La provincia es la primera de España, por delante de Vizcaya y Ceuta · Los malagueños de 18 a 34 años deberían ganar un 178% más para pagar la hipoteca con desahogo
Las opciones reales de que un joven o una pareja accedan a la compra de una vivienda en la provincia de Málaga son cada vez menores. El escenario que dibuja el último informe del Observatorio Joven de Vivienda en España (Objovi), relativo al último trimestre de 2007, constata un agrandamiento sustancial en la brecha existente entre las condiciones económicas que tiene este grupo de población y las posibilidades de adquisición de un piso. Muestra de ello es que, según las conclusiones del citado trabajo, Málaga es el territorio en el que un hogar joven se ve obligado a destinar más dinero a este objetivo, con el 58% de sus ingresos, mientras que la media nacional se sitúa en el 43,6%. El porcentaje de la provincia, que crece respecto al registrado en el primer trimestre de 2007, cuando era del 56,2%, se sitúa por encima de los de espacios como Vizcaya, Ceuta, Guipúzcoa, Baleares, Barcelona y Santa Cruz de Tenerife. La explicación que se ofrece desde el Objovi es que, si bien el crecimiento de los precios residenciales ha ido decayendo en este periodo, los tipos de interés han tenido una tendencia alcista.La negativa posición de Málaga en lo que al acceso de los jóvenes a la vivienda se refiere no se limita a las dificultades de los hogares jóvenes, sino también a los casos individuales. Cada joven, de acuerdo con el informe, se ve obligado a destinar un 83,4% de sus ingresos para poder comprar un piso, con un precio medio de 229.290 euros. Esta realidad está a mucha distancia del resto de territorios andaluces, ya que el siguiente en la lista es Cádiz, con un 69,3%; Córdoba, con el 66,5%; y Sevilla, con el 63,1%. Dadas estas condiciones, y siempre que no se produzcan variaciones sustanciales en los tipos de interés y los precios de la vivienda, el único modo para que los jóvenes malagueños alcancen el sueño de acceder a una casa pasa por cobrar más. ¿Y cuánto? Según el informe el sueldo mensual debería ascender a 3.500 euros, lo que se traduce en unos 42.300 euros brutos anuales. O lo que es lo mismo, deberían percibir un 178% más de lo que reciben en estos momentos en concepto de salario. Con estas aportaciones podrían sobrellevar el coste de una hipoteca y destinar al pago de la misma un 30% de sus ingresos.Mirar a otras provincias andaluzas permite insistir en la problemática a la que se enfrentan los jóvenes malagueños. Tras ellos, los que más deberían incrementar sus sueldos para normalizar la situación serían los gaditanos, con un 131%, alcanzando los 2.842 euros; los cordobeses, con un 121,7%, con 2.389 euros, y los sevillanos, con un 110,3% y 2.641 euros. En el otro extremo, están los jienenses, que únicamente necesitarían de un incremento del 57,07%, con un sueldo mensual de 1.672 euros.Dinámica similar es la que se vive en los hogares jóvenes que, en Málaga, deberían percibir un 93,28 % más de lo que cobran para no padecer niveles de endeudamiento excesivos.La radiografía que se extrae del estudio del Objovi es preocupante. Y en especial para los más jóvenes, de entre 18 y 24 años, cuya capacidad económica es inferior y que se topan con las mayores dificultades para la compra de un piso. Estas trabas, que en general impiden a muchos emanciparse, les obligan, además, a optar por productos residenciales cada vez más pequeños. A nivel andaluz, la superficie máxima que podría asumir uno de estos jóvenes sería de 34,6 metros cuadrados, espacio que crece hasta los 43,4 metros en el caso de los de entre 25 y 29 años y a los 53,3 metros para los que tienen entre 30 y 34 años, que suelen disponer de mayores ingresos.
Las opciones reales de que un joven o una pareja accedan a la compra de una vivienda en la provincia de Málaga son cada vez menores. El escenario que dibuja el último informe del Observatorio Joven de Vivienda en España (Objovi), relativo al último trimestre de 2007, constata un agrandamiento sustancial en la brecha existente entre las condiciones económicas que tiene este grupo de población y las posibilidades de adquisición de un piso. Muestra de ello es que, según las conclusiones del citado trabajo, Málaga es el territorio en el que un hogar joven se ve obligado a destinar más dinero a este objetivo, con el 58% de sus ingresos, mientras que la media nacional se sitúa en el 43,6%. El porcentaje de la provincia, que crece respecto al registrado en el primer trimestre de 2007, cuando era del 56,2%, se sitúa por encima de los de espacios como Vizcaya, Ceuta, Guipúzcoa, Baleares, Barcelona y Santa Cruz de Tenerife. La explicación que se ofrece desde el Objovi es que, si bien el crecimiento de los precios residenciales ha ido decayendo en este periodo, los tipos de interés han tenido una tendencia alcista.La negativa posición de Málaga en lo que al acceso de los jóvenes a la vivienda se refiere no se limita a las dificultades de los hogares jóvenes, sino también a los casos individuales. Cada joven, de acuerdo con el informe, se ve obligado a destinar un 83,4% de sus ingresos para poder comprar un piso, con un precio medio de 229.290 euros. Esta realidad está a mucha distancia del resto de territorios andaluces, ya que el siguiente en la lista es Cádiz, con un 69,3%; Córdoba, con el 66,5%; y Sevilla, con el 63,1%. Dadas estas condiciones, y siempre que no se produzcan variaciones sustanciales en los tipos de interés y los precios de la vivienda, el único modo para que los jóvenes malagueños alcancen el sueño de acceder a una casa pasa por cobrar más. ¿Y cuánto? Según el informe el sueldo mensual debería ascender a 3.500 euros, lo que se traduce en unos 42.300 euros brutos anuales. O lo que es lo mismo, deberían percibir un 178% más de lo que reciben en estos momentos en concepto de salario. Con estas aportaciones podrían sobrellevar el coste de una hipoteca y destinar al pago de la misma un 30% de sus ingresos.Mirar a otras provincias andaluzas permite insistir en la problemática a la que se enfrentan los jóvenes malagueños. Tras ellos, los que más deberían incrementar sus sueldos para normalizar la situación serían los gaditanos, con un 131%, alcanzando los 2.842 euros; los cordobeses, con un 121,7%, con 2.389 euros, y los sevillanos, con un 110,3% y 2.641 euros. En el otro extremo, están los jienenses, que únicamente necesitarían de un incremento del 57,07%, con un sueldo mensual de 1.672 euros.Dinámica similar es la que se vive en los hogares jóvenes que, en Málaga, deberían percibir un 93,28 % más de lo que cobran para no padecer niveles de endeudamiento excesivos.La radiografía que se extrae del estudio del Objovi es preocupante. Y en especial para los más jóvenes, de entre 18 y 24 años, cuya capacidad económica es inferior y que se topan con las mayores dificultades para la compra de un piso. Estas trabas, que en general impiden a muchos emanciparse, les obligan, además, a optar por productos residenciales cada vez más pequeños. A nivel andaluz, la superficie máxima que podría asumir uno de estos jóvenes sería de 34,6 metros cuadrados, espacio que crece hasta los 43,4 metros en el caso de los de entre 25 y 29 años y a los 53,3 metros para los que tienen entre 30 y 34 años, que suelen disponer de mayores ingresos.
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