Los campos de golf en proyecto suman más de 40.000 viviendas (La Opinión)

Más de 25 instalaciones en tramitación, pendientes de aprobación en los planes de ordenación urbana o en construcción incluyen además hoteles y zonas comerciales. Hay una inversión prevista de 4.000 millones de euros
Los proyectos de campos de golf que están pendientes o incluso en construcción en la provincia de Málaga suman más de 40.000 viviendas en sus previsiones a corto y medio plazo. Esta oferta turística, la principal cualitativa y cuantitativamente por los altos ingresos que genera, requiere no obstante de inversiones multimillonarias que necesitan una amortización segura. Y por ahora la mejor manera de obtener rentabilidad es añadir al verde de los campos casas, hoteles y zonas comerciales: la mayoría de las mencionadas 40.000 viviendas que hay en proyecto o en desarrollo verán la luz, pues su tramitación es anterior a la regulación que prepara la Junta de Andalucía.Este modelo de amortización de las inversiones podría cambiar cuando el Ejecutivo regional apruebe en otoño el decreto de regulación de los campos de golf, que endurecerá las condiciones y establecer una separación radical del binomio formado hoy por el golf y las promociones inmobiliarias. Problemas como la sostenibilidad ambiental y la falta endémica de agua en la Costa del Sol -muchos de los proyectos están en el interior de la provincia- se convertirán en los principales jueces de la Administración autonómica a la hora de adjudicar licencias de construcción.Las empresas que llevan a cabo estas iniciativas son siempre promotoras inmobiliarias, ya sea en solitario o aliadas con otros grupos más orientados a la parte exclusivamente deportiva. De hecho, y a la espera de que el decreto de golf entre en vigor, hay ya bastantes proyectos `parados´. Las inversiones no son pequeñas y hay empresas que prefieren mantener sus iniciativas empresariales en cartera hasta conocer si la construcción anexa a los campos se va a permitir o no. Lo cierto es que no va a haber un corte radical, pero tampoco se van a expedir licencias como hasta ahora: la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA) y los planes subregionales, a los que se tienen que adaptar todos los nuevos documentos municipales de ordenación urbana, van a marcar qué zonas pueden soportar a la edificación y cuáles no. Así, la construcción de un campo de golf ya no tendrá necesariamente que ir acompañada de viviendas; en algunos casos se permitirán más, en otros menos y en otros, nada. Los hoteles serán mejor vistos que los chalés por la Junta de Andalucía.Inversiones. De los más de 25 proyectos que según la Asociación de Empresas de Turismo Residencial, Deportivo y de Salud de Andalucía (Promotur) hay en proceso en la Costa del Sol, todos incluyen viviendas y sólo tres contemplan la construcción de más de un campo de golf de 18 hoyos: tres campos en dos casos y dos campos en el caso restante. También todos plantean hoteles y zonas comerciales y algunos más, atractivos añadidos como clínicas geriátricas, centros médicos, colegios internacionales y hasta clubes hípicos.Todas las viviendas, campos y otras ofertas complementarias de los proyectos mencionados y controlados por Promotur suman una inversión global de más de 4.000 millones de euros. Cuando se concluyan -hay algunos pendientes de aprobación en los planes generales de ordenación urbana (PGOU) que podrían no fructificar, según las directrices generales de la LOUA- se habrá duplicado el número de campos de golf que había en la provincia de Málaga en 2005, ya que entonces la cifra ascendía a 43 clubes; en la actualidad estamos en 60, y con los pendientes se superarán los 80. Y todos con promociones inmobiliarias anexas.La intención de la Junta de Andalucía es cambiar la concepción que se tiene de los campos de golf como mera excusa para construir. En muchos casos ha sido así y los ejemplos abundan a lo largo y ancho de la Costa del Sol.