lunes, 9 de agosto de 2010

Una estación de Justicia (SUR)

El metro da forma a la primera parada subterránea de la línea 1Las obras de las naves de los talleres de mantenimiento y las cocheras están muy avanzadas y en breve se montarán las vías
09.08.2010 -
IGNACIO LILLO ilillo@diariosur.es
MÁLAGA.
La línea 1 del metro avanza como un topo desde Teatinos, donde se sumerge tras discurrir en superficie por el campus universitario, en busca del centro. El primer hito aparece a pocos metros de la rampa de extracción de materiales, donde ya se dibuja el vestíbulo de la futura estación Ciudad de la Justicia. Se trata de una de las más importantes del proyecto, tanto por su capacidad operativa como por sus dimensiones.
De hecho, será una de las pocas paradas que estarán equipadas con una tercera vía, dada la gran afluencia que se espera en una sede administrativa que congrega cada día a miles de usuarios y personal de la Administración de Justicia, como explica el director de la Oficina del Metro, Enrique Salvo: «Existen sólo dos estaciones con vías laterales y ésta es una de ellas. Podrá contar con una unidad de apoyo, que en hora punta se utilizará para reforzar el servicio y paliar posibles incidencias». Al tiempo, destaca la elevada población residente en Teatinos que tendrá su referente en esta estación, «lo que da lugar a un flujo constante de viajeros y no sólo en las horas punta». Por ello, el vestíbulo será más ancho que el resto, y tendrá una doble boca de acceso.

Túnel lanzado
Hasta el momento ya se han excavado unos 300 metros de túnel en una primera fase (el nivel superior de los dos existentes) en el bulevar Louis Pasteur, entre las avenidas Doctor Manuel Domínguez y Gregorio Prieto. Los trabajos se llevan a cabo en paralelo en múltiples frentes: mientras en el extremo de la mina avanza la excavación, por detrás se prepara la estructura del segundo nivel con micropilotes, se limpian las pantallas y se acomete la losa. A su vez, en superficie se acomete la reposición del viario y las aceras, donde se está instalando un carril bici a petición del Ayuntamiento de la capital.

Aún quedan otros 300 metros para llegar hasta la calle Frank Capra, donde tras el verano arrancará una de las fases más complejas de la obra, el paso bajo la Ronda Oeste, que se acometerá mediante un túnel en mina, con tres niveles de excavación a una profundidad de unos 17 metros.

Otro de los enclaves donde el avance es más notorio es el dedicado a los talleres, las cocheras y el puesto central de control, en Los Asperones. Según pudo comprobar este periódico la pasada semana, el túnel de lavado, la nave dedicada a estacionamientos y la de mantenimiento de los convoyes -con seis líneas de trabajo- están muy avanzadas. En esta última, construida con módulos prefabricados y con una superficie de 1.500 metros cuadrados, se aprovecha la luz natural mediante vanos abiertos en la cubierta y en las fachadas. Estará equipado con tornos de foso, para la reparación de las ruedas y rodales, y puentes grúa. Junto a este edificio, otro de menor tamaño alberga la isla ecológica, donde se recogerán los materiales de desecho para su reciclaje. Mientras, las cocheras ocuparán otros 900 metros cuadrados.

Puesto de mando
El puesto central de control, que comparte sede con las oficinas de la empresa concesionaria, Metro Málaga, permitirá coordinar a distancia toda la explotación y servicio de la red de metro. Desde una sala de pantallas se podrá seguir la evolución de todo el servicio y activar o desactivar elementos tales como puertas, ascensores, escaleras mecánicas, iluminación, etc.

En la segunda quincena de agosto se producirá un nuevo avance en estas instalaciones, que son indispensables para poner en marcha el servicio a finales de 2011, con el inicio del montaje del entramado de vías necesario para garantizar la movilidad de los vehículos tanto en las zonas de servicio como en las cocheras. Ya han comenzado a llegar las 300 piezas necesarias, que viajan desde Polonia a bordo de 16 camiones. Estas se instalarán con un revestimiento polímero (lo que se conoce en el argot como 'enchaquetado') para evitar la emisión de ruidos y vibraciones.

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