domingo, 14 de febrero de 2010

MÁLAGA Félix Sáenz se renueva por dentro. (SUR)

El proyecto recuperará el nivel original de las plantas del inmueble, que retomará el uso para el fue diseñado a finales del siglo XIX. El emblemático edificio comercial afronta un año y medio de obras para albergar pisos de lujo.

Las obras del edificio de Félix Sáenz se encuentran en una etapa en la que impresionan a cuantos pasean junto a este emblemático inmueble del casco antiguo. La construcción se encuentra totalmente vacía por dentro y los obreros se afanan estos días en crear el forjado de lo que será el aparcamiento subterráneo que utilizarán los inquilinos del medio centenar de pisos de lujo que albergará en año y medio, cuando está previsto que finalicen los trabajos. Basta asomarse un poco por la enorme puerta habilitada para las hormigoneras en la esquina que da al mercado de Atarazanas para comprobar la inmensidad de esta singular pieza de la arquitectura malagueña de finales del siglo XIX.
La hermosa y gigante manzana, que en las últimas décadas del siglo XX fue punto de encuentro de miles de malagueños por albergar uno de los almacenes comerciales autóctonos más importantes, es el resultado de la unión de tres proyectos arquitectónicos que terminaron por configurar un solo volumen a raíz de las sucesivas ampliaciones del espacio comercial de las conocidas galerías que le dieron nombre. Una de las partes la diseñó el arquitecto Jerónimo Cuervo -autor del Teatro Cervantes y de las Casas de Campos de la plaza de la Merced- en el año 1888, y el resto corresponden a Guerrero Strachan y Rivera Vera, entre los años 1911 y 1914. Este último realizó un edificio de la calle Echegaray que presenta características similares.
El edificio de Félix Sáenz, situado entre las calles Sagasta, Moreno Carbonero, Sebastián Souvirón y la plaza de Félix Sáenz, corresponde a un estilo modernista mediterráneo con elementos neobarrocos. En su fachada destacan el uso de cúpulas, relieves figurativos, cartelas, guirnaldas, motivos florales y el predominio de la línea curva, unos rasgos que, según la catedrática Rosario Camacho, no abundan en el resto de edificios modernistas de la ciudad, que suelen ser de un corte más geométrico.
A principios del siglo XX, el eclecticismo estaba presente en la arquitectura, mezclando elementos de distintas tendencias. Félix Sáenz es el ejemplo de que el modernismo tuvo una importante aceptación en las clases burguesas de la Málaga de finales del XIX y principios del XX, algo propio del optimismo y la alegría que proporcionaba el modelo capitalista.
Modificaciones
La construcción ha experimentado a lo largo de los años diferentes modificaciones, sobre todo en su interior, para adaptarla al uso comercial. Las últimas se produjeron en los años ochenta, cuando se le añadió un piso y un nuevo ático. El proyecto para devolver el primitivo uso residencial al edificio ha sido realizado por el estudio de arquitectura de José Seguí, por encargo de la empresa Promociones Ícaro, sociedad que ha asumido la gestión del proyecto tras las dificultades financieras de Restaura.
José Seguí destacó que la intervención en el inmueble va a procurar devolverle su aspecto original y ponerlo en valor, no sólo por fuera, sino también por dentro. «Vamos a colocar las plantas a la altura que tenían inicialmente, ya que se encontraban a un nivel que no les corresponde», explicó este arquitecto, quien destacó que una de las operaciones más complicadas de las obras ha sido la instalación de los andamios para que las fachadas se mantengan en pie.
Gracias estos andamios pudieron realizarse las excavaciones arqueológicas en el interior del edificio. Estas prospecciones permitieron hallar restos de una alhóndiga de época musulmana datada en el siglo X, la más antigua que se conoce, construida extramuros, en lo que entonces era playa. Además, se encontraron 140 esqueletos, confirmándose que en el lugar también se situó una de las primeras necrópolis islámicas de Málaga conocidas.
Seguí informó de que, finalmente, la aparición de estos restos no ha variado sustancialmente el proyecto, que se ha retomado en las últimas semanas con el horizonte de junio de 2011 como fecha de finalización. La empresa que lo promueve va a invertir unos diez millones de euros en la realización de las obras, que habilitarán dos plantas de locales comerciales en baja y primera, 52 viviendas en las plantas segunda a quinta y dos sótanos de 'parking'.


No hay comentarios:

Publicar un comentario