Los contactos con los promotores de las torres de Martiricos para aplazar los pagos del convenio también están bloqueados Urbanismo no logra culminar la adquisición de los suelos de Arraijanal
El Ayuntamiento ya es el propietario del 60% de Arraijanal pero no ha logrado hacerse aún con el resto de parcelas. :: SUR
Hace un mes que el equipo de gobierno municipal logró sellar el acuerdo con el principal propietario de los suelos de Arraijanal -la empresa Vallehermoso- para hacerse con los terrenos en los que el Málaga ha proyectado la construcción de una academia de fútbol. Los responsables de la Gerencia de Urbanismo confiaron entonces en que, tras hacerse con el 60% de la parcela, la negociación para obtener el resto, en manos de casi una decena de pequeños propietarios, sería más fácil. Sin embargo, no ha sido así.
Según pudo conocer este periódico, Urbanismo no ha podido cerrar todavía el acuerdo con los dos propietarios siguientes en metros cuadrados. Yeregui y Progofer, sociedades que poseen el 17% y el 14%, respectivamente, de Arraijanal. Para que la academia del Málaga pueda encajar, resulta especialmente necesaria la obtención de las parcelas de Yeregui. El Ayuntamiento tenía muy avanzado el acuerdo con esta sociedad pero, a última hora, se ha torcido porque no están claros algunos flecos en relación a los derechos urbanísticos con los que el Consistorio le compensará, que serán las viviendas de protección oficial previstas en el proyecto a desarrollar en los antiguos terrenos de Repsol.
El Consistorio confía en poder reconducir la negociación con Yeregui en los próximos días, y hacer lo propio con Progofer. En este caso, las posturas están todavía más distantes, por lo que resultará complicado.
Expropiación
Aunque el gobierno municipal siempre ha apuntado que, si no puede llegar a un acuerdo con los propietarios de Arraijanal, podría tomar la vía de la expropiación, en el fondo este camino no es el deseado por el Ayuntamiento, ya que la actual merma de las arcas municipales hace complicado poder asumir nuevas obligaciones por el pago de terrenos para equipamientos.
En el peor de los casos, el Málaga tendría que variar la huella de la academia proyectada para ajustarla a los suelos que la ciudad ya ha comprado a Vallehermoso. Sin embargo, ninguna de las partes quiere llegar de momento a ese extremo.
Pero las negociaciones no solo están enquistadas en Arraijanal. Tampoco se vislumbran resultados inmediatos en el caso de las que Urbanismo mantiene con promotores de proyectos recogidos en el nuevo Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) para aplazar los pagos del dinero contemplado en los convenios que se firmaron hace varios años, todavía en la 'burbuja inmobiliaria'. Con los empresarios de las torres previstas en Martiricos el acuerdo estaba a punto de caramelo para esta misma semana. Sin embargo, también se ha complicado a última hora. Está en juego el cobro a plazos de 11,6 millones de euros. Mayor montante supone la renegociación del convenio de Repsol, del que la ciudad tiene que percibir aún 70,3 millones.
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