Los movimientos de tierras denunciados por Cilniana en el entorno del yacimiento arqueológico carecen de licencia municipal
17.01.2012 -
Una excavadora trabaja en el entorno del yacimiento. :: SUR
El Ayuntamiento de Benahavís ha paralizado las obras que se acometían desde hace días en el entorno de 'Cerro Colorao', zona declarada Bien de Interés Cultural (BIC) por la Junta de Andalucía en 2009. El Consistorio ordenó el cese de la actividad ayer por la mañana tras la visita que realizaron técnicos del servicio de Inspección de Obras y comprobar que los trabajos carecían de licencia municipal.
En el escueto comunicado enviado por el Consistorio benahavileño no se hace mención al valor arqueológico del yacimiento. Sin embargo, la decisión ha sido acogida con los brazos abiertos por la Asociación Cilniana en Defensa del Patrimonio Histórico. «Ahora habría que evaluar los daños y, llegado el caso, pedir indemnizaciones», asegura la presidenta del colectivo, Catalina Urbaneja. La cabeza visible de la asociación recibió ayer la autorización de la comunidad de propietarios Vega del Colorado, donde se asienta el yacimiento, para poder entrar y conocer de primera mano los daños ocasionados. Urbaneja, que solicitó vía fax el visto bueno de la urbanización para acceder a la zona, irá acompañada de arqueólogos de Cilniana y del arquitecto de la propiedad, aunque todavía no hay una fecha fijada. De esta manera se cumple con los preceptos que dicta la Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía. La norma recoge el derecho de visita gratuita a los BIC que se encuentren en propiedad privada, al menos, cuatro días al mes.
Las alarmas saltaron hace una semana, cuando, tal y como avanzó este periódico el pasado domingo, varios miembros de Cilniana detectaron la actividad de máquinas excavadoras en el entorno. El colectivo puso los hechos en conocimiento de los agentes de la Guardia Civil pertenecientes a la patrulla del Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza) y de la Delegación Provincial de Cultura de la Junta de Andalucía.
Los conocidos como vestigios de 'Cerro Colorao' fueron descubiertos en la zona destinada a la construcción de un hotel de cinco estrellas. Hace tres años la Junta otorgó a los restos, datados en el siglo IV antes de Cristo y ubicados a caballo entre Marbella y Benahavís, de una consideración especial. La zona arqueológica declarada ocupa una extensión de 7.319 metros cuadrados, a la que se añade un entorno de protección de 53.846 metros cuadrados que abarca todo el cerro en el que se ubica, pero que, sin embargo, ha resultado insuficiente.
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