El expositor del Ayuntamiento de Málaga en el SIMA detecta el creciente interés de compradores madrileños por la segunda residencia en la capital. La consultora Aguirre & Newman augura que la venta de primera vivienda tardará dos años en recuperarse y la segunda residencia, cuatro
Las dos horas y media de recorrido en tren entre Málaga y Madrid, gracias a la Alta Velocidad, están cambiando los hábitos de compra en la vivienda en la capital española. La cercanía está despertando el interés en muchos inversores por la adquisición de una segunda vivienda en Málaga. El expositor que el Ayuntamiento de Málaga ha montado en el Salón Inmobiliario de Madrid (SIMA), que se inauguró el martes, ha sido el termómetro para esta nueva demanda."Es todavía algo muy nuevo, pero ya estamos notando que hay madrileños que se acercan interesados en comprar una casa en Málaga", comenta Pilar Alonso, responsable de la Gerencia Municipal de Urbanismo.El hecho es que este fenómeno todavía es naciente, ya que el AVE lleva funcionando desde finales de diciembre, pero creciente. El SIMA es el escaparate para apreciar las tendencias de un alicaído mercado inmobiliario y Málaga capital se ha encontrando con esta inesperada demanda que puede animar un lánguido mercado.Precisamente el AVE es uno de los aspectos en los que el Ayuntamiento basa su campaña turística en los últimos meses y está empezando a calar. Alonso reconoce que la segunda vivienda (o vivienda turística) no es uno de los principales mercados de la capital, aunque este interés gracias a la Alta Velocidad puede ser muy beneficioso. La presencia de Málaga capital con un expositor propio en el SIMA también ha permitido tantear la demanda inversora de las grandes promotoras. La ampliación del PTA, uno de los proyectos presentados en el SIMA, ha atraído el interés de varias empresas, como la posibilidad de construir residencias universitarias. La empresa BTA & Associates ya se encuentra buscando terreno en la ciudad, especialmente en los alrededores del campus, para plantear estos proyectos.Perspectivas. La evidente crisis de mercado inmobiliario también se ha dejado ver en el SIMA. Los proyectos de viviendas en la provincia de Málaga han bajado un 42% respecto a la edición pasada, con 12.200 frente a las 21.000 del año 2007. Y parece que la situación no mejora para los próximos años.Luis Cocero, director del área Residencial de Aguirre & Newman, afirma que el mercado de segunda residencia en Málaga está prácticamente parado y que sólo se mantiene algo activo la primera residencia "por una cuestión de necesidad". Esta empresa está reajustando su estrategia en Málaga para centrarse en ese mercado de la primera vivienda, que esperan que se recupere totalmente en dos años. "A la segunda residencia le quedan al menos cuatro años, porque el mercado está prácticamente muerto", indica.Andrés Cuevas, responsable de Procusán, que junto a Sando fueron las únicas promotoras malagueñas con expositor propio, reconoce que las casas de segunda mano todavía tienen margen para bajar los precios, pero no así las nuevas: "Los precios ya se han ajustado y dependen de los costes y sueldos". Cuevas reconoce que todavía hay una demanda de compradores de viviendas que no se atreve a dar el paso "pensando que los precios van a bajar más", algo que estima que no va a ocurrir.En este panorama, algunas promotoras malagueñas están empezando a estudiar inversiones en el extranjero, como asevera Julia Serrano, directora de Residencial de Cushman & Wakefield, especializada en gestionar inversiones inmobiliarias en otros países. Serrano indica que el empresariado malagueño se aferraba el año pasado a seguir vendiendo en la Axarquía "donde todavía hay mercado", pero el agotamiento progresivo del sector "hace que ya muchos se planteen invertir en otros países", especialmente en Europa del Este y Sudamérica.
Las dos horas y media de recorrido en tren entre Málaga y Madrid, gracias a la Alta Velocidad, están cambiando los hábitos de compra en la vivienda en la capital española. La cercanía está despertando el interés en muchos inversores por la adquisición de una segunda vivienda en Málaga. El expositor que el Ayuntamiento de Málaga ha montado en el Salón Inmobiliario de Madrid (SIMA), que se inauguró el martes, ha sido el termómetro para esta nueva demanda."Es todavía algo muy nuevo, pero ya estamos notando que hay madrileños que se acercan interesados en comprar una casa en Málaga", comenta Pilar Alonso, responsable de la Gerencia Municipal de Urbanismo.El hecho es que este fenómeno todavía es naciente, ya que el AVE lleva funcionando desde finales de diciembre, pero creciente. El SIMA es el escaparate para apreciar las tendencias de un alicaído mercado inmobiliario y Málaga capital se ha encontrando con esta inesperada demanda que puede animar un lánguido mercado.Precisamente el AVE es uno de los aspectos en los que el Ayuntamiento basa su campaña turística en los últimos meses y está empezando a calar. Alonso reconoce que la segunda vivienda (o vivienda turística) no es uno de los principales mercados de la capital, aunque este interés gracias a la Alta Velocidad puede ser muy beneficioso. La presencia de Málaga capital con un expositor propio en el SIMA también ha permitido tantear la demanda inversora de las grandes promotoras. La ampliación del PTA, uno de los proyectos presentados en el SIMA, ha atraído el interés de varias empresas, como la posibilidad de construir residencias universitarias. La empresa BTA & Associates ya se encuentra buscando terreno en la ciudad, especialmente en los alrededores del campus, para plantear estos proyectos.Perspectivas. La evidente crisis de mercado inmobiliario también se ha dejado ver en el SIMA. Los proyectos de viviendas en la provincia de Málaga han bajado un 42% respecto a la edición pasada, con 12.200 frente a las 21.000 del año 2007. Y parece que la situación no mejora para los próximos años.Luis Cocero, director del área Residencial de Aguirre & Newman, afirma que el mercado de segunda residencia en Málaga está prácticamente parado y que sólo se mantiene algo activo la primera residencia "por una cuestión de necesidad". Esta empresa está reajustando su estrategia en Málaga para centrarse en ese mercado de la primera vivienda, que esperan que se recupere totalmente en dos años. "A la segunda residencia le quedan al menos cuatro años, porque el mercado está prácticamente muerto", indica.Andrés Cuevas, responsable de Procusán, que junto a Sando fueron las únicas promotoras malagueñas con expositor propio, reconoce que las casas de segunda mano todavía tienen margen para bajar los precios, pero no así las nuevas: "Los precios ya se han ajustado y dependen de los costes y sueldos". Cuevas reconoce que todavía hay una demanda de compradores de viviendas que no se atreve a dar el paso "pensando que los precios van a bajar más", algo que estima que no va a ocurrir.En este panorama, algunas promotoras malagueñas están empezando a estudiar inversiones en el extranjero, como asevera Julia Serrano, directora de Residencial de Cushman & Wakefield, especializada en gestionar inversiones inmobiliarias en otros países. Serrano indica que el empresariado malagueño se aferraba el año pasado a seguir vendiendo en la Axarquía "donde todavía hay mercado", pero el agotamiento progresivo del sector "hace que ya muchos se planteen invertir en otros países", especialmente en Europa del Este y Sudamérica.
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