sábado, 2 de febrero de 2008

La batalla de las VPO (SUR)


PP, PSOE e IU llevan al pleno su enfrentamiento por la construcción de viviendas de protección oficial en Málaga. Acusaciones mutuas de incumplir los compromisos. Mientras, unos 20.000 malagueños aguardan una de estas casas

JUAN José Martínez Zato no pudo ir anoche a ver el Unicaja frente al Efes Pilsen. El concejal socialista y fiscal jubilado se había sacado un abono para la Euroliga de baloncesto, pero los suyos, los otros y los de enfrente se lo impidieron. El pleno estaba convocado a las diez de la mañana, comenzó pasadas las once, se interrumpió cerca de las tres de la tarde para el almuerzo, se reanudó a las cuatro y... a las nueve de la noche ¿iban todavía por el punto 40! (quedaban por debatir diez).El debate sobre las viviendas de protección oficial copó una gran parte de ese tiempo. La batalla electoral del 9-M se ha anticipado en el pleno municipal de Málaga. PP, PSOE e IU llevaron al noble salón un enfrentamiento carente de nobleza.El concejal de Urbanismo, Manuel Díaz, presentó una moción por trámite de urgencia para exigir a la Junta que desbloquee más de 5.000 VPO que, en su opinión, tiene «frenadas» en la ciudad. Se pasó de tiempo dando datos para demostrar sus afirmaciones. Pedía en el texto que el pleno instara al presidente de la Junta, Manuel Chaves, a «que levante inmediatamente los dictámenes» que frenan la construcción de esos pisos protegidos.
Barbaridad jurídica
Pero, claro, de esa expresión literal se percató con rapidez el portavoz de IU, Pedro Moreno Brenes -es profesor de Derecho en la Universidad- para advertir de esa barbaridad jurídica. «No se pueden levantar los dictámenes que emiten los técnicos». Es como pedirle al político que se salte los trámites administrativos a la torera. Y dijo que si el PP pensaba que estaban retrasando dolosamente los expedientes acudiera a los tribunales.El viceportavoz del PSOE, Enrique Salvo Tierra, instó al PP a revisar cada caso para determinar la culpabilidad del retraso. El rifirrafe fue largo y tenso, porque el alcalde, Francisco de la Torre, apeló a una conversación privada del edil socialista con el jefe de gabinete de Alcaldía, Javier Ferrer, lo que la portavoz del PSOE, Marisa Bustinduy, aprovechó para llamar desleal al regidor. Salvo Tierra exigió la inmediata comparecencia en el pleno de Ferrer, que el alcalde rechazó por encontrarse fuera del Ayuntamiento realizando un curso.De la Torre rectificó el texto de la moción original, tras la advertencia de Moreno Brenes, y donde ponía «levantar los dictámenes» se cambió «por evitar la paralización» de los trámites para la construcción de viviendas protegidas. Ni aún así concitó el apoyo de IU, ya que el PSOE estaba claro que votaba en contra. Manuel Díaz añadió un dato cuanto menos ilustrativo: el gobierno andaluz ha construido 36 VPO en Trinidad Perchel, mientras que el equipo de gobierno ha promovido en la última legislatura más de 4.800. Aún así, unos 20.000 malagueños esperan que las instituciones se pongan de acuerdo y puedan acceder a una de estas viviendas. Que la batalla sea para la cancha.

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