Antequera inaugura su Parador de cuatro estrellas tras una inversión de 9 millones. (La Opinión)

Casi nueve millones de euros y un periodo de obras de poco más de trece meses han permitido transformar el obsoleto Parador de Antequera en un complejo turístico de "alto nivel", que de tres estrellas ha pasado a alcanzar las cuatro, un "reto de calidad" planteado por el grupo para todos los establecimientos con los que cuenta en el territorio nacional.

Así lo destacó ayer el presidente de Paradores de Turismo, Miguel Martínez, quien asistió a Antequera para presidir a la inauguración oficial de este hotel, definido como uno de los más antiguos de los 93 que la empresa pública tiene en toda España.

"Además, ésta se podría catalogar como la primera inauguración del complejo, a pesar de que lleva en funcionamiento desde 1940. Y es que en esa fecha se puso en marcha, pero no se inauguró. Hoy tenemos el placer de inaugurarlo, y con un sello de calidad añadido", resaltó el presidente de Paradores de Turismo, Miguel Martínez.

La inversión de casi nueve millones de euros ha permitido renovar todas las instalaciones del centro, que cuenta ahora con cuatro nuevas suites con terraza, que elevan el número de habitaciones hasta las 58.

De cara a competir "mejor" en el sector de la celebración de banquetes y reuniones de empresa, se ha construido una nueva planta dotada de cuatro salas modulables con capacidad para 500 personas. "El sector del turismo de congresos es una nueva parcela en la que estamos incidiendo con fuerza y cuyo tren no queremos dejar escapar", continúo el presidente, quien acudió a la inauguración acompañado por el alcalde de Antequera, Ricardo Millán, y el responsable del parador de la ciudad del Torcal, Eduardo Oriola.

Los cambios se han realizado también pensando en el turismo familiar. Para ello se han comunicado buena parte de las habitaciones para poder alojar con "facilidad" a grupos familiares. Además, se ha creado un parque infantil, y se ha ampliado la zona de piscinas, habilitando un espacio para niños.

Estéticamente el parador también se ha transformado. "Quizá sea lo más llamativo. Su ´piel´ exterior ha sido renovada para darle un aire más elegante y moderno. También se han ampliado las plazas de parking y el restaurante cuenta con inmejorables vistas a la vega antequerana", concluyó el responsable de Paradores.