La Consejería de Obras Públicas está dispuesta a eliminar la reja, pero rechaza un tercer carril para el tráfico en el paseo de los Curas Junta y Ayuntamiento siguen sin alcanzar un acuerdo sobre qué hacer con la valla que separa el puerto de la ciudad
La verja que recorre el paseo de los Curas tiene una zanja provisional. :: SUR
La verja que separa el puerto de la ciudad sigue enclavada a lo largo del paseo de los Curas. Ese obstáculo se mantiene a pesar de que la Junta de Andalucía se comprometió eliminarlo en su totalidad. De momento, solo se ha retirado la valla que había en el acceso al recinto portuario por la plaza de la Marina. Desde que comenzó esa actuación, a mediados del pasado mes de diciembre, el tiempo ha ido discurriendo y el resto de la reja no se ha quitado. La falta de acuerdo entre la Junta y el Ayuntamiento juega a favor de que continúe habiendo una frontera de hierro que aísle el puerto de la ciudad.
La verja se alinea paralela al Palmeral de la Sorpresas, inaugurado el mes de marzo. El único acceso que hay para entrar en esa zona del recinto portuario es el de la plaza de la Marina. Está previsto que dentro de unos meses haya otro que permita adentrarse en esos jardines desde Cánovas del Castillo. Entre el Palmeral y el paseo de los Curas hay un desnivel, ya que el primero está situado a una altura superior. Esa diferencia de cota obliga a hacer unas rampas o escaleras para que la gente pueda acceder, obras que no se han realizado.
El principal escollo que impide el consenso entre la Junta y el Ayuntamiento está en que el Consistorio pretende que se habilite un tercer carril en el paseo de los Curas para el tráfico en dirección hacia Cánovas del Castillo, aprovechando el espacio que ahora ocupa la valla. La Junta, por su parte, no es partidaria de esa propuesta municipal. Considera que el aumento de la circulación restaría seguridad a los ciudadanos que accediesen al Palmeral de las Sorpresas.
Alternativas posibles
Fuentes de la Delegación del Gobierno Andaluz en Málaga, cuya responsable es Remedios Martel, aseguraron ayer a este periódico que, con la finalidad de hacer permeable el puerto, la Consejería de Obras Públicas - a través de la Empresa Pública de Suelo de Andalucía (Epsa- estudia con el Ayuntamiento las alternativas posibles para dar respuesta a la reivindicación ciudadana de quitar la verja. En ese sentido, precisaron: «Desde la consejería seguimos apostando por eliminar el tercer carril del paseo de los Curas con vistas a hacer el Palmeral de las Sorpresas accesible y seguro».
El argumento que la Junta esgrime para oponerse al aumento de la circulación de vehículos en esa zona se basa en que el Plan de Movilidad Sostenible, encargado por el Ayuntamiento y aprobado por la junta de gobierno local el pasado 23 de febrero, aboga por reducir la intensidad de tráfico en las principales avenidas de Málaga, entre ellas el paseo de los Curas. «Aún estamos esperando una respuesta en firme a nuestra propuesta. Esperamos que el alcalde se pronuncie al respecto», indicaron las fuentes citadas. Ese asunto lo planteará Remedios Martel en la reunión que mantendrá el 12 de julio con Francisco de la Torre.
«La frontera no es la verja, sino el tráfico, porque en estos momentos no se puede acceder al Palmeral por el paseo de los Curas. Y la situación sería aún más complicada si se crea un tercer carril», señalaron desde la Junta de Andalucía. El Ayuntamiento, por su parte, planteó la ampliación de la circulación por esa zona teniendo en cuenta que con las obras del metro en la Alameda y la plaza de la Marina habrá que desviar el tráfico.
El alcalde considera que la reja ya habría sido retirada si se hubiera respetado el proyecto inicial del arquitecto Jerónimo Junquera, que contemplaba crear un seto vegetal y poner un ensortijado metálico, y el acuerdo firmado en 2004 entre el Ayuntamiento y la Autoridad Portuaria.
De la Torre hizo esas declaraciones el día en que visitó de forma institucional el Palmeral junto al presidente de la Junta, José Antonio Griñán. En lo que ambos coincidieron fue en la necesidad de crear más entradas a ese recinto ajardinado. Una de ellas se habilitaría a la altura del Eduardo Ocón.
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