miércoles, 10 de septiembre de 2014

Una acera acristalada para reducir el ruido en el túnel de la Alcazaba (Málaga Hoy)

El Ayuntamiento analiza esta propuesta para mejorar el tránsito de los peatones por este paso, donde el estruendo es evidente
S. SÁNCHEZ MÁLAGA | ACTUALIZADO 10.09.2014 - 01:00
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Interior del túnel de la Alcazaba.

Poner fin al estruendo que mana a diario del túnel de la Alcazaba se convierte en asunto de interés para el Ayuntamiento de la ciudad. Tanto es así que la determinación para dar solución a los problemas de insonorización existentes en este paso, cuya construcción se remonta a hace tres lustros, forma parte del análisis y debate de la denominada Mesa de Trabajo de Grandes Proyectos Urbanos, cuyos integrantes cuentan en sus manos desde hace algunos meses con un documento de sugerencias elaborado por el ex técnico de la Gerencia de Urbanismo Manuel Olmedo. 

De acuerdo con la información recibida por este periódico, se trata del único informe existente hasta el momento sobre este asunto. En el mismo, el experto, directamente vinculado con la construcción original del paso soterrado, subraya la necesidad de poner coto al ruido que los peatones han de soportar al cruzar por el mismo, tarea que "en su momento no fue posible realizar y que hoy es una necesidad muy demandada". 

Para actuar en esta línea, se plantea la ampliación de la acera más próxima a Gibralfaro, que pasaría a absorber el carril de tráfico contiguo, de manera que el espacio peatonal pasaría a disponer de 4,78 metros de ancho. A juicio de Olmedo, dada la actual intensidad de tráfico que soporta este eje, la supresión de uno de los viales no debería suponer un gran inconveniente. 

Una vez ensanchado el espacio de paso de peatones, parte del cual quedaría reservado a su vez para la construcción de un carril bici, la pretensión es que el mismo quede aislado del resto de la calzada mediante una gran mampara. "El aislamiento se conseguiría con amplios ventanales acristalados de 2,4 metros por 1,8 metros, con doble vidrio de seguridad y cámara de aire, montados sobre un murete de ladrillo macizo de un metro de alto, y enmarcados en una ligera estructura de perfiles metálicos, cerrando hasta la bóveda en la forma ojival con paneles ligeros fonoabsorbentes. 

El vidrio a emplear sería semejante al ya instalado en la pirámide instalada en la calle Alcazabillas. De acuerdo con las sugerencias del experto, la realización de este proyecto, que podría necesitar de unos 200.000 euros de inversión y plazo corto de tiempo, permitiría prolongar hasta la Plaza de la Merced y la calle Victoria el carril bici que hoy termina delante del Rectorado. 

El tema del túnel de la Alcazaba es uno de los dos que, de acuerdo con el orden del día, será objeto de debate en el seno de la Mesa de Trabajo de Grandes Proyectos Urbanos de hoy. El otro asunto de interés está relacionado con la mejora de la movilidad en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA), cuestión que se mantiene como una de las principales asignaturas pendientes de la tecnópolis. Aunque en la reunión de hoy se incide en la problemática, el anterior cónclave, que tuvo lugar el 30 de junio pasado, ya abordó este mismo esquema. 

Sobre la cuestión del túnel, el portavoz de IU en la Casona del Parque, Eduardo Zorrilla, consideró "interesante" la apertura de un debate sobre ello. "No nos explicamos que llevando tantos años el túnel en funcionamiento y siendo incómodo el ruido en el interior, no se haya puesto alguna medida antes", comentó. En relación con las sugerencias planteadas, las tildó de "muy interesantes" y defendió tenerlas valoró que incidan en la reordenación del tráfico y la inclusión del carril bici. 

Más allá de la insonorización del túnel, Olmedo Checa aprovecha la cuestión para poner sobre la mesa varias líneas de acción. Entre ellas, el cambio de ordenación del tráfico de la calle Victoria, con el fin de dejar esta vía con un único sentido de circulación, y la recuperación del proyecto del funicular a Gibralfaro, proyecto retomado a principios de mandato por el equipo de gobierno del PP pero enterrado nuevamente por la ausencia de actores privados interesados en su desarrollo. 

Sobre el primero de los puntos, Olmedo cree conveniente dejar Victoria como una calle sólo de sentido descendente, sin que ello supusiese la pérdida de plazas de aparcamiento en superficie en esta vía. El efecto se dejaría notar sobre calles aledañas, caso de Cruz Vede, Altozano o Laguinillas, que pasarían a absorber parte del tráfico afectado por la limitación de paso. Asimismo, añade que una intervención de esta naturaleza se dejaría sentir positivamente en la recuperación de los antiguos cines Astoria y Andalucía. 

Y en cuanto al funicular, insiste Olmedo en la necesidad de plantear al Consistorio que retome la iniciativa, que, a su juicio, supondría "una respetuosa y eficaz solución al más grave problema que hoy tiene el parque de Gibralfaro". A mediados de 2011, el equipo de gobierno del PP puso las bases para la construcción del funicular. Para ello, con una inversión estimada en 18 millones de euros y una previsión de 500.000 usuarios diarios, buscó en el sector privado una empresa que se interesase por su explotación comercial a cambio de su ejecución. El intento quedó en aguas de borrajas.

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