El calendario que se había marcado el Ayuntamiento para dar una nueva aprobación este mes al documento del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), una vez adaptado a las exigencias de la Junta de Andalucía, se encuentra en el aire. Como ayer adelantó este periódico, ambas administraciones han retomado el diálogo para ver si se alcanza un consenso sobre el documento, para el que el equipo de gobierno municipal ha planteado un último cambio motivado por la inclusión de los terrenos de Arraijanal como una parcela a obtener por el reparto de derechos urbanísticos del propio PGOU. La propuesta municipal consiste en que, al mismo tiempo, sea la Administración regional la que se haga cargo de adquirir los suelos para el parque metropolitano que ella misma traza junto al cauce del río Guadalhorce, y para el proyecto de encauzamiento del río Campanillas, que también redactó en 2008.
La negociación sobre todas estas cuestiones todavía no ha culminado y, por ello, no está claro cuál va a ser el calendario de aprobación del plan. En principio, estaba previsto que fuera debatido por una comisión informativa de Movilidad y Urbanismo a principios de la semana próxima y aprobado por un pleno extraordinario el día 16. Sin embargo, todo va a depender de la evolución de las conversaciones entre el Ayuntamiento y la Junta, ya que se pretende dar luz verde a un plan consensuado. La capacidad de acuerdo entre ambas partes determinará qué va a suceder.
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