Málaga, que en 2005 acaparó el 40% del negocio en el país, cerrará el año con sólo el 8,5% de las operaciones
JOSÉ VICENTE RODRÍGUEZ. MÁLAGA La inversión de ciudadanos extranjeros en la compra de viviendas en Málaga y la Costa del Sol con uso vacacional se ha desplomado en este 2008, en consonancia con la tremenda caída de ventas sufrida este ejercicio por el sector inmobiliario. Según los datos aportados a este periódico por la Asociación de Constructores y Promotores de Málaga (ACP), el primer semestre del año se ha saldado con la venta de 1.100 viviendas por un importe total de 243 millones de euros, lo que supone el 8,5% del volumen de negocio que se mueve en España.
Estas cifras, que son facilitadas por el Banco de España, palidecen con las que la provincia registraba en 2005, en pleno auge ´boom´ residencial, cuando las ventas a final de año alcanzaron los 12.400 inmuebles, con una inversión global de 2.215 millones. Ese año Málaga acaparó el 40% del negocio español en turismo residencial, que rozó los 5.500 millones.
El espectacular porcentaje ha ido descendiendo desde entonces, a la par que se enfriaba el número de operaciones de compra realizadas por ciudadanos extranjeros. De esta forma, el año 2006 presentó para Málaga unos números de 5.500 viviendas vendidas por valor de 985 millones, lo que supuso el 20% del total nacional. Ya en 2007, el negocio redujo su peso en el conjunto nacional al 12%, con 3.000 viviendas adquiridas para usos turísticos residenciales por un importe de 672 millones.
La ACP constata que la caída del negocio ha sido de casi un 50% anual y que la proyección para cierre de este año 2008 (unas 2.000 viviendas y menos 500 millones de inversión) supondrá un nuevo recorte, si bien de menor cuantía.
En todo caso, fuentes de este colectivo mostraron su preocupación ante la situación que vive el sector, y criticaron sobre todo el clima de parón urbanístico que sigue viviendo Andalucía, con la casi totalidad de los planes urbanísticos (PGOU) aún en fase de revisión. Los constructores y promotores malagueños han señalado que, en esta tesitura, la previsión para 2009 es que se duplique la destrucción mensual de empleo en el sector. Si actualmente el paro viene subiendo en la construcción a raíz de 1.000 trabajadores al mes (y hay ya cerca de 30.000), el aumento será de 2.000 desempleados más por mes en el nuevo año.
JOSÉ VICENTE RODRÍGUEZ. MÁLAGA La inversión de ciudadanos extranjeros en la compra de viviendas en Málaga y la Costa del Sol con uso vacacional se ha desplomado en este 2008, en consonancia con la tremenda caída de ventas sufrida este ejercicio por el sector inmobiliario. Según los datos aportados a este periódico por la Asociación de Constructores y Promotores de Málaga (ACP), el primer semestre del año se ha saldado con la venta de 1.100 viviendas por un importe total de 243 millones de euros, lo que supone el 8,5% del volumen de negocio que se mueve en España.
Estas cifras, que son facilitadas por el Banco de España, palidecen con las que la provincia registraba en 2005, en pleno auge ´boom´ residencial, cuando las ventas a final de año alcanzaron los 12.400 inmuebles, con una inversión global de 2.215 millones. Ese año Málaga acaparó el 40% del negocio español en turismo residencial, que rozó los 5.500 millones.
El espectacular porcentaje ha ido descendiendo desde entonces, a la par que se enfriaba el número de operaciones de compra realizadas por ciudadanos extranjeros. De esta forma, el año 2006 presentó para Málaga unos números de 5.500 viviendas vendidas por valor de 985 millones, lo que supuso el 20% del total nacional. Ya en 2007, el negocio redujo su peso en el conjunto nacional al 12%, con 3.000 viviendas adquiridas para usos turísticos residenciales por un importe de 672 millones.
La ACP constata que la caída del negocio ha sido de casi un 50% anual y que la proyección para cierre de este año 2008 (unas 2.000 viviendas y menos 500 millones de inversión) supondrá un nuevo recorte, si bien de menor cuantía.
En todo caso, fuentes de este colectivo mostraron su preocupación ante la situación que vive el sector, y criticaron sobre todo el clima de parón urbanístico que sigue viviendo Andalucía, con la casi totalidad de los planes urbanísticos (PGOU) aún en fase de revisión. Los constructores y promotores malagueños han señalado que, en esta tesitura, la previsión para 2009 es que se duplique la destrucción mensual de empleo en el sector. Si actualmente el paro viene subiendo en la construcción a raíz de 1.000 trabajadores al mes (y hay ya cerca de 30.000), el aumento será de 2.000 desempleados más por mes en el nuevo año.
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