Marina Internacional de Marbella lleva al TSJA la adjudicación del proyecto y pide la suspensión cautelar del proceso para ampliar el puerto
Recreación del estado en el que quedará el nuevo puerto, según el proyecto. :: JOSELE-LANZA
El proyecto de ampliación del puerto de La Bajadilla de Marbella se estanca. La firma del contrato entre la Junta de Andalucía y la empresa adjudicataria, la unión temporal de empresas (UTE) liderada por el jeque catarí Abdullah Ben Nasser Al-Thani, propietario del Málaga CF -y en la que también participa el Ayuntamiento de Marbella- tendrá que esperar a una resolución judicial que decida si se puede retomar el proceso.
El Consorcio Unión Temporal de Empresarios Marina Internacional de Marbella, el otro grupo que presentó su oferta al concurso público para transformar el puerto, ha decidido llevar al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) la adjudicación de la ampliación de la marina acordada el 6 de junio de 2011 a favor de la oferta de la UTE Nasir Bin Abdullah & Sons, SL, el Ayuntamiento de Marbella y Puerto Deportivo de Marbella, al entender que no se han respetado las bases que fijaba el pliego de condiciones.
Según pudo conocer SUR, junto al recurso contencioso-administrativo, el grupo denunciante ha solicitado la suspensión cautelar del proceso, lo que paraliza de momento la firma del contrato entre la Junta de Andalucía y los adjudicatarios y, por tanto, el inicio de las obras. No será hasta que el juez se pronuncie sobre la petición de esa suspensión cautelar cuando se pueda poner fecha a la rúbrica del acuerdo. En caso de que se rechace, la intención del Gobierno andaluz es continuar con los trámites para el arranque de los trabajos, aunque la vía judicial paralela siga abierta.
Solvencia económica
En julio pasado, la Junta de Andalucía desestimaba el recurso presentado por Marina Internacional contra el proceso de adjudicación de la ampliación de La Bajadilla, defendiendo la solvencia económica del Ayuntamiento y de la empresa del jeque Al-Thani para asumir la obra. Una vez agotada la vía administrativa tan solo cabía interponer directamente recurso contencioso-administrativo ante el TSJA en un plazo de dos meses. Casi al límite, el grupo de empresarios han decidido presentar pleito en los tribunales.
Los denunciantes argumentan la «falta de solvencia económico-financiera del adjudicatario». Así, han venido sosteniendo que ninguno de los integrantes de la UTE cumplen el requisito de la facturación media de 30 millones de euros en los últimos tres años. Asimismo añadían que el propio Ayuntamiento de Marbella, «aun calificado como empresario y licitador», carece de facturación en sentido estricto.
Estos argumentos fueron desestimados por la Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA) que defendió la solvencia económica y financiera de la Unión Temporal de Empresas. Ahora, el asunto queda en manos de la justicia.
No ha sido este el único reparo que el grupo de empresas Marina Internacional de Marbella encontró el proceso. En su día llevaron igualmente ante el TSJA la integración del Ayuntamiento de Marbella en la unión temporal de empresas.
La Junta de Andalucía se decantó en junio de este año por la oferta liderada por el jeque catarí, en la que está presente el Ayuntamiento marbellí con un tres por ciento, para que dé forma a la remodelación de la marina y gestione durante los próximos 40 años el recinto náutico ubicado en pleno centro de Marbella.
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