo. Precisamente, de las espectaculares pruebas de resistencia de este puente, en 1930, el año de su finalización, dan buena cuenta los catálogos.

Para probar que el puente estaba hecho en condiciones se llenó primero de sacos de arena, como puede verse en una de las fotos, y a continuación se hizo una prueba en movimiento, con la llegada de tres filas de vehículos: camiones, tanques y apisonadoras. El puente, llamado de Alfonso XII pero conocido como el de la Aurora, pasó el examen, aunque todo hay que decirlo, La Metalúrgica se tomó su tiempo, ya que el encargo le fue adjudicado en 1925 y tres años más tarde no habían empezado las obras. Uno de los documentos incluidos y que el archivo deberá restaurar es un bonito plano de la fábrica en papel azul.

Las instalaciones de La Metalúrgica S.A. tenían una extensión de 8.600 metros cuadrados y contaba con salas para la fundición, calderería, ajuste, un patio central, oficinas y almacenes. Las últimas fotos, de los años 50, muestran a obreros trabajando en la fundición de cobre. Entre las muchas obras de esta industria también había anclas para barcos y campanas para los tronos de la Semana Santa.